Aunque vivimos en un mundo normalmente muy activo, parece que a veces las cosas se tuercen y nos invade la desidia, algo que suele afectar a los adolescentes, especialistas en aburrirse rápidamente de las actividades que realizan, sobre todo si son monótonas y repetidas en el tiempo.
Para poder revertir esta situación, no basta con recurrir a los videojuegos, hay que tirar de imaginación y creatividad y proponer actividades diferentes con las que puedan disfrutar tanto ellos, como el resto de miembros de la casa.
Las siguientes ideas están pensadas no solo para que puedan pasar un buen rato y huir de la rutina, sino para que descubran nuevas aficiones e intereses que puedan desarrollar con el tiempo.
Sí, es cierto, todo el mundo recurre a la repostería en momentos de aburrimiento, pero no suelen hacerlo los adolescentes, que prefieren limitarse a probar el postre una vez esté terminado. Y el motivo por el que no se ponen manos a la masa es porque no encuentran recompensa en el proceso.
Hay que llamar su atención. ¿Cómo? Con retos que puedan compartir con sus amigos en redes sociales, o con el objetivo de descubrir sabores nuevos, o de hacer experimentos como si de un laboratorio se tratase…
Excusas hay miles, solo hay que encontrar la que mejor se adapte a cada uno y les lleve de cabeza a la cocina.
Si necesitas algunas ideas, aquí las tienes: puedes comprar moldes de galletas de su serie favorita, proponer hacer un bizcocho con la forma de la Estrella de la Muerte de Star Wars, o replicar esa tarta de fondant que tanto se comparte en Instagram.
Si ves que nada de eso funciona, pasarte una semana sin comprar postre puede ser la solución. Quien algo quiere, algo le cuesta…
Con tanto tiempo libre, ¿por qué no dedicarlo a algo tan divertido como descrubrir artistas y géneros musicales que puedan abrir nuevos horizontes?
Hoy en día la música que gusta a los adolescentes es muy limitada y se suele basar en lo que ponen en la radio y lo que escuchan sus amigos, pero el universo musical es mucho más que reggaetón, está lleno de estrellas –actuales y de toda la vida–, que pueden hacer que el mundo interior se tambalee con solo un par de notas.
Por suerte para ti, existen un montón de aplicaciones que ayudan a descubrir música de todo tipo, recomendando artistas en función de los que se ha escuchado previamente, como Spotify, SoundCloud o Last.fm.
Todos tenemos talentos ocultos que no hemos explotado, ya sea por desconocimiento, por vergüenza o por falta de determinación.
También todos tenemos en casa lápiz y papel para poder dibujar el paisaje que se ve desde la ventana, o pintar un retrato de algún miembro de la familia, o para comenzar a escribir una historia de miedo, por ejemplo.
Y es raro aquel que no tenga un teléfono móvil propio con cámara de fotos. Gracias a un montón de aplicaciones fotográficas, hoy en día es posible convertirse en fotógrafo fácilmente consiguiendo resultados sorprendentes.
Hacer un reto o un concurso que involucre a varios miembros de la familia, para ver quién consigue más likes en redes sociales puede ser una buena manera de adentrarse en ese apasionante mundo lleno de creatividad.
Aunque muchas personas no lo ven así, el conocimiento y todo lo que implique formarse también es una fuente de placer, especialmente cuando se estudia algo que realmente gusta.
Una vez descubrimos ese talento oculto del que hablábamos en el punto anterior, es el momento de llevarlo un paso más allá y hacer un curso de formación que permita obtener unas bases para desarrollar dicho talento y convertirlo en una pasión.
Y el hecho de encontrar un curso de calidad no necesariamente tiene que implicar un fuerte desembolso de dinero. En la actualidad, internet está plagado de cursos online gratuitos o muy baratos impartidos por profesionales de infinidad de materias.
Uno de los sectores que más fuerte está empujando es el de la ciberseguridad. En nuestro artículo Cómo ser un hacker desde cero se puede encontrar información detallada y herramientas para comenzar iniciarse en una de las profesión con mayor proyección de futuro.
Como ves, potenciar la actividad mental de los jóvenes dentro de casa no es tan complicado como puede parecer en un principio. Con un poco de picaresca y originalidad no solo conseguirás quitarles de encima el aburrimiento, sino que muy probablemente hagas que descubran nuevas aficiones que incluso puedan desarrollar profesionalmente en un futuro.