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Filosofía nihilista: una doctrina filosófica que no reconoce una verdad o principio objetivo en el mundo

Desde los tiempos de la Antigua Grecia hasta la contemporaneidad, han surgido diferentes doctrinas filosóficas que buscan dar respuestas a los problemas de la sociedad y el mundo. Una de las más peculiares es el nihilismo, el cual plantea que todo se reduce a nada y, por tanto, la vida no tiene ningún sentido. Por medio de este artículo, haremos un preciso repaso por los aspectos fundamentales de la filosofía nihilista, específicamente su origen y evolución, principios, principales corrientes y todas aquellas características que contribuyan a la comprensión de saber qué es ser nihilista.

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¿Qué es el nihilismo?

Para comenzar, es importante conocer algunos rasgos teóricos que permitan entender el significado de nihilismo en filosofía y su definición como corriente, y más cuando se trata de una de las doctrinas más complejas, a pesar de que se ha hecho relevante dentro de la vida cotidiana y la cultura popular. A continuación, te presentamos el concepto de nihilismo y el desarrollo histórico de dicha doctrina filosófica.

Definición de nihilismo

Muchos se preguntan qué es nihilista, y es que este término  de origen latín significa nada o lo que no existe, por lo que esta doctrina filosófica se aboca a defender la carencia de validez de todo valor o principio. Es decir, una persona nihilista no cree en ningún tipo de dogma religioso, oponiéndose a la existencia de un ser supremo o trascendental, a la vez que rechaza todo principio político, moral, cultural que se impone dentro de la sociedad.

Al no poseer un propósito, significado u objetivo concreto regido por alguna entidad superior, la vida no tiene sentido alguno. Con el tiempo, el significado de nihilista adquirió un carácter crítico hacia los sistemas sociales y el orden establecido en el mundo, por lo que esta doctrina además sostiene que toda estructura social es artificial.

Erróneamente, se asocia el término nihilismo a una manera despectiva de referirse a jóvenes con pensamientos radicales, ya que, al oponerse a determinados paradigmas, eran señalados de no creer en nada.

Desarrollo histórico de la filosofía nihilista

Descrita la definición de nihilista, es momento de repasar el origen y la evolución de esta corriente filosófica. Los primeros indicios del nihilismo se remontan a la Antigua Grecia, concretamente en la escuela cínica fundada por Antístenes en el siglo IV a.C. Esta plataforma antigua sirvió para que muchos filósofos griegos emplearan la sátira como medio de crítica al orden y la moral de dicho contexto histórico, donde prevalecía la irreverencia, la provocación y la desvergüenza.

Otro de los personajes que utilizó el término nihilista para referirse a los no creyentes fue San Agustín de Hipona, el cual hizo carrera teológica durante el siglo V, así como también el crítico N. I.  Nadedjin, que usó este concepto para señalar a las personas que nada entiende y nada saben. Por otra parte, la palabra nihilismo se hizo recurrente en el discurso del pensador alemán Friedrich Heinrich Jacobi a partir de 1799, como una forma de caracterizar el racionalismo.

Sin embargo, basta leer la novela Padres e hijos, escrita en 1862 por el novelista ruso Iván Turguénev, para comprender de forma evidente qué significa nihilismo, ya que uno de los personajes principales del libro adopta una actitud totalmente acorde a dicha doctrina. Tiempo después, el nihilismo fue asumido en Rusia como un fenómeno cultural que surgió  en vísperas del reinado de Alejandro II, por lo que los jóvenes de esa época adoptaron una reacción contraria a las concepciones idealistas, religiosas y metafísicas existentes en ese tiempo, llegando incluso a ridiculizar los valores conservadores de los padres.

No fue hasta finales del siglo XIX que el nihilismo fue conceptualizado como corriente filosófica en Nietzsche, sustentando su teoría en la premisa Dios ha muerto, por lo que toda interrogante que, históricamente, encontraba su respuesta en lo divino, ya no la tiene, al mismo tiempo que se devalúan o destruyen los valores supremos. No obstante, esta situación, de acuerdo a Nietzsche, debía aprovecharse para desmontar toda moral impuesta de forma tradicional y crear un nuevo humano, al cual llamó superhombre.

