Jason de Caires Tailor no solo es el autor de esculturas originales, que podrían calificarse como las más asombrosas de los últimos tiempos, sino que su trabajo ya ha contribuido a recuperar numerosos arrecifes de coral, fundamentales para la preservación de la vida marina. Jason deCaires fue el creador del primer parque-museo subacuático del mundo en el año 2006 y, a día de hoy, ya ha desarrollado cinco proyectos similares a nivel mundial en cuatro continentes.
Cristo del abismo:
Todo sobre la impactante estatua de Cristo sumergida en el mar
Pero lo más apasionante es su pensamiento sobre el tiempo y del espacio, así como sobre la vida y la muerte, y su firme creencia de que, cuando una escultura es lanzada al mar, los corales se encargan de revivir al cuerpo inerte hecho de hormigón.
Jason de Caires Tailor ama los barcos que naufragaron, constituyéndose luego en fuente de vida para los corales y los peces, y considera que sus obras de arte son una donación a los océanos, espacios sagrados y origen de nuestra especie.
Según confiesa el escultor, tres eventos marcaron su existencia de una forma radical: su emigración al continente asiático cuando tenía apenas 11 años, para cambiar su entorno drásticamente; vivir cerca en la costa de Malasia, donde pudo observar muy de cerca a los corales, y la fascinación que Jacques Cousteau (1910-1997) sentía por el mar, así como el pensamiento de este incansable explorador, al que tanto admiró, acerca de que es imprescindible proteger lo que se ama.
Jason deCaires, hijo de padre inglés y madre guyanesa, nació en la ciudad de Dover (Reino Unido) el 12 de agosto de 1974. Emigró junto con sus padres a Malasia en el año 1976, para luego regresar y estudiar en el Instituto de Arte de Londres su carrera, obteniendo un Bachelor Degree con honores en Escultura en el año 1998.
Mientras que cursaba sus estudios en la universidad se dedicó a dar entrenamientos en submarinismo y también estudió fotografía –lo que le condujo a convertirse en fotógrafo submarino– de manera que su talento, su experiencia personal, sus conocimientos, su pasión por el mar y su licenciatura con mención especial en Escultura, se conjugaron para crear las circunstancias propicias a su formación como un artista especialmente singular.
En la actualidad, el escultor submarino más famoso de todos los tiempos vive en España, específicamente en Canarias, en la isla de Lanzarote, un paraíso donde se pueden visitar algunos de sus impresionantes trabajos.
Las obras de Jason deCaires Taylor son innumerables, concentrándose la mayor parte de ellas en ambientes subacuáticos. Son esculturas bajo el mar, que solo se pueden ver buceando o desde barcos especiales con suelo de vidrio.
En todos los museos donde se exhiben estas esculturas subacuáticas, existen obras de figuras individuales, así como otras que constan de un gran número de personas esculpidas a tamaño natural, lo que les otorga gran monumentalidad y provoca gran impacto en quienes las admiran.
Lo singular de Jason deCaires es que, detrás de cada obra, individual o colectiva, hay un mensaje, o más bien una inquietud acerca del papel que desempeña el ser humano y su destino. Por otra parte, otra de las características fundamentales de sus esculturas es que reflejan a las personas de cada comunidad, con sus mismos rostros y cuerpos.
Utiliza una novedosa técnica denominada lifecasting, que consiste en reproducir de forma exacta el cuerpo y rostro de los individuos, mediante un procedimiento de moldeado. De esta manera logra que las esculturas, que luego serán sumergidas en el mar, sean una copia fiel de las personas de la comunidad.
En la actualidad, es posible observar obras de este escultor subacuático en lugares tan distantes como el Caribe, Lanzarote, Noruega, islas Maldivas y Australia, todas desbordantes de creatividad y con conceptos sorprendentes.
El Parque Escultórico Submarino de Molinere, ubicado en la bahía del mismo nombre de la isla de Granada, fue el primer museo subacuático de Jason deCaires. Fue ideado por su creador a raíz de dos devastadores huracanes –Iván y Emily– ocurridos en los años 2004 y 2005, que impactaron gravemente en los arrecifes de coral.
El mar Caribe contiene al 9% de todos los corales del mundo y está constantemente amenazado por potentes huracanes, que son una de las principales causas de la destrucción de los arrecifes de coral. En esta zona se producen más de 6 huracanes por año, por lo cual, según estudios, los corales se han visto mermados en un 40% desde el año 1970.
El parque consta de 65 esculturas submarinas de figuras humanas al tamaño natural, en una extensión de aproximadamente 800 metros cuadrados y a una profundidad que oscila entre 5 y 12 metros. Fue diseñado utilizando modelos y escenas de la comunidad de esta pequeña isla volcánica, para involucrar así a la población en la defensa de su ecosistema marino.
El Parque Escultórico Submarino de Molinere fue abierto al público en marzo de 2006. En el año 2011 la revista National Geographic lo incluyó entre las 25 principales maravillas del mundo, afirmando que era uno de “los lugares más impresionantes de la Tierra”.
