El tradicional modelo de negocio que desarrolla las economías de las naciones está quedando atrás. Las lesiones que deja el transporte marítimo, la pesca comercial así como la extracción de petróleo, gas y minerales; merecen una especial atención en la agenda de economía verde motorizada ya por líderes del mundo y la sociedad para atender las consecuencias del cambio climático. Si tomamos en cuenta que el agua cubre el 70 % de la tierra, no es de extrañar que sea una de las fuentes principales para el mantenimiento del ecosistema Y la subsistencia humana. La economía azul convoca entonces la necesaria tarea de minimizar su degradación, protección y reparación. Comencemos con el concepto de economía y la definición de economía azul; también qué es economía verde y ejemplos; finalmente, algunos sectores o proyectos de economía azul.
Economía regenerativa:
El mejor modelo económico para sanar el daño al ecosistema
Es un concepto emergente que propone el uso sostenible de los océanos y áreas costeras para afrontar la degradación ambiental y el agotamiento de los recursos, causado por economías convencionales. Abarca la idea central de crecimiento económico, la inclusión social y la preservación o mejora de los medios de vida, mientras garantiza la sostenibilidad ambiental de las extensiones marinas y litorales.
Este término utilizado en economía para definir la gestión de todo el ecosistema anfibio, incluyendo mares, lagos y ríos, contempla los objetivos de creación de puestos de empleos, la disponibilidad de alimentos y energía limpia, y por supuesto el crecimiento económico sostenible mientras se colabora con revertir el daño al medio ambiente y la regulación climática.
La economía azul busca promover que las comunidades locales preserven tanto los recursos azules como las tierras lindantes, como la salud de los ecosistemas marinos y mitiguen las emisiones contaminantes de la actividad productiva que han sido hasta ahora devastadoras para el planeta. Mientras que de la economía verde, también replica las intenciones de bienestar humano, equidad social e inclusión y el empoderamiento de la comunidad.
Este estilo de economía maneja una filosofía en el que las necesidades de la población son cubiertas a bajo costo gracias a la implementación de un sistema local de producción y consumo que aprovecha los recursos del entorno, del trabajo humano en simbiosis con la naturaleza y los seres vivos que le rodean.
Pero más que nada, otras de las características de la economía azul es que propone la regeneración, la autonomía y la abundancia, dicho modelo económico no produce emisiones ni residuos sino que convierte los residuos en materia prima para otros usos y lo que está disponible en abundancia y de manera fácil, a un menor costo. Tal como funciona la naturaleza, un resumen de la economía azul.
El tema de la transición hacia una economía verde, es el tema tope medioambiental y social del futuro. En líneas generales su economía sostenible abarca el tema de la producción baja en carbono, la inclusión social y el uso eficiente de los recursos.
Si bien, se trata de una propuesta que capta cada día más la atención de empresarios, líderes y sociedades, la agenda verde da poca prioridad al uso sostenible de los recursos oceánicos, aún cuando resulte fundamental para frenar el aumento de temperaturas y estimular el desarrollo socioeconómico.
En pocas palabras, la economía azul o sistema azul es fundamental para el ecosistema verde, ya que el ecosistema marino influye irremediablemente en todos los ciclos naturales así como en todos los sectores económicos. Por ejemplo, los océanos producen el 70% del oxigeno que respiramos, es un error pasar por alto el valor del recurso azul en la transición verde para la construcción de una economía mundial más sostenible y amable con el planeta.
La salud del ecosistema se ve amenazada cada vez más debido al cambio climático, el aumento de la contaminación y la sobrepesca; lo que representa también una amenaza para las poblaciones costeras e insulares que desarrollan su producción, su forma de sustento y cultura en estas áreas. Es por ello que entre los elementos que aborda la economía azul, se presta especial atención al fomento del bienestar humano a la par con el desarrollo económico o la economía eficiente y el cuidado del medioambiente. Las principales preocupaciones de la economía azul se pueden resumir de la siguiente manera:
Este principio contempla la inversión en actividades y proyectos que respalden y mejoren los medios de vida locales, así como identificar y mitigar los problemas que surjan de la dinámica socioproductiva. Se incluyen las metas de creación de empleos, reducción de la pobreza local y el hambre, así como las estrategias de protección de las comunidades costeras de los impactos del cambio climático.
Para la economía azul los residuos son recursos naturales en economía que pueden ser aprovechados en otros ciclos de producción, como materia prima, así que la producción de desecho y escombros se reducen al mínimo o se elimina por completo. Parte del principio de que en la naturaleza nada se desecha, pues las cascaras o residuos de las frutas son consumidos por otros animales o se descomponen y se convierten en nutrientes para el suelo, así mismo busca convertir los desechos vegetales en biocombustibles y bioplasticos para la fabricación de productos y otras utilidades.
