Actualmente, la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), junto con otras agencias importantes del mundo, tienen en curso diferentes misiones espaciales que buscan explorar los secretos del universo para obtener datos que puedan usarse para beneficiar a la humanidad. Por ejemplo, la sonda solar Parker está estudiando, desde el 2018, la atmósfera del Sol y ha logrado estar más cerca de lo que alguna vez haya estado una nave espacial. En el futuro, misiones de la NASA como VIPER (2024), tienen la intención de estudiar el hielo de agua en la Luna y, al mismo tiempo, comprender el origen de este líquido en el sistema solar.
Sondas espaciales:
Las funciones y ejemplos más conocidos de los mensajeros de la humanidad en las estrellas
Cuando se creó la agencia espacial norteamericana, el 29 de julio de 1958, hace 65 años, se proyectó como una institución líder en la investigación, descubrimiento y la expansión del conocimiento aeroespacial para el beneficio de la humanidad. Gracias a los avances de la ciencia y la tecnología, la NASA no solo ha podido estudiar año tras año la Tierra y su sistema solar, sino que ha hecho los esfuerzos por desarrollar innovaciones espaciales que permitirán la exploración futura a planetas como Marte, Mercurio y Júpiter.
A continuación, se presentan las próximas misiones de la NASA que están pautadas para realizarse entre 2023 y 2026.
Una de las principales misiones de exploración espacial de la NASA es Psyche, la cual tiene como objetivo emprender un viaje hacia un asteroide, formado en gran parte por metal, su órbita al Sol se ubica entre Marte y Júpiter.
De acuerdo a los datos de la agencia espacial, parece ser el núcleo expuesto de un planeta primitivo con níquel y hierro, componentes básicos del sistema solar de la Tierra. Esto hace que los científicos estén deseosos de saber qué otras características únicas esconde el asteroide.
Psyche se convierte en una vía hacia el descubrimiento porque los expertos aún no han podido identificar el núcleo de la Tierra. En palabras de la NASA, esta misión puede arrojar luz sobre «la brutal historia de colisiones y expansiones que crearon los planetas».
La Universidad Estatal de Arizona es responsable de esta misión y, por su parte, la NASA gestiona las operaciones y la navegación con el Jet Propulsion Laboratory, mientras que la empresa Maxar Technologies se encarga de la construcción del chasis de la nave con carga útil, la cual cuenta con:
En esta expedición, los expertos van más allá de las ondas de radio para probar una nueva tecnología de comunicación láser que convierte los datos en fotones para su transmisión a la Tierra. La innovación de las comunicaciones ópticas en el espacio profundo (DSOC) hace posible que las naves espaciales transmitan grandes cantidades de información en un tiempo limitado.
Por otro lado, Psyche tiene el objetivo de comprender los núcleos de hierro y examinar, por primera vez, un mundo hecho de metal. Asimismo, pretende hacer otros diagnósticos relacionados con su creación como, por ejemplo, si en efecto es un núcleo o un material sin fundir, en qué condiciones se formó y cuál es su topografía.
De acuerdo con el calendario de lanzamientos espaciales de la NASA, Psyche tenía previsto su lanzamiento en el 2022 desde el Centro Espacial Kennedy, Florida, para hacer un viaje de 3,5 años y llegar en 2026.
Sin embargo, se fijó el 23 de mayo de 2023 como la fecha tope para que la NASA realice la maniobra de sobrevuelo a Marte y, posteriormente, dirigirse al cinturón de asteroides cerca de Psyche.
Estaría orbitando desde el 2026 hasta el 2027 y tendría un período de observación de 21 meses en órbita, mapeando y estudiando las propiedades del asteroide.
La misión Europa Clipper de la NASA tiene planeado para el último trimestre de 2024 hacer un minucioso examen de la luna helada de Júpiter, Europa, para determinar si existen las condiciones ideales para albergar vida. La nave espacial entrará en la órbita cercana de Júpiter para pasar entre 40 y 50 veces sobre su luna, cubrir distintas áreas y explorar casi todo el satélite.
Por el momento, se sabe que Europa contiene “una fuerte evidencia de un océano de agua líquida”. Estos datos pueden dar una idea de los descubrimientos que podrá hacer la nave de la NASA.
