La producción de combustible diésel ecológico no es ninguna novedad, ya que las industrias han elaborado combustible a partir de la soja y del maíz desde hace años. Sin embargo, estos métodos presentan muchas desventajas: se necesita mucha tierra para cultivarlos, su transporte requiere un elevado gasto de combustible y su empleo en esta industria implica que no podrán ser consumidos como alimentos.
Las algas, en cambio, no tienen estas desventajas, pues suelen cultivarse en tanques, sin incurrir en grandes gastos, y el proceso de cultivo es más rápido que el de la soja y el maíz. La única razón de que actualmente no se utilicen las algas para producir combustible diésel ecológico es porque aún no se sabe cómo hacerlo, pero esto cambiará dentro de muy poco.
Reducir en un 60% la emisión de gases de efecto invernadero
Un grupo de investigadores de la Universidad de Michigan y de la Universidad de Penn State han recibido una subvención de 2 millones de dólares del Departamento de Energía de los Estados Unidos para desarrollar un nuevo método que permita producir combustible renovable a partir de algas.
Su objetivo es crear un biocombustible válido para los motores diésel que existen en la actualidad y reducir en un 60% la emisión de gases de efecto invernadero. El proyecto tendrá una duración de 3 años y se estudiarán varios aspectos: desde la mejor forma de cultivar las algas, cómo transformarlas en combustible diésel y potenciar su rendimiento al máximo durante el proceso de combustión.
Esperan crear un combustible que aumente la eficiencia del tren motriz, minimice el hollín en el motor y reduzca la emisión de dióxido de carbono. Todo esto hará posible que los motores diésel funcionen de una manera más respetuosa con el medio ambiente.
Encontrar la combinación óptima de algas
Los investigadores tienen que determinar las combinaciones de especies de algas que se desempeñen mejor, con el fin de sacar el máximo provecho a sus propiedades y optimizarlas de forma simultánea.
Para ello, utilizan 80 tanques para cultivar en su interior varias combinaciones de especies de algas de agua dulce. En cada uno de los tanques (de 290 galones) hay dos, tres o cuatro especies diferentes.
En este momento, uno de los mayores desafíos de los científicos es desarrollar algas que se puedan cultivar en tanques al aire libre. Esto no resulta tan sencillo, pues las condiciones dificultan la supervivencia de las distintas especies.
No obstante, si se producen los esperados avances durante los 3 años de duración del proyecto, los dañinos combustibles fósiles ya podrían empezar a ser reemplazados por el combustible diésel ecológico a partir de algas, sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
Referencias:
- Detroit Free Press. (2018, October 11). University of Michigan researchers to use algae to make diesel fuel. Recuperado el 18 de Octubre de 2018 de https://eu.freep.com/story/money/cars/2018/10/11/university-michigan-algae-diesel-fuel/1581175002/.
- Michigan News. University of Michigan. (2018, October 2). From ponds to power: $2M to perfect algae as diesel fuel. Recuperado el 18 de Octubre de 2018 de https://news.umich.edu/from-ponds-to-power-2m-to-perfect-algae-as-diesel-fuel/.
- Popular Mechanics. (2018, October 12). Scientists are working to turn algae into diesel fuel. Recuperado el 18 de Octubre de 2018 de https://www.popularmechanics.com/science/green-tech/a23745246/algae-could-be-the-next-big-thing-in-diesel-fuel/.
- University of Michigan. (2018). Biofuel from algae. [Archivo de vídeo]. Disponible en https://www.youtube.com/watch?time_continue=3&v=UB3vWbtWUkw