Hacer referencia a la colorimetría es hablar sobre la teoría del color. Con esto se quiere decir, que se trata de una ciencia que estudia los colores e invita a descubrir cual es la tonalidad correspondiente, considerando que cada persona tiene un perfil cromático exacto que se ve definido y caracterizado por parámetros precisos como color de ojos, de piel, del cabello y el contraste generado entre ellos.
Teorías psicológicas:
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¿Qué es colorimetría? Se trata de un estudio basado en los colores de la piel, ojos, cabello partiendo del cual se va a extraer una paleta de colores personalizada que permita resaltar la belleza natural da cada persona y atenuar sus imperfecciones. También toma en cuenta la simbología de cada color, en otras palabras, lo que se desea transmitir con el color escogido.
La colorimetría es única para cada individuo, esta debe ser desarrollada para resaltar todo el atractivo posible, y que, por cuestiones como falta de conocimiento, inseguridades, ideas equivocas no se llegue a descubrir por sí solo. No todos los colores combinan apropiadamente, por más modernos que sean las modas, maquillaje o tendencias en los cortes de cabello, si no se conoce cual es la paleta de colores propia o no hay un conocimiento de colorimetría de lleno, no se logrará lucir de forma adecuada y se corre el riesgo de no reflejar la armonía y atractivo que el individuo desea.
¿Quién inventó la colorimetría? Hoy en día conocida como colorimetría tricromática, no existe desde hace mucho tiempo, aunque lo cierto es que los primeros intentos realizados para comprender y medir los conceptos relacionados a la teoría del color se remontan al conocido filosofo Aristóteles (384-322 a. C.)
Más adelante, otros autores se ocuparon de tratar este tema como el caso de Newton al publicar su obra Óptica en 1704, así como otros como Grassmann (1853), Maxwell (1860), Konig (1897), hasta el año 1913 cuando se crea la Comisión Internacional de Iluminación, más específicamente la reunión en Cambridge en 1931, donde por un comité se definió los patrones para especificar numéricamente los colores.
Otro descubrimiento fundamental fue la descomposición de la luz de Isaac Newton durante 1666, cuando un rayo de luz solar traspaso un prisma de cristal, el rayo de luz saliente no era de color blanco, sino que en realidad se encontraba constituido por un espectro continuo de colores desde violeta a rojo.
Este espectro podía dividirse hasta en 6 regiones siendo; azul, violeta, verde, naranja, amarillo y rojo. Principalmente, los colores que los seres humanos logran percibir en un objeto se ven determinados por la naturaleza de la luz que se refleje en el mismo. El color de un objeto especifico no dependerá únicamente de este en sí, sino de la fuente de luz que lo ilumine, del color del área cercana y el sistema visual humano (ojo – cerebro).
Uno de los últimos estudiosos de la teoría del color fue el naturalista alemá Goethe, quien realizó varias aportaciones al momento de crea el triángulo de colores primarios que aún son utilizados en la actualidad o al unir cada color a una emoción distinta que puede sentir el ser humano. Es por esto que, existen colores como el azul asociado con la calma y tranquilidad, el amarillo con lo divertido y colores oscuros que por regla general pueden relacionarse con la tristeza o misterio.
¿Para qué sirve la colorimetría? Se puede definir como la ciencia que estudia las medidas cuantitativas y cualitativa del color del pelo, maquillaje o ropa. Permite combinar y medir los colores de acuerdo a la necesidad de un momento específico.
Es importante conocer acerca de las armonías de los colores. De un lado se consiguen los colores análogos que vendrían a ser los más próximos dentro del círculo cromático, se relacionan con la naturaleza y tienen buena armonía como resultado de la similitud entre ellos.
Por otro lado, se encuentran los colores complementarios, los cuales son opuestos o contrarios, conforman un máximo contraste. En lo que respecta a las triadas, son los que constituyen un triángulo equilátero, en otras palabras, tres lados con ángulos iguales, como por ejemplo la combinación amarillo-magenta-cyan. Por no olvidar, que los colores fríos tienden a dominar a los colores cálidos.
¿Cómo saber mi colorimetría? En la colorimetría se mide la temperatura de la piel, para esto se deben tomar en cuenta cuatro elementos: color del pelo, de los ojos, cejas y piel. Es necesario tomar el tiempo suficiente frente a un espejo para dar con la tonalidad que divide a las personas en dos clasificaciones; pieles frías y pieles cálidas.
Otro de los métodos más empleado es fijarse en el color de las venas de nuestros antebrazos. Si estas lucen un color azul, la tonalidad corresponde a colores fríos, mientras que, si muestran un color verde, la piel es de color cálido. Por otra parte, al mirar el color de la piel debajo de los ojos, si dicha zona es morada o azul, la piel es de color frío, si se observa verdosa o amarillenta es cálida.