Europa Clipper es tolerante a la radiación en una órbita larga. Su trayectoria tendrá una variación desde 2.700 kilómetros hasta 25 kilómetros sobre la superficie de Europa, pero también pasará cerca de otras dos grandes lunas de Júpiter, Ganímedes (silicatos y hielo) y Calisto (roca y hielo), para ayudar a dar forma y ajustar su órbita.
La nave tendrá una altura de 5 metros y sus paneles solares tendrán una extensión hasta los 30,5 metros de punta a punta. Cuando llegue el momento de su lanzamiento, en octubre de 2024, Europa Clipper tendrá una masa aproximada de 6.000 kilogramos, incluyendo el combustible que necesita para emprender el viaje.
Está equipada con:
La NASA, ha puesto en marcha nuevas tecnologías con el objetivo de que la exploración de la Luna sea más extensa y profunda. Además, la misión marca la primera estadía largo plazo en el satélite. Todos los datos obtenidos sobre la Luna y sus alrededores serán utilizados para enviar a los primeros astronautas a misiones a Marte.
La agencia estadounidense está trabajando junto a la Agencia Espacial Europea (ESA), la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA), la Agencia Espacial Canadiense (CSA) y la Agencia Espacial Australiana (ASA), para hacer que Artemis sea tan segura como exitosa.
Para el año 2028, será posible realizar misiones tripuladas en el satélite, gracias al establecimiento del Campamento Base Artemis en la superficie, que se apoyará de la presencia del Gateway, una estación orbital en la Luna.
La misión, que marca el viaje de primera mujer y el primer hombre negro a la superficie de Luna, tiene como finalidad hacer más descubrimientos científicos para obtener más información valiosa del satélite.
Según la NASA, dichos datos se traducen en “beneficios económicos e inspiración para una nueva generación de exploradores”, que constituyen a Generación Artemis.
“Mientras mantenemos el liderazgo estadounidense en exploración, construiremos una alianza global y exploraremos el espacio profundo para el beneficio de todos”, señala la agencia en la descripción de Artemis.
El Space Launch System (SLS), llevará exploradores a bordo de Orión a 380.000 kilómetros de la Tierra para ubicarse en la órbita lunar.
La nave Orión en el Gateway y los expertos realizarán las investigaciones pertinentes en la Luna y después regresarán a la Tierra.
Por el momento, la NASA ha concluido exitosamente con la misión Artemis I (2022). La siguiente expedición, Artemis II (noviembre 2024), será el primer vuelo del SLS y Orión con tripulación.
Con la misión Artemis III, la NASA llevará a los exploradores a Luna a partir de 2025.
Spectro-Photometer for the History of the Universe, Epoch of Reionization and Ices Explorer (SPHEREx) es el nombre de la misión que explorará cientos de millones de galaxias cercanas y lejanas.
La NASA se ayudará de la luz óptica y en infrarrojo cercano para resolver diversos misterios cósmicos. De acuerdo a la descripción de SPHEREx, se espera contar con información de al menos 300 millones de galaxias y más de 100 millones de estrellas de la Vía Láctea.
El 17 de junio de 2024, SPHEREx irá en busca de agua y moléculas orgánicas. En la Vía Láctea, explorará e investigará viveros estelares, que son regiones donde las estrellas nacen del gas y el polvo, y también destuiará los discos alrededor de estrellas donde es posible que se formen nuevos planetas.
La misión se enfocará en algunas galaxias tan distantes que, según detalla la NASA, su luz ha tardado 10 mil millones de años en llegar al planeta Tierra.
SPHEREX es una de las misiones importantes de la NASA en cuanto a exploración del cielo se refiere, puesto que cuanta con innovaciones tecnológicas de alto nivel, que se adaptan a satélites terrestres y naves espaciales interplanetarias.
En esta expedición se creará un mapa en 102 bandas de colores diferentes de alta resolución. SPHEREx identificará objetivos específicos que serán estudiados a detalle por el telescopio espacial James Webb y el Nancy Grace Roman Spate.
Dragonfly es una de las misiones de la NASA actuales en desarrollo y proceso de investigaciones. Se encargará de hacer estudios del sistema solar y visitar Titán, la luna más grande de Saturno. El viaje está previsto para 2026 y la nave llegará a su destino en 2034.
