Según las cifras más recientes de Greenpeace, aproximadamente el 90% del plástico no se recicla. En el caso de España, los números globales indican que solo se consigue reciclar un 30% de los desechos plásticos.
Debido a la urgencia que representan los datos indicados anteriormente y con el propósito de reducir los niveles de contaminación, la ONG ha comenzado una campaña internacional centrándose en las cadenas de supermercados.
Actualmente, para la ONG el fin no es solo reducir o eliminar el uso de las bolsas de plástico. Ahora busca un cambio en las políticas de los supermercados, en cuanto a la eliminación de los plásticos llamados “de solo un uso”: los envases plásticos que se utilizan para las frutas y las verduras, por ejemplo.
La intención es que las cadenas de alimentación ofrezcan opciones sostenibles al consumidor, como la venta a granel o el uso de materiales biodegradables en los embalajes.
Greenpeace se está centrando en lograr que las cadenas de supermercados sean líderes del cambio y ofrezcan alternativas amigables con el medio ambiente. Si las cadenas no asumen un compromiso activo, los residuos y envases plásticos continuarán llegando por toneladas a los océanos.
Según ha informado El Independiente, en las redes sociales se está llevando a cabo una campaña con el hashtag #DesnudaLaFruta. Se trata de subir fotos a las redes de frutas “sobre envasadas”, con la idea de concienciar a la sociedad sobre el uso excesivo del plástico en los supermercados.
En la ciudad de Ámsterdam, los supermercados ecológicos Ekoplaza han inaugurado su primera instalación libre de plástico, en la cual se ofrecen más de 7.000 productos de bebidas y alimentación sin utilizar este material. Los productos se venden a granel, envueltos en cartón o papel.