Algunos elementos claves que constituyen a la colorimetría son los siguientes:
Otro elemento fundamental de la colorimetría es conocer la existencia de dos paletas de colores que se dividen entre colores fríos y colores cálidos. Por medio estas clasificaciones básicas se puede comprobar que tipo de tonalidad favorece más en cuestiones de estética o moda, cuales colores de cabello o ropa combinan mejor entre sí.
La paleta de colores cálidos se encuentra situada en la parte superior del círculo cromático. Estas gamas de colores en colorimetría parte del rojo al amarillo, pasando por anaranjado, dorado y marrón, son denominados como cálidos por dos razones: la primera por la sensación térmica que produce en el cerebro al verlos, la segunda por su composición, esto quiere decir, mientras más rojo posee un color más cálido será.
La característica principal de los colores cálidos es ser acogedores y dinámicos, además de transmitir entusiasmo, cercanía, vitalidad, alegría, intimidad y pasión, aunque en ciertas circunstancias también se asocia con el peligro.
A contraste con los colores cálidos, la paleta de los colores fríos se ve relacionada con temperaturas bajas y se encuentra ubicadas en la mitad inferior del círculo cromático. Se trata de los tonos que parten del azul, hasta el verde y morado, en otras palabras, mientras haya más azul dentro de la composición del color, será más frío.
La paleta de colores fríos se asocia con la paz, lejanía, calma y serenidad, además también se ha relacionado con la tristeza, soledad o a la psicología. Los colores fríos tienden a transmitir sensaciones de profesionalismo y tranquilidad.
Entre algunos de los fundamentos teóricos a tomar en cuenta, para la correcta aplicación de los tintes de colores para el cabello es esencial conocer las 4 leyes de colorimetría:
Colores fríos como el azul, verde y violeta tienden a dominar sobre los cálidos como naranja, amarillo y rojo. Mientras que un color neutro sería el café. De esta forma, si se combinan tintes color amarillo y azul en las mismas cantidades, se obtendrá un color con mayor tendencia a un tono azulado.
Cuando se combinan colores opuestos dentro del círculo cromático, se neutralizarán entre sí. Por ejemplo: el azul acostumbra neutralizar tonos naranjas, del mismo modo que el amarillo neutraliza al violeta y el color rojo neutraliza al verde. Esta ley es fundamental para aplicar correctamente matices como neutralizantes de tonos.
Esta ley decreta que ningún tinte puede ser aclarado con otro, de este modo, no hay posibilidad de bajar el nivel del de color si se aplica un tono oscuro seguido de un tono claro. Si un estilista busca este resultado, será necesario que aplique en primera instancia un producto que ayude a decolorar
Existe la posibilidad de aplicar un tono frío sobre un tono cálido, sin embargo, no se debe aplicar un tono cálido encima de uno frío, esto es ocasionado porque un tono frío siempre neutralizará a uno cálido.
Como ya se ha mencionado, se trata de la ciencia responsable de cuantificar los colores tal como el color del pelo, ropa, piel, entre otros. Se ocupa de medir la longitud de onda en la que el ojo humano puede percibir un color específico, con fin de determinar la longitud de onda exacta en que se observa el color deseado.
Los colorímetro o medidores de croma, lectores o medidores de color, no miden las salidas espectrales en longitudes de onda, sino que dan a conocer los valores de cromaticidad azul, rojo y verde en colorimetría.
¿Qué es la colorimetría en el cabello? Una de sus principales aplicaciones es la colorimetría capilar o colorimetría en cabello, por medio de la cual se estudia y desarrollan colores con la finalidad de conseguir una escala numérica que permitirá establecer procesos y métodos para medir los colores. Por medio de la clasificación numérica de colores y tonos se van estableciendo la colorimetría de tintes para el cabello, que van de una tonalidad oscura hasta la más clara.
Al momento de diseñar nuevos looks con estilo y para mejorar la imagen, la colorimetría básica es importante. El objetivo de este estudio de la teoría del color en el campo de la ropa, es conseguir que la persona se vea favorecida con las prendas que escoja vestir, que armonicen con su imagen y atinar por completo con los outfits seleccionados.
En conclusión, la colorimetría es un modo eficiente y rápido de analizar soluciones coloreadas o alguna sustancia coloreada. Tras varios años de investigación de la teoría del color, se ha permitido el desarrollo de colorímetros de alta gama que son más cómodos y exactos al utilizar. El potencial que aporta la teoría del color en términos de aplicaciones puede ir desde alimentos, suelo, textiles e investigaciones científicas que han demostrado que esta técnica no será redundante dentro del corto plazo.