El mundo del espectáculo no suele dar segundas oportunidades. Cuando un actor toma una mala decisión, puede convertirse en el inicio del fin, el declive de su profesión. En Hollywood, hay varios ejemplos de figuras influyentes que han protagonizado escándalos que terminan borrándolos de la palestra.
Detenciones policiales, problemas con drogas, acoso… No todos pueden recuperarse del impacto negativo que este tipo de acusaciones, verdaderas o falsas, pueden tener en sus carreras. A continuación, hacemos un recuento de actores que arruinaron se futuro artístico de un día para otro.
El estadounidense Randy Quaid ha interpretado muchos personajes a lo largo de su carrera. Se le recuerda por su papel de Russell Casse, un veterano de Vietnam que ayudó a salvar al mundo de los alienígenas en la famosa producción Independence Day.
Ganó un Globo de Oro como mejor actor en una miniserie en 1988 por LBJ: The Early Years. Y antes, en 1974, había sido nominado al Oscar y al BAFTA como mejor actor de reparto por su actuación como Larry Meadows en la película The Last Detail, en la que trabajó junto a Jack Nicholson.
Pero su suerte cambió después de enfrentar problemas con la justicia. Y es que, en 2009, él y su esposa fueron detenidos tras negarse a pagar la factura de un hotel por la cuantiosa suma de 10.000 dólares.
En 2010 ocuparon ilegalmente una residencia privada y terminaron escapando a Canadá. Se excusaron contando a la prensa que estaban huyendo de los Hollywood Star Wackers, una supuesta organización secreta que se encarga de eliminar celebridades o de difundir rumores para desprestigiarlos. En unas declaraciones que ofreció en 2010, Quaid dijo:
«He tenido ocho amigos que han muerto misteriosamente o han tenido escándalos en los últimos años».
Las autoridades no creyeron su teoría conspirativa y arrestaron a la pareja nuevamente, pero fueron liberados en 2015.
Desde hace algunos años, Randy no aparece en las pantallas, pero se supo de él en febrero de 2017, cuando publicó en Twitter un extraño vídeo junto a su esposa con el mensaje: «I’m ba-aack» (estoy de regreso).
Jennifer Grey debutó en el cine en 1984, y en 1986 apareció en el film Ferris Bueller’s Day Off. Pero no fue hasta que encarnó el papel de Frances «Baby» Houseman en Dirty Dancing junto a Patrick Swayze, un clásico del cine, cuando se convirtió en una de las actrices favoritas de los años 80.
Si bien no estuvo implicada en ningún tipo de escándalo, un marcado cambio físico y un terrible accidente automovilístico la alejaron de las pantallas.
La decisión de realizarse una rinoplastia cambió por completo su rostro, y le costó muchos papeles. Ella misma llegó a asegurar que nadie la reconocía en sus castings.
En una entrevista a US Magazine comentó:
«Siempre seré esta actriz que una vez fue famosa y que nadie reconoce por un trabajo de nariz».
A los 25 años tuvo un trágico accidente durante unas vacaciones en Irlanda con su novio, Matthew Broderick. Los ocupantes del coche con el que chocaron, una mujer y su hija, murieron en el acto.
Todo eso la afectó no solo física, sino emocionalmente. Y terminó alejándose de las pantallas a los 29 años.
Wesley Trent Snipes protagonizó varias de las películas de acción de los años 90, entre ellas la trilogía de Blade. Y hasta apreció en el vídeo Bad del rey del pop, Michael Jackson.
Le estaba yendo muy bien, pero de repente tomó la determinación de no pagar más los impuestos. No era algo tan grave, ¿o sí? Después de todo, podía devolver el dinero en algún momento. Pero el juez no lo consideró así, y lo sentenció a tres años de prisión por no haber presentado su declaración de impuestos de forma intencional.
Tuvo que pagar más de 17 millones de impuestos atrasados, pero lo que más le costó fue su carrera artística, que se vio interrumpida.
El estadounidense Rip Torn tiene muchas películas en su haber, desde Cross Creek, que le valió una nominación al Oscar como mejor actor de reparto en 1983, hasta la popular Man In Black (Hombres de Negro).
En 1967 tuvo un incidente con el director Dennis Hopper. Ambos estaban cenando en un restaurante junto al actor Peter Fonda y el escritor Terry Southern para discutir un papel en la nueva película Easy Rider, que terminó siendo para Jack Nicholson.
El tema se complicó cuando se comenzaron a difundir los rumores y acusaciones de que Torn le sacó un cuchillo a Hopper. En 1994, casi 30 años después, Torn demandó a Hopper y desmintió su versión, alegando que fue este quien tenía el cuchillo.