En la expedición, Dragonfly tomarán muestras de Titán para seguir en la búsqueda de los componentes básicos de la vida. Se ayudará de helicóptero de 8 palas para hacer este viaje de 32 meses en el que recorrerá todos los espacios posibles de la luna helada.
La esperanza de la NASA es que Dragonfly pueda identificar en Titán los componentes orgánicos similares a los de la Tierra antes de que existiera el primer humano.
De acuerdo con los datos ofrecidos por la agencia estadounidense, los instrumentos de Dragonfly suponen un avance significativo en la astrobiología y con sus aportes será posible determinar la progresión de la química antes del surgimiento de la vida.
La investigadora principal de la misión es Elizabeth Turtle, del Laboratorio de Física Aplicada (APL) de Johns Hopkins (Laurel, Maryland). Apuntó que el viaje tiene como norte fijo investigar las propiedades atmosféricas y superficiales de la luna…
…“El océano subsuperficial, los depósitos de líquidos y las áreas donde el agua y los materiales orgánicos complejos clave para la vida, existieron juntos durante posiblemente decenas de miles de años”.
El Telescopio Roman Grace busca hacer avances en los campos de la energía oscura, los exoplanetas y la astrofísica infrarroja. Los científicos de la NASA diseñaron este observatorio con tecnología avanzada para realizar análisis en el interior de la Vía Láctea con su microlente. Se espera que identifique unos 2.600 exoplanetas.
El Telescopio Espacial Roman Grace tiene 2 artefactos, el Instrumento de Campo Extendido y el Coronógrafo. Además, está integrado con un campo de visión 100 veces mayor que el del instrumento infrarrojo del Hubble; podrá capturar gran parte del cielo en un tiempo de visualización más corto.
El instrumento principal será responsable de medir la luz de mil millones de galaxias según lo permita su vida útil. Paralelamente, con su coronógrafo tomará imágenes espectroscópicas y de alto contraste del exoplaneta más cercano que encuentre.
La misión principal del Roman Grace es mantener una vida útil de cinco años, con la posibilidad de extenderse cinco años más, para obtener toda la información necesaria sobre la luz infrarroja del espacio, la energía oscura y la aparición de los exoplanetas.
El telescopio permitirá obtener imágenes con más claridad, brillo y sin interrupciones del clima. Su lanzamiento está previsto para el 2025.
Llevar a cabo las expediciones al espacio exterior siempre ha dependido de cuánto dinero tiene la agencia espacial a su disposición, por parte del gobierno estadounidense, que espera que las misiones espaciales de la NASA sean rentables y proporcionen logros que dejen en evidencia cuán lejos puede llegar “el hombre” por obtener nuevos conocimientos.
En esta sección se presentan 15 grandes misiones de la NASA que quedaron enmarcadas en la historia aeroespacial.
¿Cuándo se fundó la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio y cuando avanzó con la primera misión? No pasó mucho tiempo entre 1958 y 1961, fecha en la que Estados Unidos le hizo frente a la Unión Soviética y como respuesta puso en marcha el Programa Mercury de la NASA.
Mercury marcó el primer éxito de la agencia para lograr vuelos orbitales tripulados. Desde entonces, la atención de la administración de John F. Kennedy se había enfocado en llevar a un astronauta a la Luna y traerlo a la Tierra a salvo.
Gemini fue uno de los primeros programas de vuelos espaciales tripulados que pavimentó el camino hacia el triunfo para los alunizajes del Apollo. Fueron 10 las tripulaciones que volaron misiones en la nave espacial Gemini entre 1965 y 1966.
Los astronautas lograron muchas cosas en las misiones Gemini, como la primera caminata espacial estadounidense, la permanencia en órbita durante más de una semana, conexión con otra nave espacial no tripulada en órbita, el vuelo más alto (Gemini 11) y la resolución de problemas de caminatas espaciales anteriores con Gemini 12.
Con estas misiones, la NASA pudo comprender el impacto que sufrían los astronautas que pasaban muchos días en el espacio, cómo era el uso correcto del traje espacial, y cómo funcionaba el acoplamiento de las naves.
Este fue el programa que resultó en un total de 11 vuelos espaciales. El primer vuelo de Apollo ocurrió en 1968, mientras que el primer alunizaje tuvo lugar un año después, gracias a la misión Apollo 11. El último alunizaje fue en 1972.