Tal ha sido la relevancia de esta corriente filosófica que se puede ver manifestada por medio del arte nihilista, cuya finalidad reside en criticar el esteticismo que recrea la belleza de lo abstracto y deja de lado la utilidad social real.

Principios e ideas nihilistas

De acuerdo a lo planteado dentro de la filosofía nihilista, resaltan las siguientes ideas que sustentan dicha corriente, congregadas gracias a los aportes de los diversos teóricos que contribuyeron a dar forma a la conceptualización del nihilismo:

Vida sin sentido

El nihilismo reside en señalar que la vida no tiene sentido alguno, por lo que, en términos generales, no existe forma o manera alguna para vivirla correctamente.

Existencia efímera

La existencia del individuo, según la filosofía nihilista, es considerada como vana, por lo que el hombre debe decidir cómo vivirla para hacerla más placentera, tomando en cuenta que sus elecciones están pautadas para vivir de forma libre y plena.

Libertad en el vacío existencial

Lo que más llama la atención del nihilismo es que el hecho de desprenderse de toda creencia moral, religiosa, política y social es una manera fehaciente de vivir en libertad, sin condicionante ni control alguno impuesto por paradigmas tradicionales.

Oposición a diversos mecanismos que controlan el pensamiento

Otro de los postulados fundamentales de la filosofía nihilista es el del rechazo a aquellos aspectos catalogados como mecanismos de control que funcionan a favor de un status quo determinado, sobre todo los contemplados dentro del aspecto religioso, ideológico, ético y moral y cultural, entre otros.

Algunos filósofos nihilistas famosos

Dentro de la filosofía nihilista y su desarrollo a lo largo de la historia, diversos intelectuales han aportado sus respectivas ideas a esta corriente, que se ha mantenido vigente con el pasar del tiempo.

Entre los más renombrados filósofos del nihilismo destacan:

Friedrich Jacobi (1743-1819)

Filósofo alemán que llegó a ejercer como presidente de la Academia de Ciencias de Baviera. Fue en su tiempo centro de una polémica en la cual sostuvo que todo el movimiento de la Ilustración tenía una vertiente spinozista, con opiniones que ayudaron a su renombre dentro de la prensa germana.

Orientó su pensamiento filosófico a proponer la búsqueda de un conocimiento demostrable más allá del saber intelectual, es decir, a lo que se le denomina absoluto.

Retrato de Jacobi, hecho por el pintor Johann Friedrich Eich. (Gleimhaus, Public domain, vía Wikimedia Commons).

Søren Kierkegaard (1813-1855)

Este filósofo y teólogo de origen danés es considerado el padre del existencialismo, por lo que sus propuestas para esclarecer la existencia humana inspiraron el pensamiento filosófico del siglo XX, especialmente en teóricos como Heidegger, Sartre, Camus y Unamuno. Abordó las nociones de desesperación, angustia e importancia del individuo, además de ser un férreo crítico del hegelianismo latente en su época.

La mayoría de su obra fue escrita para tratar cuestiones religiosas como la ética cristiana, la institucionalidad de la iglesia y otros aspectos que son asumidos por los humanos para la toma de decisiones que plantea la vida. Por otra parte, su trabajo trascendió en otros ámbitos distintos al filosófico, siendo catalogado fundador de la psicología cristiana y la psicología y terapia existencial. Por otra parte, sus ideas lo convirtieron en uno de los precursores más renombrados del posmodernismo.

De su extensa obra destacan los siguientes libros:

  • Migajas filosóficas (1844)
  • El concepto de la angustia (1844)
  • Tratado de la desesperación (1849)
  • La inmutabilidad de Dios (1855)
Boceto inacabado de Kierkegaard, realizado por el artista Niels Christian Kierkegaard, primo del filósofo. (La Biblioteca Real de Dinamarca, Public domain, vía Wikimedia Commons).

