Lisboa es una de las ciudades que más atrae a los españoles. Su historia, sus puentes, sus tranvías, sus monumentos y su cercanía son algunas de las razones para conocer esta hermosa ciudad y, más aún, para desear volver a ella.
Entre algunos de los lugares especiales de Lisboa se encuentran:
Praça do Comércio
Rodeada por elegantes edificios y con vista al río Tajo (Tejo en portugués), es la plaza más importante de Lisboa. Un lugar emblemático del imperio portugués, donde vivían los reyes y se intercambiaban especias y bienes coloniales por oro.
Fue construida en el lugar donde se encontraba el palacio real, que fue destruido por un terremoto en 1755, como se informa en TheGuardian.com
También fue en este lugar donde, en 1974, un golpe militar se convirtió en un movimiento de democracia popular con claves rojos que decoraban los cañones de los rifles.
En la Praça do Comércio existen dos puntos de especial interés: el Arco Triunfal da Rua Augusta y la estatua ecuestre de José I.
Miradouro da Graça
Gracias al clima de Lisboa es posible estar al aire libre gran parte del año y visitar los miradores de la ciudad, lugares perfectos para disfrutar con los amigos.
En el Miradouro da Graça, que está muy por encima de los típicos tejados de Lisboa, se puede disfrutar de la brisa mientras se bebe una cerveza o un café. Es posible contemplar una magnífica vista del castillo medieval, del puente colgante, el río y de la estatua de Cristo.
Este lugar ofrece un paisaje fascinante, especialmente fotogénico al atardecer.
Bistro 100 Maneiras
Ljubomir Stanisic, propietario de este lugar, nació en Sarajevo y se fue a Portugal huyendo de la guerra cuando era niño. Ahora es un chef famoso, autor de varios libros y tiene su propio programa de televisión.
Bistro 100 Maneiras, es una mansión art déco situada en el concurrido distrito de Bairro Alto, un espacio elegante pero informal donde ofrecen una refinada selección de cócteles y de los mejores vinos portugueses. En este restaurante se puede cenar aproximadamente con 40 euros por persona.
Oceanario de Lisboa
Situado en el moderno Parque das Nações, es el destino perfecto para un día lluvioso. En el Oceanario de Lisboa se encuentran criaturas acuáticas de todo tipo: estrellas de mar, coloridas anémonas y corales, medusas fluorescentes, ranas exóticas, peces dragón, pingüinos y nutrias marinas. En el tanque central de cristal están los más grandes, como los peces luna, mantarrayas y tiburones.
Museo Nacional dos Coches
En el Museo Nacional dos Coches se pueden contemplar automóviles muy interesantes, como el vehículo más antiguo, de 1619, que llevó a Felipe III de España a Lisboa para tomar el trono. También se exhiben tres coches que se fabricaron en 1716 y que fueron enviados a Roma por João V «el Pío», el rey portugués más rico, con el propósito de demostrar al Papa su gran devoción y la prosperidad de su imperio.
Estoril
A unos treinta minutos de Lisboa se encuentra Estoril, con su famoso Casino fundado en 1935, el más grande de la península ibérica. Elegante y con estilo, Estoril alcanza un equilibrio perfecto entre el encanto portugués y las excelentes instalaciones turísticas.
Entre los lugares de interés turístico de este lugar se incluyen las maravillosas playas, poblaciones históricas para explorar y campos de golf de categoría profesional.
Durante mucho tiempo, Estoril se ha asociado con ricos y famosos que son atraídos por el glamur del imponente casino. Durante la Segunda Guerra Mundial, el casino de Estoril fue un refugio para espías, que realizaron negociaciones secretas y algunas actividades que se describen en el primer libro de Ian Fleming, Casino Royale.
Su reputación fue reforzada cuando el casino apareció en 007, al Servicio Secreto de Su Majestad, la película de James Bond de los años 70. Actualmente, Estoril todavía conserva una atmósfera exclusiva y próspera; sin embargo, su concepto de turismo ha cambiado, hasta convertirse en un destino ideal para las vacaciones familiares.