Cada persona encuentra un camino distinto y particular para ser feliz, por eso las características de la alegría son muy diversas y subjetivas. Lo cierto es que el nivel de satisfacción de las personas felices es auténtico y consistente en el tiempo, lo que cambian son las múltiples formas de conseguirlo conforme a las prioridades personales y necesidades. Según el filósofo griego Aristóteles, pueden tratarse de emociones felices efímeras e inmediatas o profundas y duraderas, más o menos vinculadas a los valores y la ética. Teniendo en claro el concepto de felicidad o lo qué es la felicidad y distinguiendo si la felicidad es un sentimiento o una emoción; veamos a continuación qué características tiene la felicidad.
Definiciones de felicidad:
Qué es y 40 profundos significados de felicidad en filosofía, religión, literatura…
Se trata de un tipo de felicidad efímera pero constante, las personas dichosas mantienen ese estado emocional o este carácter feliz gracias al disfrute de cosas simples y cotidianas. No solo dependen de grandes logros, como graduarse o enamorarse para sentir bienestar y plenitud. Esas sensaciones o emociones las encuentran en cosas y situaciones habituales, como tomarse una taza de café en silencio, cenar una deliciosa comida, mirar viejas fotos, comprar un par de zapatos nuevos o simplemente sentarse a ver su serie favorita.
Son impulsadores fundamentales de la vida como el placer físico y la gratificación inmediata, también son fáciles de identifica porque generalmente reconforta o complace algunos de nuestros cinco sentidos: oler una fruta recién cortada, saborear una barra de chocolate, tocar la suave piel de un bebé, oír la lluvia caer u observar la sonrisa de tus seres amados. Entre las características de una persona cuando es feliz, hay una inmensa lista de sencillos pero significativos placeres a nuestro alrededor.
Aristóteles lo asoció al nivel de felicidad que denominó Laetus o la felicidad de los objetos materiales, suele ser de corta duración, superficial y no afecta a nadie más que a ti mismo. No obstante, nos referimos a la práctica de encontrar alegría en las pequeñas cosas de la vida, sensaciones y experiencias pequeñas que nos hacen sentir bien y mantener el equilibrio general, además refuerza el positivismo y la gratitud diariamente.
¿Te has preguntado porque las personas felices son exitosas? Es que no tienen alternativa, las personas felices suelen ganarse la vida por cosas que realmente disfrutan. Encuentran una actividad que les apasionas y ponen toda su voluntad y esfuerzo en ello. Para una personalidad feliz, un resultado victorioso en esas condiciones no puede estar más que garantizado.
Igual si se trata del desempeño profesional, las personas felices generalmente llevan un estilo de vida apasionado, con la misma intensidad desarrollan cada una de sus actividades, incluso sus ratos de ocio y entretenimiento. Sentir pasión por algo es una excelente fuente de felicidad, por ello tratan de trabajar en lo que más les gusta, divertirse en lo que más les gusta e incluso descansar y recargarse como más les gusta. Otra de las características de felicidad en estas personas, es que se mantienen en constante aprendizaje y descubrimiento de nuevas cosas que las entusiasme y las haga crecer: adquirir nuevas habilidades o un nuevo idioma, es de los ejemplos más frecuentes.
Vinculado a los niveles de felicidad son características de Félix o afortunado, gratificación del ego. Este modo de cómo se alcanza la felicidad está relacionado a la necesidad de lograr y ganar constantemente: como ser reconocido en el trabajo, ser promovido o destacado en un proyecto por el esfuerzo y tiempo dedicado. Según la definición de felices, se centra en el enfoque, la persistencia y el control, refuerza la autoconfianza y el progreso personal.
De acuerdo a la descripción de fecilidad, las personas felices se sienten agradecidas y también sienten la necesidad de retribuir lo que las personas, el universo o Dios les brindan. Es por ello que viven en la constante necesidad y el deseo humano de conectar con otras personas y ayudarlas en sus diferentes necesidades, a través de gestos de bondad material, compasiva o de amistad.
Quienes viven a plenitud y en la emoción de felicidad, saben cómo alcanzar su propio bienestar pero también el de los demás, sus talentos y habilidades le permiten servir a los demás y sentir que son parte de algo más grande, lo que les da un sentido de propósito, satisfacción y felicidad en el tiempo. Una felicidad más profunda y duradera crece a medida que marca una diferencia positiva en el mundo.
El nivel de felicidad Beatitudo o bienaventuranza, la felicidad de hacer el bien a los demás y hacer del mundo un lugar mejor, también tiene algo que ver con el ego, pero se vuelve hacia el exterior en búsqueda de un significado y propósito de vida. Su práctica hace una diferencia positiva óptima en el mundo porque una persona feliz impacta a otras personas profundamente.
El bien supremo es un término filosófico un poco difícil de describir pero está relacionado a la búsqueda de plenitud y el equilibrio. La psicología lo vincula con el deseo de felicidad máxima a través de una conexión con algo superior y algunas personas cumplen este deseo a través de la espiritualidad o la religión, pero hay a quienes les funciona la filosofía, el arte o la ciencia para encontrar respuestas a interrogantes sobre la existencia humana y el universo.
Las personas encuentran esta forma de felicidad a través de sus creencias, mientras que otras la encuentran en sus acciones por ayudar a otros seres humanos. Creer en un ser superior o en las personas, nos llena de esperanza y la confianza de que existe siempre la posibilidad de lograr lo que soñamos. Tener fe nos hace pensar que cualquier cosa es posible y está en nuestras manos, este pensamiento reconforta y nos llena de la valentía que requerimos para impulsar las acciones.
La felicidad suprema y perfecta o Sublime beatitudo, busca reconocer que el fin último no se encuentra estrictamente en los elementos materiales del mundo, sino en la trascendencia o lo que las personas identifican como fe en Dios; o en otros medios que cumplan el anhelo o el deseo fundamental de los seres humanos de ser perfectos en verdad, amor bondad y belleza.
Según Aristóteles, la felicidad es el sentido y el propósito de la vida, pero solo depende de nosotros mismos las formas de hallarla y de defenderla. Como se trata de una tarea individual las características de la felicidad son sumamente extensas y intrínsecas, así la felicidad puede celebrarse desde una simple taza de chocolate caliente bajo la lluvia o en un acto de recolección de alimentos para personas necesitadas. Todos luchamos por la felicidad a nuestra manera, es la única característica de la alegría humana que guardamos en común.