El jurado falló a favor del actor y Hopper terminó pagándole 475.000 dólares por perjuicios, ya que se había difundido una imagen falsa de Rip que lo dejaba como un hombre violento o inestable ante la opinión pública.
María de la Paz Elizabeth Sofía Adriana de la Huerta y Bruce es una actriz y modelo estadounidense de padres españoles que saltó a la popularidad por su interpretación de Lucy Danzinger en Boardwalk Empire, la serie de HBO.
Su fama de chica fiestera fue llevando su carrera en declive. La cadena de noticias de celebridades TMZ publicó imágenes de ella ebria después de los Globos de Oro.
Incluso le lanzó un vaso a una la modelo Samantha Swetra en una fiesta y la golpeó, hecho por el que fue arrestada en 2011.
Y en el set las cosas iban peor, pues sus compañeros indicaban que le gustaba afeitarse públicamente y llegaba ebria y drogada al trabajo. En 2013 fue despedida y recientemente, en 2017, acusó al productor Harvey Weinstein de violación.
Al estadounidense Michael Richards le fue muy bien actuando como Kramer en Seinfield, la serie ganadora del Emmy, pero en 2006 tomó una decisión que enlodó su carrera por completo.
Estaba participando en un stand-up de comedia y, de repente, comenzó a discutir con uno de los miembros de la audiencia.
No fue el debate con el hombre en sí, sino la serie de insultos raciales lo que le costaron a Richards el repudio nacional. Él exigía que el hombre fuera echado del club, y el incidente no tardó en hacerse viral.
Más tarde apareció en The Late Show With David Letterman disculpándose por todo el asunto:
«Perdí mi temperamento en el escenario (…) Le dije algunas cosas bastante desagradables a algunos afroamericanos… Ya sabes, realmente estoy desconcertado por esto y lo siento mucho, lo siento mucho».
Esta estrella de Hollywood, ganador de dos Oscar como mejor director y mejor película en 1995 por Braveheart (Corazón Valiente), lanzó por la borda su carrera en julio de 2006 cuando fue detenido por conducir a exceso de velocidad bajo la influencia del alcohol, por lo que fue condenado a tres años de libertad condicional.
También fue acusado de violencia de género por su novia, Oksana Grigorieva. En 2010 la pianista rusa lo culpó de haberla golpeado mientras tenía a su hija en brazos. Ambos encararon una batalla legal que culminó en 2011, tal y como recoge la revista Hola!, con un acuerdo de libertad condicional que incluía orientación psicológica para controlar los ataques de ira y una multa de 420 euros.
Pero su mala fama no termina ahí, pues además fue tildado de antisemita y de homofóbico. No obstante, ha intentado volver a brillar en Hollywood y no le ha ido tan mal, pues su película Blood Father fue bien aceptada por la crítica y Hacksaw Ridge, el drama biográfico que dirigió, fue ovacionado en el Festival de Cine de Venecia.
Tila Nguyen, conocida en el medio artístico como «Tila Tequila», es una modelo, cantante y estrella de reality show que se conoció por convertirse en la persona más popular de la red social MySpace. Lugo de eso MTV le ofreció su propio show: A Shot at Love con Tila Tequila.
Todo iba bien en su carrera hasta que en 2013 decidió publicar un artículo titulado Por qué simpatizo con Hitler y fotografías en su página de Facebook en la que posa ligera de ropa frente a una foto de un campo de concentración. Tras las constantes denuncias, su perfil terminó siendo eliminado.
En 2015 intentó retomar su carrera participando en el show Celebrity Big Brother, pero las quejas hicieron que los productores le pidieran que abandonara la serie. Ella se disculpó por los comentarios antisemitas y los atribuyó a problemas de droga y alcohol.
En 2016 lanzó un polémico tweet en el que aseguró que el escritor judío-estadounidense Ben Shapiro tenía que ser «gaseado y enviado de regreso a Israel».
«Hay solo dos cosas en este mundo por las cuales con gusto sacrificaría mi propia vida, la destrucción de todos los judíos y la preservación de la raza blanca», escribió.
Y ese mismo año asistió a una reunión del Instituto Nacional de Políticas de extrema derecha para celebrar la victoria de Trump. En ese momento colgó una foto en Twitter donde replicaba el saludo nazi con el texto: «Seig heil!». Su cuenta fue suspendida inmediatamente.
