La depresión se caracteriza por una sensación de tristeza persistente, que todo lo abarca, y una pérdida de interés por muchas actividades que en una perspectiva más general serían totalmente disfrutables. Sí, la depresión cambia mucho a las personas.
Las cambia al punto de afectar no solo su vida diaria en el trabajo, en las relaciones sociales o en los ratos de ocio, sino que también puede incidir en la forma en que las personas piensan, se sienten y actúan, desde un punto más introspectivo. Es peligrosa, claro está, pero hay muchos tratamientos y soluciones posibles.
¿Cómo saber si alguien tiene depresión?
Las personas se conocen a sí mismas. Eso, a grandes rasgos. Por lo tanto, posiblemente noten algunos cambios o las propias interacciones humanas les hagan percibirlos. Sin embargo, la mejor manera de saber si se tienen síntomas de depresión y de encontrar soluciones eficaces para ello es visitando a un psicologo depresion Madrid, puesto que solo los profesionales pueden ahorrar el camino tortuoso del descubrimiento del padecimiento, ya que esto solo suele ser visible cuando hay síntomas graves o cuando la depresión comienza a inmiscuirse en la vida diaria.
En sí, hay síntomas que sí se pueden etiquetar como inequívocos de presencia de depresión:
- Sentimientos de tristeza o desánimo persistentes.
- Pérdida de interés o placer en actividades que antes se disfrutaban.
- Cambios en el apetito: aumento o pérdida de peso no relacionados con la dieta.
- Dificultad para dormir o dormir demasiado.
- Pérdida de energía o fatiga.
- Dificultad para pensar, concentrarse, tomar decisiones.
- Inquietud o sensación de lentitud.
- Sentimientos de inutilidad o culpa.
- Pensamientos de muerte o suicidio.
Claro está que no siempre las personas tendrán todos los síntomas. Pero tan solo uno o dos de los listados pueden hacer que la calidad de vida y la autopercepción en la rutina diaria cambie drásticamente, por lo que es importante buscar soluciones.
Factores asociados
La depresión no aparece de la nada. No siempre. La mayoría de las veces pudiera tener orígenes bastante claros:
- Factores genéticos, ya que los trastornos del estado de ánimo pueden heredarse.
- Factores biológicos, puesto que muchos neurotransmisores pueden estar relacionados con la depresión.
- Factores ambientales o de contexto, como se les suele llamar. Hacen referencia a eventos traumáticos que la persona haya pasado, desde la pérdida de un ser querido hasta el abuso.
- Factores psicológicos, asociados a la forma en que las personas ven y afrontan los problemas y preocupaciones. Afrontarlos sin las herramientas adecuadas es caldo de cultivo para la depresión.
¿Qué se puede hacer al respecto?
La depresión es tanto una condición como una patología. Es prudente mencionar que incluso las personas más felices tienen malos días, pero por lo general, tienen herramientas para vencer esas sensaciones negativas.
Por eso, la recomendación más importante es consultar con psicologos Madrid centro. Los especialistas no solo son válidos en casos graves de salud mental, sino que son imprescindibles para dotar de herramientas y recursos a las personas para poder lidiar con todos los problemas y factores que están ocasionando la depresión. Incluso, en algunos casos, la sensación de tener a alguien que escuche sin juzgar y preste atención a sus problemas puede ser suficiente para mejorar esta condición emocional.
Además de eso, es muy importante desarrollar hábitos saludables que permitan blindar a la mente ante los malos momentos. Desde dormir lo suficiente y hacer ejercicio con regularidad —se dice que el ejercicio físico es un poderoso antidepresivo—, hasta tener relaciones sociales sólidas que permitan desconectar todos los días de la rutina, pueden hacer la diferencia en el acto de combatir la depresión.