En este museo subacuático de arte se observa una gran cantidad de representaciones de hombres, mujeres y niños en diferentes circunstancias. Igualmente, viejas embarcaciones hundidas, que es uno de los temas favoritos de Jason deCaires. Entre las múltiples obras se pueden destacar las denominadas: “Vicisitudes”, “Corresponsal Perdido” y “Gracia de Coral”.
Está conformada por 26 figuras humanas que, tomadas de la mano, forman un círculo. Según dicen, representa a niños de diferentes etnias, aunque también opinan que este grupo de esculturas se refiere a los esclavos africanos arrojados al mar durante las travesías hacia América.
Se observa a un hombre sentado frente a un escritorio, con una antigua máquina de escribir, y varios periódicos desparramados que corresponden a publicaciones sobre eventos políticos sucedidos en Granada en la década de 1970. La imagen hace referencia a ese pasado, cuyo símbolo es la vieja máquina.
Consta de 16 rostros de mujer dispersos por la arena, que representan a las pobladoras de la isla de Granada. En este caso, la intención del creador fue resaltar la transformación de estas mujeres desde los tiempos de la colonización inglesa, ya que, para Jason deCaires, el hecho de que una escultura sea recubierta de corales significa una evolución.
Este museo acuático también se encuentra en el mar Caribe, específicamente en México, entre la costa de Cancún y la Isla de Mujeres, cuna de la civilización maya. En uno de los extremos de la isla se pueden observar los vestigios de un antiguo templo dedicado a la diosa Ixchel, que representa el amor, la maternidad y la protección femenina.
El Museo Subacuático de Arte (MUSA) en México, fue inaugurado en diciembre del año 2010, después de que el director del parque nacional donde se encuentra el museo detectara que muchos corales estaban fracturados. Se decidió crear una barrera de coral artificial y contactaron a Jason deCaires Taylor por su experiencia positiva en la isla de Granada, para que diseñara un museo bajo el mar.
Este museo de arte subacuático se ubica sobre una extensión de 420 metros cuadrados, a una profundidad entre los 3 y 9 metros, y en el mismo se pueden observar más de 500 espectaculares esculturas, entre las cuales es difícil escoger una apropiada representación. Por la monumentalidad, así como por ciertas otras características, se podrían mencionar a tres de ellas: “La evolución silenciosa”, “Hombre en llamas” y “El jardinero”.
Es la colección más grande de Jason deCaires, conformada por una multitud de 450 hombres, mujeres y niños al tamaño natural, que simulan una ciudad bajo el agua. A partir de las escenas y de los personajes, se visualiza el mundo contemporáneo y se construye una narrativa histórica.
Esta escultura fue lanzada al mar por un pescador de la zona y le fueron colocados, tanto en la cabeza como en el cuerpo, retoños de coral de fuego -una especie particular de coral de color mostaza- rescatados de un arrecife dañado. Se ha interpretado como un hombre en estado de desesperación.
Los que han analizado la obra de Jason deCaires se refieren a esta escultura como un símbolo de prosperidad, que al mismo tiempo habla de la intervención positiva del hombre en la naturaleza, así como de una simbiosis entre la vida terrestre y la vida marina.
Con 5 metros de altura, esta es la mayor escultura subacuática del mundo. Fue encargada a Jason deCaires por una fundación que se dedica a la conservación de los arrecifes en Bahamas, y se encuentra cercana a las playas de Nassau, su capital. La escultura Ocean Atlas en las Bahamas, simula a una mujer que, como el titán Atlas, lleva el peso del mundo –que en este caso es la carga ambiental- sobre sus hombros.
Este museo bajo el agua, conocido internacionalmente como Underwater Museum of Lanzarote, fue inaugurado el 10 de enero del año 2017 en Playa Blanca, isla de Lanzarote, y es el primer museo subacuático de Europa. Se extiende por 2.500 metros cuadrados y, a una profundidad comprendida entre los 12 y 14 metros, alberga a más de 300 esculturas representativas de la comunidad de la isla.
La ubicación del museo bajo el agua de Lanzarote estuvo planificada de manera que las esculturas estuvieran protegidas de los vientos y de las fuertes olas, por lo cual se escogió la bahía de las Coloradas, en el suroeste de la isla. Por otra parte, Playa Blanca se encuentra a 14 minutos del parque nacional de Timanfaya, lo que hace que el museo bajo el mar de Lanzarote atraiga a los visitantes del mencionado parque, que es el segundo en afluencia de las islas Canarias después del Teide.
Jason deCaires describe a la isla de Lanzarote como un impresionante paisaje volcánico que, según sus palabras, es de “una belleza desgarradora” y que genera una sensación “apocalíptica” de un “no-tiempo”. El escultor transmite esta gran carga emocional a través de todas las figuras que se encuentran en el museo acuático en Lanzarote, entre las que se podrían resaltar: “El remolino humano”, “La balsa de Lampedusa” y “El portal”.
Es su última obra para el museo y está conformada por un grupo de 200 esculturas de cuerpos humanos al tamaño natural que, sobrepuestos unos sobre los otros, se amontonan formando un círculo. Se convierten en esculturas inquietantes, que reflejan la muerte y la fragilidad del ser humano frente a las poderosas fuerzas de la naturaleza.