La estadounidense Lindsay Lohan probó la fama a temprana edad con su película The Parent Trap (Juego de Gemelas). Luego de eso siguió con Disney y filmó Freaky Friday (Un Viernes de Locos) y otras como Mean Girls (Chicas Malas) y Herbie.
Pero su adicción a las drogas la fueron llevando a rincones oscuros de los que, aparentemente, no ha podido recuperarse.
En enero de 2007 la ingresaron al Wonderland Center, un centro de rehabilitación de Florida. Y el mes de mayo de ese mismo año fue arrestada tras sufrir un accidente automovilístico en Beverly Hills mientras conducía en estado de ebriedad, además de estar en posesión de cocaína. Tres días después volvió a ser internada, pero en el centro Promises, de Malibú.
Nuevamente en julio fue arrestada por los mismos delitos. En su comparecencia ante un juez se declaró culpable de dos de los siete por los que la acusaban y se le sentenció a libertad condicional, un programa de rehabilitación para alcohólicos, servicio comunitario y un día de cárcel.
Lohan ha entrado y salido de rehabilitación muchas veces y sus escándalos, recogidos cronológicamente por CNN, han tenido severa repercusión en su carrera.
Este 2018 volvió a dar de qué hablar cuando persiguió a una familia de refugiados sirios en Moscú, Rusia, para llevarse a los niños, pensando que estaban siendo secuestrados. La actriz transmitió todo el asunto a través de Instagram Live y en el vídeo se puede observar cuando la madre de los pequeños la golpea.
Paul Rubenfeld, mejor conocido por su nombre artístico Paul Reubens, divirtió a muchos con su interpretación de Pee-wee Herman, un personaje de culto de los 80. Pero pasó de estrella de uno de los shows más exitosos de HBO y del cine, a protagonizar varios escándalos.
En 1991 fue arrestado por exhibicionismo, tras ser encontrado tocándose en una sala de cine para adultos. Se retiró del ojo público durante los 90 y su regreso se vio empañado cuando fue acusado de poseer pornografía infantil. El actor ha negado todas estas denuncias, pero su reputación decayó.
Aunque en 2016 protagonizó Pee-wee’s Big Holiday, que se estrenó en la plataforma Netflix, y tuvo una respuesta positiva.
Robert Hepler Lowe fue el rompecorazones de los años 80. Tras su participación en la película Rebeldes, su popularidad fue en ascenso.
No obstante, todo cambió en 1988, cuando asistió a una Convención Nacional Demócrata en Atlanta. Allí se reunió con unas chicas en un club nocturno y mantuvo relaciones con ellas, sin saber que tenían 16 años. No fue a prisión porque en Georgia la edad legal para obtener el consentimiento es, precisamente, 16.
Y la cosa fue peor cuando el vídeo se filtró. Lowe, sin quererlo, fue el pionero de los vídeos sexuales, que fueron copiados y vendidos al público en general. Después se difundió otro material donde él y un amigo mantuvieron relaciones con la misma mujer.
Aunque su carrera no se extinguió del todo, Lowe admitió que ha perdido buenos papeles, incluyendo uno en Titanic, por esos episodios de su vida.
Los papeles de Brendan Fraser eran bien recibidos. La película George de la Jungla (1997) y La Momia (1999) lo llevaron a la fama instantánea, pero desapreció de repente del foco público a mediados de los 2000.
¿La razón? Su carrera se consolidó con el filme de acción y aventura Viaje al Centro de la Tierra, llegando a recaudar 242 millones de dólares. Pero su decisión de rechazar la secuela le hizo perder, además de dinero, mayores momentos de fama. Viaje 2: La Isla Misteriosa, protagonizada por Dwayne «The Rock» Johnson, superó a la original y recaudó 335 millones de dólares.
En una entrevista a la revista GQ ofrecida este 2018 contó que tuvo que pasar por el luto de su madre y varias intervenciones quirúrgicas a causa de las acrobacias para sus papeles de acción.
«Me cambié de casas, pasé por un divorcio. Algunos niños nacieron», agregó.
Por otro lado, relató que fue víctima de una agresión sexual en el verano de 2003 por parte de Philip Berk, expresidente de la HFPA (Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood), quien negó tales acusaciones. No obstante, la HFPA comunicó que Berk será investigado para determinar si existió abuso de poder, señaló La Estrella de Panamá.
Actualmente trabaja en un nuevo papel en la serie Cóndor de FX.
Jeffrey Duncan Jones saltó a la fama en los años 80, apareciendo en destacadas producciones como Bueller’s Day Off y el insufrible Beetlejuice. Incluso fue nominado a un Globo de Oro como mejor actor de reparto por la película Amadeus.
