El barco es propiedad de la empresa Royal Caribbean y ya ha realizado su primer viaje por el Mediterráneo. Tiene una capacidad para transportar a 9.000 personas entre pasajeros y la tripulación.
Los viajes en crucero por el mar Caribe o el Mediterráneo han tomado un nuevo nivel con la construcción y puesta en funcionamiento del barco más grande de la historia.
Se trata del “Symphony of the Seas”, de la empresa Royal Caribbean, un colosal barco de 362 metros de eslora que tiene una capacidad para transportar a 9.000 personas entre huéspedes (6.600) y tripulantes (2.200).
Con 2.759 cabinas, el barco es 5 cinco veces más grande que el Titanic y cuenta con 40 restaurantes y bares, 23 piscinas, 2 rocódromos de 15 metros, 2 simuladores para el surf, tirolina de 25 metros, cancha de mini-golf, gimnasio, casino, teatro y docenas de lugares para realizar compras o buscar cualquier forma de entretenimiento.
Los clientes del «Symphony of the Seas» pueden elegir entre una gran variedad de zonas de entretenimiento (The World News)
Esta maravilla de la ingeniería es la última muestra de cómo el mercado de cruceros se ha transformado en las últimas 2 décadas, al pasar de ser barcos para el transporte, a ser verdaderas ciudades flotantes.
Como resultado de este “boom”, la industria de los cruceros está experimentando una época dorada impulsada principalmente por los millennials y un vertiginoso crecimiento de turistas chinos. De hecho, más de 25 millones de personas zarparon en un crucero durante el 2017.
Mercado en expansión
Tom Wright, fundador de la firma WKK Architects, afirma que para muchas personas la idea de un crucero es estar encerrados con miles de pasajeros con los que no se quiere hablar, lo que se traduce en aburrimiento. Sin embargo, para Wright:
“los cruceros son como hoteles que simplemente se mueven mágicamente por la noche”.
Wonderland Imaginative Cuisine, uno de los 22 restaurantes del «Symphony of the Seas», inspirado en Alicia en el País de las Maravillas (The World News)
El mercado demuestra que está en pleno proceso de expansión. Por este motivo las empresas ordenan la fabricación de barcos más grandes y lujosos. En el caso de Royal Caribbean la compañía ya cuenta con 25 de estas naves.
Desde Southampton hasta Venecia, o desde Miami a Barbados, los puertos están repletos de barcos de casco blanco con miles de viajeros que buscan entretenimiento y distracción.
Richard Fain, presidente de Royal Caribbean desde 1988, ha sido el responsable de transformar a los cruceros en mega-atracciones.
Fue el propio Fain quien se dio cuenta de que la pobre imagen que tenían los cruceros hace 20 años era en realidad una oportunidad.
La idea era convencer a los escépticos de que los cruceros no eran aburridos o desactualizados. Hasta dentro de la industria se bromeaba al decir que los viajes estaban llenos de “recién casados y casi muertos”. Se trataba de un problema de percepción. Para lograr el objetivo se necesitaba construir un nuevo tipo de barco.
El Royal Theatre de «Symphony of the Sea». Fotografía de Benedict Redgrove.
Flota moderna
El “Symphony of the Seas” es el cuarto barco de la clase Oasis de Royal Caribbean, la más moderna línea de cruceros de la compañía. El gigante tiene un peso de 228.081 toneladas y su altura roza los 73 metros. Además, dispone de 7 vecindarios exclusivos con una variedad temática para todos los gustos.
Con 16 cubiertas disponibles, el aventurero siempre tendrá alternativas para la diversión diurna o nocturna. Entre estas también se incluyen el tobogán más alto que se ha construido para un crucero, pista de patinaje sobre hielo, club de jazz y una discoteca en la que cada asistente puede escuchar la música de su preferencia a través de cascos.
Atracción que envía a los pasajeros a una caída de 92 pies (The World News)
Para abastecer toda la demanda de energía el barco ha sido equipado con 6 motores diesel. Cuatro con capacidad de 14.400 kW y otros 2 de 19.200 kW. En cuanto al consumo de alimentos se estima que, por ejemplo, en 1 semana los pasajeros consumen unos 9.000 kilos de papas.
Cuatro motores diesel de 14,400kW y dos de 19,200kW impulsan el barco. Fotografía de Benedict Redgrove.
Una de las novedades entre sus camarotes son las 27 suites de 51 metros cuadrados cada una con split-level. Es decir, se trata de espacios con 2 ambientes conectados a través de una escalera.
La temporada en el mediterráneo fue inaugurada con travesías de 7 a 9 noches que incluyeron escalas en los puertos de Barcelona, Palma de Mallorca, Marsella, Florencia, Roma y Nápoles. Los paquetes son comercializados desde 961 euros por persona.
Después de sus viajes en territorio europeo se espera que el “Symphony of the Seas” tenga como base de operaciones la ciudad de Miami, en los Estados Unidos.