De igual modo, otro de los objetivos de la economía azul está relacionado a la siembra de conciencia en cada localidad de producir solo lo necesario para el consumo humano, a fin de potenciar el uso de los recursos naturales y minimizar los residuos. De este modo cumple el propósito de conservar la vida marina y hacer frente a la contaminación oceánica.
Este modelo económico propone el consumo de recursos naturales locales presentes en cada sociedad, que no exija la activación ni dependa de grandes cadenas de distribución y transportes, responsables en la actualidad de una enorme porcentaje de emisiones contaminantes. De acuerdo al significado de economía azul, esta premisa incluye la utilización del envío inteligente para reducir los impactos en el medio ambiente
La economía azul está basada en la pesquería sostenible y la tomar de medidas contra la pesca ilegal. Reconoce la importancia de las pequeñas y medianas empresas y diversifica la inversión para ampliar la gama de proyectos de desarrollo sostenible, en sectores marítimos tradicionales y no tradicionales, con soluciones comerciales innovadoras para los problemas marítimos y la difusión de las mejores prácticas, según el significado de planeta.
Por décadas, los países han explotado los recursos marítimos sin importarle el efecto de sus actividades en los ecosistemas y sin las mínimas medidas para protegerlos; lo que ha provocado la contaminación marítima que hoy día se hace alarmante y que ha puesto en peligro a varias especies y espacios naturales de gran valor ecológico.
Se nos ha olvidado por completo que son los océanos los que brindan a la población los recursos para la subsistencia, pero también es el regulador climático muy eficiente con el que cuenta el planeta. Es parte de lo que recuerda la economía azul de manera activa a través del desarrollo de actividades inteligentes y sostenibles. En términos prácticos también otorga otras ventajas como:
Mediante la ecologización de los puertos y la reducción de la huella de carbono del transporte marítimo contribuye a la lucha contra el cambio climático y el calentamiento global.
Desarrolla la economía circular. Minimiza la producción de agentes contaminantes y residuos, los cuales son reutilizados como materia prima para la producción de otros bienes y servicios esenciales.
Diseña y edifica espacios acordes al entorno en las zonas costeras para las actividades de impacto positivo en la conservación de la biodiversidad y el paisaje, pero también para el desarrollo del turismo y lo qué significa la economía local.
Los recursos naturales son utilizados de manera medida y controlada en los pequeños estados insulares para cubrir las necesidades de seguridad alimentaria y eficiencia en economía, y atender los problemas de desempleo y pobreza.
La dinámica de participación y de acciones productivas de la economía azul, propone la construcción de instrumentos ecológicos innovadores como el carbono azul, los bonos azules y el seguro de resiliencia costera para fomenta la protección ambiental.
Nuestro planeta está cubierto en un 72 por ciento de su superficie por océanos, es decir una gran reserva de recursos que proporciona a la humanidad alimentos y otros medios de subsistencia. Solo por esta razón es esencial minimizar su degradación, pero también protegerlos y mejor aún, regenerarlos. Debemos mantener el interés de su función ambiental estratégica en pos de las generaciones siguientes y de actividades económicas nuevas que junto a las existentes representen progreso para muchos países. Algunos de los sectores claves para la operatividad y mantenimiento de lo qué significa economía azul, se encuentran:
El cultivo de peces, mariscos y plantas acuáticas en el mar o en aguas continentales contribuye a un sistema alimentario sostenible y proporciona proporciona el 50% del pescado para consumo humano en el mundo.
Incluida la pesca de altura/pesca con palangre. La pesca representa más de 350 millones de puestos de empleos en todo el mundo.
La producción de electricidad limpia a partir de energía eólica marina, biocombustibles, gradientes de salinidad, olas y mareas, etc. En reemplazo de combustibles fósiles.
Cerca del 80 % del volumen de mercancías se transporta por mar, los entornos marinos y costeros desempeñan un papel clave en el comercio mundial, por lo que contribuyen significativamente al desarrollo económico.
Los organismos marinos actualmente se aprovechan para una amplia gama de aplicaciones comerciales. Las algas, los microorganismos e invertebrados como estrellas de mar y erizos son convertidos en biocombustibles, cosméticos, alimentos, biofertilizantes, alimentos para animales, envases, productos farmacéuticos, nutrición de cultivos, fibras textiles, materiales de construcción, detergentes para ropa, entre otros.
Otros sectores claves que van desde los convencionales hasta ideas emergentes de economía azul son:
De todo esto podemos concluir que el azul es esencial para la transición hacia una economía verde. La economía azul busca en la presentación de sus principios la atención que merece el tratamiento de los recursos y ecosistemas oceánicos para los planes de revertir el acelerado daño a la naturaleza. Las consecuencias del recalentamiento global son obvias en las zonas costeras con el crecimiento de las aguas y las altas temperaturas, no se puede desligar del propósito de las acciones e implementación del sistema verde ya en marcha. Como todo modelo económico aprovecha las oportunidades de negocio, pero con el fin de proteger y desarrollar los recursos azules al tiempo que vela por los efectos devastadores del cambio climático.