Un nuevo estudio revela un aumento significativo en el uso de cupones y tarjetas de ahorro en supermercados españoles
Las dinámicas de consumo y alimentación de los españoles está cambiando (nrd)
En un entorno económico desafiante caracterizado por la volatilidad y el aumento de los precios, los hogares españoles han demostrado una notable adaptación en sus hábitos de consumo. Según un estudio reciente realizado por idealo.es, el 75,8% de los hogares en España recurren al uso de tarjetas de ahorro y cupones de descuento al realizar sus compras en supermercados, lo que representa un aumento de 8 puntos porcentuales en comparación con el año anterior.
Aumento de 8 puntos porcentuales en el uso de estos incentivos en comparación con el año anterior.
Este fenómeno refleja la creciente conciencia de los consumidores sobre la importancia de optimizar sus gastos y aprovechar las oportunidades de ahorro disponibles.
Los datos sugieren que los consumidores entre 25 y 34 años son los más proactivos en el uso de estos incentivos, con un 82% reconociendo que aprovechan estas ofertas en supermercados. Por otro lado, la Generación Z (66,7%) y las personas entre 55 y 64 años (67,2%) son los grupos que menos utilizan los cupones de descuento.
El 86% de los españoles utiliza programas de fidelización en el comercio electrónico.
Más allá del ámbito de los supermercados, el estudio también revela una tendencia similar en el sector del comercio electrónico. El 86% de los españoles utiliza algún programa de fidelización ofrecido por supermercados, grandes superficies, ‘marketplaces’ o agencias de viajes.
Además, el 68,7% de los consumidores está dispuesto a pagar por los beneficios de un programa de suscripción en grandes ‘marketplaces’, que suelen incluir descuentos, envíos gratis y menor tiempo de entrega, mientras que un 14% no utiliza ningún programa de fidelización en sus compras.
Esta creciente adopción de estrategias de ahorro por parte de los consumidores españoles refleja una adaptación inteligente a las circunstancias económicas actuales. Al aprovechar estos incentivos, los hogares pueden maximizar su poder adquisitivo y gestionar de manera más eficiente sus finanzas.
