Dentro de la religión católica y su numerosa comunidad de feligreses dispersos por el mundo, es común conocer las festividades dedicadas a los santos. Así, muchos creyentes saben, por ejemplo, qué es la Fiesta de San Juan y cuándo se celebra, debido a que es uno de los santos más reconocidos y venerados dentro del catolicismo. Pero en el caso de Cataluña, se conmemora cada 23 de abril el Día de San Jorge, una ocasión que no solo es aprovechada para recordar al protector de dicha comunidad autónoma española, sino también es una oportunidad para reivindicar cada año toda la esencia de la cultura catalana. Conoce más sobre la Diada de Sant Jordi en el siguiente artículo.
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Un sinfín de curiosidades gira en torno a la Diada de Sant Jordi, pero antes de conocer todos los detalles relacionados a esta fiesta catalana, primero es necesario saber un poco sobre la historia de San Jorge, el mártir al cual se le dedica esta festividad y en qué otras partes del mundo se recuerda su figura. Además, es preciso acotar los patronazgos adjudicados a este santo, ya que este es un factor muy importante que influye en las costumbres vistas en las celebraciones consagradas a su memoria.
Por supuesto, no se puede dejar de mencionar, ya de forma específica, la historia de la Diada de Sant Jordi y su relevancia dentro de la religiosidad y cultura de Cataluña.
Jorge de Capadocia (actual Turquía) fue un soldado que combatió al servicio de los romanos, pero que fue ejecutado en Nicomedia el 23 de abril de 303 a causa de su fe cristiana. A partir de entonces, se lo venera como mártir, y se le recuerda tanto en la religión católica como en otras creencias producto del sincretismo que se vivió posterior a su muerte, como en el caso del islam, donde en la actualidad aún se venera en muchos países del Medio Oriente.
Por otra parte, vale la pena saber de qué es patrono San Jorge. Pues bien, a su figura ha sido adjudicada la protección a diversos países, localidades y regiones, como por ejemplo, Portugal, Inglaterra, Georgia, Grecia, Lituania, Moscú, Cáceres, Calabria, Génova y, anteriormente, la Corona de Aragón.
Debido a su faceta como militar, muchas órdenes y unidades de los ejércitos mundiales lo recuerdan, ya sea bajo el patronazgo o incorporando su figura en emblemas y estandartes. Lo más común es que sea asociado con el arma de la Caballería debido a que en la Edad Media comenzó a formar parte del grupo de los santos caballeros.
De igual manera, es protector de profesiones y oficios como la agricultura, herrería, montañismo, arquería, entre otras ocupaciones, así como también de los animales domésticos, además de ser invocado tanto su nombre como oraciones y frases de San Jorge durante la presencia de ciertas enfermedades.
Cabe destacar que, en relación a la figura de este santo, han surgido diferentes mitos. La más popular leyenda de San Jorge (recordada durante la Diada de Sant Jordi catalana) fue su papel como caballero que luchó contra un dragón para salvar a una princesa, entregada como sacrificio para saciar el hambre de la criatura que azotaba a Capadocia. Vencido el dragón, Jorge entregó una rosa roja a la princesa como símbolo de su liberación y el amor.
Dentro de la religión católica, se toma como conmemoración de San Jorge el día 23 de abril, coincidiendo con la fecha de su martirio. En su memoria, se realizan festividades alrededor del mundo, como por ejemplo, en Durango (México), Beirut (Líbano), varias provincias de Argentina, estados de Brasil y otras regiones del mundo.
El fervor por San Jorge en España se extiende a lugares como Cataluña, Aragón, Cáceres, Santurce (Vizcaya) y la Comunidad Valenciana.
Los orígenes de la celebración del Día de San Jorge en Cataluña remontan a la Edad Media, a pesar que su veneración como mártir data del siglo IX. La popularidad de su culto en la época medieval se extendió a la comunidad catalana cuando sus habitantes comenzaron a evocar la leyenda del dragón y la rosa, una costumbre que sigue estando presente en las festividades actuales.
Por otra parte, hay que mencionar que, como coincidencia, cada 23 de abril se celebra el Día Internacional del Libro (recordando la muerte de dos grandes literatos mundiales, Cervantes y Shakespeare), por lo que a partir de 1930 se sumó a las tradiciones festivas de San Jorge el intercambio de libros, como ya detallaremos más adelante.
La icónica festividad catalana cuenta con costumbres particulares que la hacen única entre las conmemoraciones dedicadas a San Jorge, siendo considerada una de las más conmovedoras e interesantes de toda España. Es así como la Diada de Sant Jordi se celebra de la siguiente manera:
Como ya se mencionó, esta costumbre medieval rememora la leyenda de San Jorge que narra su lucha con el dragón y el regalo de la rosa roja a la princesa rescatada. Esta flor, símbolo del amor y la pasión, cada año se regala a parejas, seres queridos, amistades y colegas.
Como una fiesta que se presta para reivindicar el sentir de los catalanes, cada víspera del Día de San Jorge se decoran los balcones de las casas con símbolos locales como la señera (senyera o bandera) catalana y, en el caso de Barcelona, con el escudo de la ciudad, portador de la cruz de San Jorge.
Aprovechando que durante la Diada de Sant Jordi también se celebra el Día del Libro, se ha hecho tradición que se regalen libros, los cuales se pueden adquirir gracias a la disposición de ferias literarias en las calles, donde se ofrece una gran variedad de publicaciones para toda la comunidad.
El ambiente festivo de la Diada de Sant Jordi es rodeado con conciertos, ventas de rosas, libros, ferias gastronómicas, recitales de poesías, talleres y todo tipo de actividades que atraen a locales y a visitantes. Es toda una tradición que estos puestos de ventas se dispongan en el principal conjunto de avenidas de Barcelona, Las Ramblas.
En cada Día de San Jorge no puede faltar el baile, siendo así costumbre realizar la danza o baile de las Sardanas o admirar cómo se levantan al ritmo de la música elevadas torres humanas, conocidas como Castells o collas sardanistas, que llegan a componerse de hasta diez pisos. Estas actividades populares recibieron reconocimiento en el 2010 como Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad por parte de la UNESCO.
La Diada de Sant Jordi es una de las festividades más importantes dedicadas a la devoción de San Jorge en España, pero en el caso de Cataluña, esta conmemoración es sumamente especial ya que conjuga todo un conjunto de hermosas tradiciones que exaltan todo lo mejor de la espiritualidad, cultura e identidad local. Evocando costumbres introducidas desde los tiempos de la Edad Media, resalta ver como se llena de colorido el Día de San Jorge en Barcelona y otras ciudades catalanas, apreciar cómo los hombres regalan rosas a las mujeres y, como parte de una práctica agregada en el siglo XX, disfrutar de un ameno intercambio de libros, aprovechando que, justamente, el 23 de abril, se conmemora además el Día del Libro. Es así como esta celebración cultural y religiosa ofrece a locales y visitantes lo más fascinante del arraigo catalán, por lo que no tiene desperdicio alguno complacerse, por lo menos alguna vez en la vida, con esta maravillosa festividad.