Esta obra plantea lo terrible de las migraciones humanas por vía marítima, que causan miles de muertes al año al zozobrar las precarias embarcaciones. Se inspira en el cuadro conocido como “la balsa de la Medusa” del pintor francés Théodore Géricault (1791-1824), precursor del Romanticismo, que hace referencia a un importante naufragio ocurrido en el océano Atlántico en 1816.
A través de esta escultura, que representa a una imagen más animal que humana mirando un espejo, al parecer el creador quiso reflejar la mezcla entre lo humano y lo dionisíaco que está presente de forma simultánea en el hombre. El espejo equivale al mar, por lo que esta figura híbrida se refleja en el lugar donde se originó la vida y donde -según deCaries- se produce el renacimiento.
Este famoso escultor no solo ha creado los museos subacuáticos mencionados, sino que sus obras, las cuales son innumerables, están presentes en diferentes lugares del mundo, incluyendo Australia. Con la finalidad de proteger la barrera coralina más grande del planeta y patrimonio de la humanidad, el MOUA (Museum of Underwater Art), estaba previsto para ser inaugurado entre abril-mayo de 2020, pero el nombre de las obras aún no ha sido desvelado.
Aparte de las esculturas subacuáticas ya mencionadas, existen otras de gran interés, especialmente en el MUSA y en el Museo Atlántico de Lanzarote, tales como: “El coleccionista de sueños”, “Herencia” y “Cruzando el Rubicón”.
Se encuentra en el MUSA y la escultura se refiere a un hombre que guarda los mensajes contenidos en botellas, que las corrientes van arrastrando hasta él.
Esta escultura también se encuentra en el MUSA y hace alusión a un niño que observa una gran cantidad de basura acumulada, que es la herencia que ha recibido.
Esta obra, ubicada en el museo acuático de Lanzarote, está compuesta por un grupo de 35 personas que caminan de forma autómata hacia un extraño muro, en referencia al destino de la humanidad.
También este famoso escultor ha realizado muchas obras terrestres, entre las que se pueden destacar: “Marea creciente”, “Clara Lanzarote” y “El orgullo del Brexit”.
Se ubica en el río Támesis en Londres. Está compuesta por un grupo de cuatro caballos montados, en alusión a los Cuatro Jinetes del Apocalipsis, que pueden ser vistos cuando bajan las aguas del río.
Esta escultura, hecha de un material brillante con incrustaciones de colores, se encuentra en la arena, a la orilla de Playa Blanca, cerca del Museo del Atlántico, y es bañada suavemente por las olas del mar.
De gran significado y actualidad, esta obra está compuesta por tres leones famélicos, que yacen a punto de fallecer en los Acantilados de Dover, en el Reino Unido, frente al Canal de la Mancha.
Aunque los nombres de las esculturas que serán ubicadas en el MOUA –Australia- no se conocen en detalle, ya hay algunas de las que algo se sabe. En este sentido, se puede mencionar a “La sirena oceánica”. Otras de las más recientes obras de Jason deCaires son: “Nexus” y “Coralarium”.
Se encuentra cerca de la barrera de coral de Australia y está ubicada sobre una base que sobresale del mar. Lo interesante de esta escultura es que cambia de color de acuerdo a la temperatura del agua.
Nexus es un conjunto de 12 esculturas que se ubican, algunas sumergidas y otras superficiales, en el fiordo de Oslo, en Noruega.
Coralarium es un museo semi sumergido en las islas Maldivas y a lo lejos se divisa como una estructura cúbica brillante de la que sobresalen varias figuras humanas.
Para entender la importancia de la obra de Jason deCaires Taylor, es necesario conocer cómo influyen los arrecifes de coral en la vida del mar -y por ende de todo el planeta-, ya que dicha obra está dirigida a la creación artificial de barreras de coral mediante sus esculturas elaboradas a base de cemento con pH neutro, que son rápidamente colonizadas por los pólipos coralinos.
Los arrecifes de coral son formaciones antiquísimas de la Tierra y se componen tanto de pequeños organismos animales como de plantas, albergando al 25% de todas las especies marinas. Así mismo, son como las extensas selvas tropicales que, absorbiendo el COշ, devuelven oxígeno. De ahí la gran importancia de mantener a los arrecifes de coral vivos y sanos.
Jason deCaires es el creador de la originalísima idea para incentivar la formación de corales a través de esculturas, pero al mismo tiempo su intención es involucrar a las poblaciones en la preservación de su ambiente.
A pesar de su juventud y de que su actividad artística es relativamente nueva y hasta cierto punto desconocida, Jason deCaires ha recibido numerosos premios y reconocimientos por su labor, tanto por la originalidad de su obra como por su contribución a la conservación de los océanos.
Algunos de los premios y reconocimientos recibidos son:
La obra de Jason deCaires Tailor es una historia llena de corales, peces y barcos naufragados que nos hace viajar en el tiempo, mirando simultáneamente al presente y al pasado, al tiempo que reflexionamos sobre el futuro. Ningún artista de estos tiempos es capaz de sorprendernos y embelesarnos como lo hace Jason deCaires a través de sus esculturas.