La definición de bienes particulares está relacionada con los conceptos de excluibilidad y rivalidad que limita la libertad y la capacidad del consumo o disfrute de ese bien. Además, los bienes privado Son cosas que tienen un dueño que ejerce un dominio exclusivo sobre ellos. A continuación un breve listado de algunos ejemplos de bienes privados .
Tipos de bienes económicos:
Clasificación, concepto, características y ejemplos de bienes en economía
Inmuebles
Entre los ejemplos de bienes particulares más comunes se destacan los bienes inmuebles, ya sea que se traten de departamentos, edificios, casas o terrenos. Estos bienes forman parte del patrimonio de las personas y son susceptibles de valoración económica y de operaciones que trasladen el dominio sobre ellas, tales como la compra-venta, la donación o la permuta. Solo los propietarios de un bien están facultados para disponer de él.
Automóviles
Los bienes muebles registrables como automóviles, motocicletas o yates son otro de los ejemplos de bienes privados. El título de propiedad les confiere al dueño el dominio exclusivo de estos; no pudiendo otra persona hacer uso de ellos sin el consentimiento o permiso del titular. A diferencia de otros ejemplos de bienes privados muebles, este tipo de bienes particulares se encuentran individualizados en los respectivos registros donde se deja constancia de quien ejerce la titularidad sobre ellos.
Acciones de una empresa
El capital de las empresas o sociedades mercantiles se encuentra dividido por acciones que representan parte del patrimonio de la organización. Las acciones de la empresa encuadran dentro de la definición de qué son los bienes privados incorporales. Los bienes incorporales, a la luz del Derecho, son aquellas cosas inmateriales que no pueden ser percibidas por los sentidos ni cuentan con presencia física y que han sido creadas por el hombre como una ficción legal. Las acciones son instrumentos legales propiedad de cada accionista y ser pueden operadas en los mercados financieros y la bolsa.
Marcas y patentes
Entre los tipos de bienes incorporales también se encuentran otros ejemplos de bienes particulares como las marcas y patentes. Las marcas son derechos de propiedad intelectual protegidos por las leyes nacionales y acuerdos internacionales suscritos por el Estado. Consisten en signos o conjunto de ellos que permiten lograr la diferenciación de los distintos productos o servicios entre dos o más empresas. Los titulares tienen el uso y explotación exclusivos sobre la marca protegida. Las patentes, por su parte, son otro ejemplo de bienes privados incorpóreos. Estas, al igual que las marcas, confieren el uso exclusivo y excluyente del derecho incorporado a las mismas.
Artefactos tecnológicos
Las nuevas tecnologías han permitido la creación de una variedad de productos tecnológicos para uso personal y laboral. Estos dispositivos forman parte de los bienes particulares de alto consumo y demanda como los teléfonos móviles, computadoras personales, ipads, entre otros. Pueden ser identificados por modelo, marca, serial u otra numeración única como el IMEI en el caso de los celulares.
Bienes privados del Estado
Si bien es cierto que determinados bienes de dominio público están administrados por el Estado para el disfrute y acceso de todos los ciudadanos como las plazas, carreteras o parques, ejemplos de bienes comunes; existen otros bienes que son propiedad del Estado y se encuadran dentro de la definición de bien privado.
Esto es que el Estado es titular del dominio de ese bien y limita su uso y su acceso. Los inmuebles que funcionan como las sedes de organismos públicos o los vehículos, propiedad del Estado, que sirven para labores exclusivas e inherentes al órgano o ente son algunos de los ejemplos de bienes privados del Estado.
Joyerías y obras de arte
Algunos bienes particulares son únicos y exclusivos. Es decir que no existe otro producto igual como sucede con las obras de arte, productos de diseño de autor y algunas joyerías. Estos ejemplos de bienes privados tienen la particularidad que solo quien ha pagado por ellos es el titular y, por tanto tienen un único dueño que limita el uso y dominio sobre las cosas.
Artículos de vestir
A diferencia de los bienes públicos que tienen un consumo no rival, los bienes particulares presentan una imposibilidad de consumo simultáneo; es decir, cuando una persona usa o consume un bien determinado se limita, reduce o imposibilita su consumo por parte de otra persona. Tal es el caso de la indumentaria o vestuario, cuyo uso y consumo impide el uso o consumo por parte de otra persona. Por lo tanto, los artículos de vestir o calzado son otro de los buenos ejemplos de bienes privados.
Electrodomésticos
Una de las características que diferencia qué son los bienes públicos y privados es la limitada disponibilidad. Mientras los bienes comunes son más duraderos y no se agotan con su consumo, tal como ocurre con los bienes públicos puros; los bienes particulares tienen una disponibilidad finita. Esto quiere decir que los bienes particulares pueden agotarse con el uso y consumo; lo que implica costos en su producción.
Entre los ejemplos de bienes privados limitados en el tiempo se encuentran las cosas consumibles como alimentos, productos de escasa producción, combustibles. También pueden ser ejemplos de bienes privados los electrodomésticos, muebles y otros artículos del hogar, cuya producción es limitada.
Servicios privados
La excluibilidad de un bien es una característica que permite definir qué es un bien privado. Los bienes particulares se distinguen por la posibilidad de excluir y evitar que las personas usen o gocen del bien o servicio sin haberlos pagado previamente tal como sucede con la contratación de servicios privados de determinados bienes. Entre los ejemplos de servicios privados se mencionan los alquileres de bicicletas o monopatines eléctricos o el pago por servicios de transporte privado.
De modo que el dominio que se ejerce sobre los bienes determina su naturaleza pública o privada. Así, los ejemplos de bienes públicos y los ejemplos de bienes privados están condicionados a la posibilidad de acceder, disfrutar y consumir los bienes sin mayores limitaciones. El mercado, por tanto, funciona con el intercambio de servicios y bienes particulares de las personas, mediante operaciones mercantiles, civiles o comerciales para la satisfacción de las distintas necesidades.