No existe nada mejor para sobrellevar los días fríos del invierno que una buena crema o sopa. Desde las tradicionales y las que más gustan en casa, hasta las nuevas recetas que podemos encontrar en internet. Una comida hecha con amor y esmero puede calentar hasta los momentos más gélidos.
Existen muchas recetas de sopas y cremas para el frío. Sin embargo, nosotros compartiremos contigo tres alternativas deliciosas: una es todo un clásico de la gastronomía española, otra es perfecta para las personas que persiguen un estilo de vida más saludable y la tercera es toda una novedad, que de seguro querrás compartir en casa.
Caldo gallego
Un clásico de la gastronomía española, no solo es delicioso, también se considera muy balanceado, porque cuenta con la cantidad justa de carbohidratos, grasa, fibra y mucho sabor. Difícilmente hay una sopa que pueda superar esta alternativa, hecha a base de patatas, habas y grelos.
La buena noticia es que es muy sencillo sustituir los grelos por otras alternativas de verduras que no perjudican en nada el delicioso sabor del caldo, por lo que puedes hacer variaciones en casa usando repollo o berzas (seguramente las puedes encontrar en el supermercado como kale).
Es un plato rico en sabor que seguro que calentará a todos incluso en las noches más frías. Nada como una cena tradicional para complacer a tus personas queridas y contrarrestar el clima invernal con una buena comida.
Sopa de verduras
Es una de las alternativas más comunes cuando se trata de sopas y es fácil adivinar el por qué: las verduras suelen ser uno de los ingredientes principales de este tipo de comidas.
Hallarás opciones deliciosas como la sopa de cebolla, la nutritiva crema de calabaza, pero ¿qué necesitas para hacer una sopa de verduras inolvidable? Además de seleccionar los ingredientes de la temporada, no está de más hacer un buen sofrito antes de comenzar con el caldo.
Sí, por lo general la sopa de verduras puede ser un poco insípida, pero si sabes sacar el máximo provecho a los ingredientes, seguro que ofrecerás a tu familia una comida perfecta. Es aconsejable sofreír en aceite de oliva la cebolla o los puerros, esto hará que liberen su aroma y sabor.
¡No olvides añadir tomates y pimientos! Esto le dará consistencia al caldo, además de acrecentar el sabor de tu preparación. Lo demás corre por tu cuenta, porque si hay una ventaja en la sopa de verduras, es que puedes hacer todas las combinaciones posibles, experimentando cada vez hasta dar con la favorita de la familia.
Puedes agregar a tu receta zanahorias, repollo, champiñones, coliflor, patatas… y si además deseas que el caldo tenga más consistencia, puedes apartar al menos un par de cucharones de verduras y hacerlas puré, incorporarlas de nuevo a la olla y tendrás un resultado más espeso y gustoso. ¡Tú pones los límites en tu cocina!
El sabor de Japón en tu mesa: ramen
Sí, es verdad, el ramen se ha vuelto muy popular últimamente, pero no es lo mismo preparar una mezcla instantánea que hacer la receta tradicional, siguiendo uno a uno todos los pasos. Para prepararlo solo necesitas una buena base de caldo, que podrás preparar con cebolletas, zanahoria, ajo y un toque de jengibre.
Debes acompañar esta base con los característicos fideos del ramen, tofu y desde luego puedes ponerle la típica lámina de alga nori, el cual le da un toque delicioso. El secreto de esta receta está en el caldo, lo demás es muy sencillo y, como con todas las preparaciones, a medida que te vayas familiarizando con ella, podrás añadirle cada vez tu toque personal.
¿Cuál de estas recetas prepararás en invierno? ¡Recuerda que puedes dar a cada una de ellas tu toque y estamos seguros de que tu familia lo agradecerá!