Todo parecía ir bien, pero en 2002 su carrera fue en picada. Ese año fue arrestado por posesión de pornografía infantil y supuestamente contratar a un niño de 14 años para tomarle fotos inapropiadas. No se declaró culpable y aunque no fue enviado a prisión, terminó cumpliendo 5 años de libertad condicional y estaba obligado a registrarse como delincuente sexual.
En 2010 fue sentenciado nuevamente a 250 horas de servicio comunitario por no actualizar su registro, que debe hacerse anualmente.
Todos conocimos a Mark Wayne Salling por su encarnación de «Puck» en la serie juvenil Glee. Pero su fama le duró poco ya que en 2015 fue arrestado, también por posesión de fotografía infantil, aunque se le dio libertad bajo fianza.
Las autoridades dijeron en un comunicado que encontraron un portátil, un disco duro y una unidad USB llenas de imágenes y vídeos de pornografía infantil. La teniente Andrea Grossman precisó en ese momento que:
«No importa quién sea usted o lo que haga, si lastima a un niño, se le considerará responsable».
Y aunque llegó a un acuerdo con la fiscalía, terminó ahorcándose en un cañón cerca de Los Ángeles antes de la sentencia. Fue hallado muerto el 30 de enero de 2018.
Todo sobre Amanda Bynes pintaba bien en sus inicios. En 1999 tuvo su propio programa en Nickelodeon, llamado The Amanda Show, y participó en varias películas y series, como What I Like About You. Pero sus problemas con las drogas y el alcohol fueron llevando su carrera a su fin.
En 2010 anunció en Twitter que dejaba el mundo de la actuación:
«Sé que 24 años es una tierna edad para retirarse, pero tienen la primicia, me he retirado. Ser actriz no es tan divertido como parece, si ya no amo algo, lo dejo de hacer. Ya no amo actuar, por eso he dejado de hacerlo».
Ese no fue su único tweet polémico, muchos otros, recopilados por E News, dieron mucho de qué hablar. En 2013 fue arrestada por imprudencia al conducir, manipulación de evidencia y posesión de marihuana. Su conducta errática tras provocar un pequeño incendio en la casa de los vecinos de sus padres hizo que fuera recluida en un hospital psiquiátrico.
En 2017 dijo que estaba lista para volver a brillar. Aún no ha ocurrido, pero muchos de sus fans la esperan.
Todos en el medio artístico tenían una buena imagen de Stephen Collins, quizás porque encarnó por años el papel de un pastor en la serie 7 Heaven. Pero en la vida real este actor parece no entender el concepto de moralidad.
Según la revista People, en 2014 Collins fue investigado por abuso a menores. Su esposa, la actriz Faye Grant, se encargó de grabar en secreto una sesión de terapia privada en la que el artista hace la confesión.
El portal TMZ divulgó el material y eso acabó abruptamente con su carrera. Incluso fue despedido de Ted 2.
Jared Scott Fogle pasó a la historia como el «Subway Guy», una campaña publicitaria en la que solo comía comida rápida de Subway con la que aseguró haber perdido mucho peso. También estuvo en Saturday Night Live y en la película Sharknado 2: The Second One.
Pero su fama de pedófilo se llevó por el caño cualquier oportunidad en la industria. En 2015 lo arrestaron por posesión de pornografía y prostitución infantil.
El portal de Noticias ABC 7 destacó que él había estado bajo la mira del FBI desde el 2007, pero no tenían suficientes evidencias. Finalmente fue condenado a 15 años de prisión.
Los programas de cocina tienen mucha aceptación en el público, y eso lo sabía muy bien Paula Deen, que durante años mantuvo en lo alto su imperio de la comida.
Dueña del restaurante Lady & Sons, escritora de 14 libros e invitada a programas como Top Chef, Master Chef y Extreme Makeover: Home Edition y hasta un papel en la película Elizabethtown.
Parecía que lo tenía todo, pero su tendencia racista le ganó el repudio de casi todo el país. En 2012 un empleado de uno de sus restaurantes la demandó por discriminación, alegando que Deen usaba la palabra con N constantemente con sus trabajadores. Una vez quiso realizar una boda con temática sureña, «al estilo plantación del sur», en la que hombres de color debían representar a esclavos.
En su juicio se le preguntó si, efectivamente, había usado la palabra, a lo que respondió: «Sí, por supuesto». Luego de este escándalo el canal Food Network canceló sus contratos con ella.