Friedrich Nietzsche (1844-1900)

Filósofo, filólogo, músico y poeta de origen alemán, fue uno de los intelectuales más importantes y controvertidos de la segunda mitad del siglo XIX, a través de propuestas filosóficas relacionadas con las actitudes morales de la sociedad, siendo la más polémica su crítica al paradigma religioso impuesto desde la Antigüedad, llegando incluso a ser reconocida su frase “Dios ha muerto”, dando pie a su posición nihilista, premisa fundamentada por Nietzsche por el pensamiento metafísico occidental, considerado como decadente y, por tanto, como un vacío al demostrarse que los valores impuestos históricamente no habían servido para establecer ni dominar oposiciones.

Entre las obras más famosas escritas por Nietzsche se encuentran:

  • Sobre verdad y mentira en sentido extramoral (1873)
  • Aurora. Reflexiones sobre los prejuicios morales (1881)
  • Así habló Zaratustra (tomos I y II, 1883; tomo III, 1884 y tomo IV, 1885)
  • Más allá del bien y el mal (1886)
  • El Anticristo (1888)
Fotografía de Nietzsche, hecha por Friedrich Hermann Hartmann. (Friedrich Hartmann, Public domain, vía Wikimedia Commons).

Martin Heidegger (1899-1976)

Para muchos, es el intelectual alemán más relevante del siglo XX, con trabajos que no solo han sido abordados dentro de la filosofía europea contemporánea sino también en otras disciplinas como la teología, la arquitectura y la crítica literaria, además de ser un claro referente para la filosofía francesa. No obstante, ha sido señalado como un polémico intelectual, sobre todo por ser militante y ferviente seguidor del nazismo, hecho que ha llevado a señalar la contradicción entre su propuesta filosófica y dicha doctrina política.

Lo cierto es que a partir de 1944 estudió la filosofía nietzscheniana, además de asumir una posición crítica ante el olvido que el cogito cartesiano había demostrado hacia el sentido del “yo soy”. Heidegger da su punto de vista sobre el nihilismo, al señalar que es el estado donde no queda nada del ser en sí, por lo que el individuo ve reducido su valor. Este pensamiento se ve fundamentado por tres principios:

  • Negación de todo valor, idea y principio impuesto históricamente
  • Autoafirmación de la negación que se menciona
  • Construcción de una nueva realidad como punto de partida hacia un mejor individuo.

Principales corrientes y ejemplos de nihilismo

De acuerdo al nihilismo en Nietzsche, existen al menos dos subtipos de esta corriente filosófica:

El nihilismo activo

También llamado nihilismo positivo, defiende la destrucción de todo valor y principio impuesto en la sociedad que daba sentido a la existencia, sobre todo de la mano de los dogmas tradicionales religiosos, políticos y morales. Dichos principios caducos y su decadencia debe verse como una oportunidad para construir una nueva realidad, con valores que pueden sustituirse por aquellos que den forma a una nueva moral, una nueva historia y, por consiguiente, a un nuevo hombre con madurez superior a la del hombre común.

El nihilismo pasivo

Conocido también como nihilismo negativo, declara que el hombre niega todo valor y creencia convencional que rige su ética y que da sentido a su existencia, respondiendo así con actitudes y sentimientos negativos como la inacción, la desesperanza, la negligencia, la autodestrucción o la falta del deseo de vivir, ya que su vida la encuentra insostenible.

El nihilismo optimista

Aparte de los subgéneros previamente descritos, hoy ha cobrado fuerza el nihilismo optimista, el cual pregona que, en medio de lo innecesaria que puede ser la vida, el ser humano debe buscar la felicidad para evitar caer en la desesperanza. Al contrario, se debe hacer todo lo posible por darle un nuevo significado a la existencia.

Muchos afirman que la filosofía nihilista es una de las doctrinas que rigen nuestra actualidad, si bien, según las propuestas de Nietzsche, las condiciones para el nacimiento del superhombre no son propicias, por lo que podría tratarse de una quimera o de la solución que surgirá una vez que se destruya totalmente todo paradigma. Por otra parte, se ha determinado que el nihilismo ha permeado en varios aspectos de la vida, como en el caso de la política, la cultura, el arte, la literatura, la ética y el cine, espacios donde se han hecho determinados cuestionamientos que aseveran qué significa nihilista.

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