Los beneficios de internacionalizar un negocio han quedado especialmente puestos de relieve durante los últimos años. Por ejemplo, durante los períodos de crisis que hemos vivido en nuestro país y la inestabilidad que se ha generado a nivel económico a consecuencia de estos. Contar con una estructura de negocio sólida en diferentes países se traduce como una fuente de estabilidad, ingresos y, también, de innovación.
El proceso de transformación digital ha renovado todos los segmentos y sectores de actividad de nuestra economía. La irrupción de la tecnología ha generalizado la implementación de herramientas automatizadas en diferentes ámbitos. Los softwares en la nube han roto con todas las restricciones geográficas que había presentes en el modelo convencional. Cualquier usuario puede acceder a un software sin importar dónde se encuentre.
Traducción e internacionalización: La clave del éxito
No obstante, a veces no sólo basta con invertir en su desarrollo técnico y creativo. Su promoción y posicionamiento en el mercado es uno de los principales factores de éxito, especialmente en un contexto en el que la competitividad es cada vez mayor. Para incrementar el poder de captación de clientes e incrementar los volúmenes de ventas es importante visibilizar nuestro producto y, por supuesto, garantizar su disponibilidad y consumo en diferentes idiomas.
En este contexto aparecen empresas especializadas en servicios de traducción para empresas tecnológicas como Blarlo. Entre sus servicios, ofrecen la traducción profesional de videojuegos y softwares. Esto incluye su localización, traducción (también de manuales), subtitulación o locución.
Pero, ¿aún no conoces cuáles son los beneficios de internacionalizar una empresa? A continuación te hablamos de ellos. ¡Toma nota!
La internacionalización se traduce en un valor diferencial
Un proceso de internacionalización supone mucho más que acceder a un mercado extranjero o incrementar las probabilidades de vender en otros países de forma puntual. Por ejemplo, tener la oportunidad de competir con una cantidad superior de empresas B2B con sede en otros países. Esto a su vez, permite obtener una visión estratégica más completa porque podrás identificar cambios y tendencias en tu segmento, algo que, a largo plazo, supondrá un importante factor de crecimiento y abrirá nuevas líneas de expansión a todos los niveles.
Optimización de recursos
Crear una buena planificación estratégica te proporcionará la oportunidad de sacar mayor rendimiento a los costes fijos de tu empresa. Con una planificación adaptada es mucho más fácil amortizar las inversiones realizadas que puedan generar un impacto en diferentes mercados y al final, proporcionar un retorno de beneficios a partir de diferentes vías.
La automatización se sitúa como uno de los elementos clave en este contexto. Si deseas que tu empresa gane estabilidad y se sostenga de forma perdurable en el tiempo, deberás optar necesariamente por la automatización de procesos.
Invertir en este tipo de recursos te ayudará a construir un ecosistema que se retroalimente con sus propios recursos y que sea capaz de adaptarse a las necesidades y horarios de tus clientes potenciales rompiendo con las restricciones tradicionales.
Contribuye a mejorar la reputación de marca
Tener presencia internacional, indudablemente, reporta cierto valor. La internacionalización contribuye a mejorar la reputación de marca. Tanto los clientes potenciales, como los socios estratégicos o los medios de comunicación, sentirán mayor predisposición a confiar en una empresa asentada en diferentes países. Visitar una página web corporativa y ver un mapa de actividad o un directorio de sedes en diferentes países, proporciona un aura de seriedad y profesionalidad que, sin duda, tiene un importante potencial persuasivo.
La internacionalización como fuente de sinergias e innovación
El impacto de la internacionalización es, en la mayoría de ocasiones, difícil de prever. No obstante, una de las consecuencias más naturales del proceso es la generación de una red de contactos de interés insertados en otros mercados. Esto proporciona oportunidades de negocio pero, al mismo tiempo, deriva en la adquisición de conocimientos. Establecer vínculos con otras compañías afines puede ayudar a identificar oportunidades de mejora.
El componente innovador inherente a este tipo de relaciones puede tener un poderoso alcance en otros mercados lo cual, al final, contribuye a incrementar las posibilidades de crecimiento y desarrollo. Contar con un mapa de interpelaciones basado en la retroalimentación continuada en el tiempo reduce los riesgos de que tu compañía sufra bloqueos estratégicos, conceptuales y de desarrollo. Una continua exposición a las prácticas y apuestas de otros actores que integran los mercados extranjeros se traduce en importantes fuentes de inspiración y renovación.
Contar con diferentes escenarios y ámbitos de acción también proporciona un mayor potencial para hacer experimentos. Implementar estrategias de venta o promoción distintas en cada país puede arrojarnos información de utilidad de forma más dinámica, lo cual se traduce al final en una mayor capacidad de perfeccionamiento a largo plazo.
Multiplicación de colaboradores
¿Cuál debería ser el primer paso en el proceso de internacionalización? En realidad, existen diferentes estrategias. No obstante, una de las más comunes es la internacionalización a partir de Partners locales. Por descontado, todo planteamiento orientado a crecer supone una necesaria inversión económica, pero también en capital humano.
Introducirnos en un nuevo mercado contando con el apoyo de un partner asentado en él, te ayudará a incrementar tu plantilla, pero no de forma descontrolada. Además, el know how y las competencias de tu equipo de trabajadores podrán enriquecerse gracias a la creación de sinergias colaborativas directas o indirectas con partners asentados en otros países.
A medida que tu negocio vaya abriéndose paso en mercados extranjeros, su crecimiento irá asociado a un incremento natural de colaboradores, empleados y partners.
Incremento de rentabilidad
El diseño de una estrategia bien estudiada te ayudará a superar los escollos y obstáculos naturales del proceso de internacionalización. Una vez que eso ocurre, la primera consecuencia directa será la percepción de un volumen de beneficios económicos superiores. Tu empresa se convertirá en un motor de riqueza y, poco a poco, ganará en capacidad de rentabilidad.
Diversificación de riesgos
La distribución de riesgos es otro de los puntos fuertes de la internacionalización. Contar con sedes en diferentes países convertirá a tu compañía en una entidad menos vulnerable, por ejemplo, a las crisis que se originan a nivel nacional. Poseer vías de rentabilidad externas se traduce en un respaldo a nivel de ingresos que, en las situaciones más difíciles, puede ayudar a aplacar los riesgos y las posibles pérdidas derivadas de factores ajenos a nuestro control.
Una oportunidad para ganar solidez
La adquisición de sinergias, conocimientos avanzados, herramientas y recursos de innovación o un respaldo financiero sin duda, repercute en la consolidación. Tu compañía ganará en robustez y resistencia ante posibles contratiempos y limitaciones lo cual se convierte en una garantía de supervivencia.
Ayuda a extender el ciclo de vida útil de tus productos y servicios
Establecer un mapa de influencia puede incrementar el ciclo de vida útil de tus productos. Si, por ejemplo, tu oferta pasa a ser menos competitiva dentro de mercados más asentados, quizá una buena opción sería impulsar las estrategias de venta dentro de economías emergentes.