La actriz y humorista Kathy Griffin siempre ha estado envuelta en la controversia por sus chistes pesados sobre famosos; no obstante, eso no le ha impedido hacerse de importantes galardones como el Emmy. Pero en 2017 llegó muy lejos, cuando posó para una fotografía con una cabeza ensangrentada muy parecida al presidente Donald Trump.
Por supuesto que el post causó revuelo y una gran cantidad de críticas negativas. Ella se disculpó por toro y admitió que su broma, fue demasiado:
«Pido mis más sinceras disculpas, acabo de ver ahora la reacción a esas imágenes».
La cadena CNN rescindió su contrato con Griffin y dijo que «debería avergonzarse de sí misma». Su broma hizo que incluso el FBI la investigara.
El rapero Thomas DeCarlo Callaway, mejor conocido como CeeLo Green, siempre ha tenido problemas por abrir su boca y decir cosas equivocadas. En 2012 se le cayeron cargos por agresión sexual y por supuestamente haber dado éxtasis a su víctima, pero en 2014 recibió la libertad condicional. Dos días después escribió una serie de tweets que empeoraron, aún más, la situación:
«Si alguien se desmaya, ni siquiera ESTÁ CONTIGO conscientemente. Por lo tanto, CON implica consentimiento».
Más tarde se disculpó por esos mensajes tan contradictorios y dijo que en retrospectiva se dio cuenta que lo que tuiteó fue «muy irresponsable».
Casa Blanca es un clásico del cine, así como Por Quién Doblan las Campanas, y la sueca Ingrid Bergman interpretó personajes en ambas producciones. Fue galardonada con tres premios Oscar, igualada solamente por Meryl Streep y superada por Katharine Hepburn.
Además, fue la primera ganadora del Tony como mejor actriz, y cinco Globos de Oro también figuran en su haber.
Es considerada como una de las figuras más influyentes del séptimo arte, ¿qué pudo ir mal? A pesar de que estaba casada con Peter Lindstrom, tuvo una aventura con el director Roberto Rossellini y hasta quedó embaraza de él.
En esta época una aventura no escandalizaría mucho, pero en los años 40 era impensable que una mujer casada lo admitiera públicamente. Ella llegó a asegurar que recibía cartas de odio e incluso fue declarada persona non grata en Estados Unidos.
Robert Blake cautivó a todos en su infancia con su papel en Little Rascals. Pero su madurez se convirtió en una serie de eventos desastrosos cuando lo arrestaron como sospechoso del asesinato de su esposa Bonny Lee Bakley en 2001.
La terrible escena ocurrió en un restaurante llamado Vitello, la mujer, que antes de casarse con él se dedicaba a extorsionar a hombres, recibió un disparo mientras estaba en el coche del actor. Él dijo que no estaba allí en ese momento, pues se había vuelto al restaurante a buscar un arma que había dejado en la mesa.
Tras años de testimonios y juicios, en marzo de 2005 fue declarado inocente. Pero los hijos de Lee Bakley interpusieron una demanda civil y ganaron, por lo que Blake tuvo que pagar 30 millones de dólares.
Se declaró en bancarrota y nunca más le ofrecieron un contrato.
El actor y comediante Roscoe Conkling Arbuckle, a quien cariñosamente llamaban el «gordo» Arbuckle, era muy conocido en los años 20. Pero una fiesta que terminó con una actriz muerta acabó de lleno con su carrera.
Tal y como explica el blog Crime In The 1920’s, Arbuckle y otros dos sujetos alquilaron tres habitaciones en el hotel St. Francis para una fiesta. Varias mujeres fueron invitadas, entre ellas la aspirante a actriz Virginia Rappe, quien fue encontrada muy enferma en la habitación 1219, en la que se alojaba el actor.
El doctor del hotel dijo que estaba intoxicada, pero ella murió cuatro días después con la vejiga rota.
Tras la muerte de Rappe, comenzó un fatídico juicio que terminó con la declaración de Arbuckle como inocente. Aunque tuvo que pagar una multa de 500 dólares por servir alcohol en la fiesta y violar la Ley Volstead.
La ex Miss Korea Sung Hyun-Ah comprobó de mala manera que tener una cita en el mundo del espectáculo no siempre es glamuroso. Tuvo una relación con un influyente empresario coreano, pero luego terminó siendo acusada de prostitución.
Supuestamente había recibido 50 millones de wons (unos 44.000 dólares) por favores sexuales, señaló The Korea Observer. Fue condenada a pagar una multa de 2 millones de wons y su carrera pasó a un segundo plano.