Neil Armstrong, Buzz Aldrin y Michael Collins conformaron la tripulación del Apollo 11. Los dos primeros caminaron sobre la superficie del satélite, mientras que Collins se quedó cerca de la órbita de la Luna. Neil Armstrong fue la primera persona en caminar sobre la Luna.
Para el final del programa, fueron 12 los astronautas que caminaron sobre la superficie lunar. Realizaron investigaciones científicas, recogieron rocas para llevarlas a la Tierra y estudiaron varios de sus sectores en el rover lunar que les ayudó a explorar más de la superficie de la Luna.
Lanzadas en 1972 y 1973, respectivamente, Pioneer 10 y 11 fueron las primeras naves espaciales que visitaron los gigantes gaseosos más llamativos del sistema solar: Júpiter y Saturno.
Pioneer 10 fue la primera sonda que viajó por el cinturón de asteroides del sistema solar que se ubica entre Marte y Júpiter. Después, la nave ejecutó el primer sobrevuelo del planeta Júpiter y capturó fotos increíbles cerca de la Gran Mancha Roja y las amplias franjas que bordean el planeta.
P10, al igual que P11 y las sucesoras Voyager 1 y 2, son naves con un “mensaje en botella” que contiene inscripciones y datos que podrían ser leídos si alguna civilización extraterrestre llegase a interceptarlas. Señalan que fue creada por humanos que viven en la Tierra.
La próxima misión le tocó a Pioneer 11, la nave que voló por Júpiter y luego se trasladó a Saturno, planeta descubrió un par de pequeñas lunas desconocidas y un nuevo anillo. Estudió las energías del viento solar
La última señal del Pioneer 10 se captó débilmente en 2003 y su misión terminó en 1997, mientras que la del Pioneer 11 terminó en 1995.
El programa Voyager constó de dos naves espaciales, la Voyager 1 y Voyager 2. Irónicamente, la segunda tuvo el primer lanzamiento en agosto de 1977, pero la V1 se envió en una trayectoria que tomaba menos tiempo. Se lanzó unas dos semanas después.
El camino de la Voyager 2 pasó por Júpiter en 1979, Saturno en 1981, Urano en 1985 y Neptuno en 1989. Gracias a este recorrido los expertos tienen la información necesaria sobre estos planetas.
La V1 hizo su recorrido por Júpiter en 1979 y Saturno en 1980. Entró al espacio interestelar en agosto de 2012.
Por su pastel la V2 inició su trayectoria en noviembre de 2018. Ambas salidas permitieron determinar dónde está exactamente el borde del espacio interestelar: A poco más de 18 mil millones de kilómetros del Sol.
El telescopio espacial Hubble de la NASA, que se lanzó en 1990, es un observatorio multipropósito en la órbita de la Tierra que se utiliza para la astrofísica y la ciencia planetaria.
Con Hubble la NASA revolucionó la comprensión del cosmos grande y pequeño. En cinco misiones logró estudiar asteroides y planetas del sistema solar, exoplanetas y nubes de gas donde nacen las estrellas. Gracias a sus fotos, el mundo pudo observar las primeras imágenes con vista infrarroja de los Pilares de la Creación, una región de formación estelar dentro de la Nebulosa del Águila.
Con sus datos los científicos lograron confirmar que el universo tiene aproximadamente 13.800 millones de años.
En 2004, el turno le tocó a Marte, misiones de la NASA se prepararon para descubrir los misterios del planeta rojo. La agencia estadounidense envió dos rovers, el Spirit, fue lanzado el 10 de junio de 2003, mientras que el Opportunity tuvo su lanzamiento el 7 de julio de 2003.
Spirit aterrizó en el cráter Gusev de Marte y Opportunity en la Meridiani Planum, en el lado opuesto del planeta.
Desde el primer momento en el que aterrizan en Marte, la NASA empezó a recibir una cantidad insuperable de datos y, entre ellos, el hallazgo de un rastro de agua líquida en la superficie marciana. También identificaron cloro y bromo, lo que sugirió la existencia de un mar salado que se evaporó.
New Horizons tuvo su lanzamiento en 2006 con el objetivo de hacer un estudio de sobrevuelo del sistema de Plutón, para el año 2015.
En 2007 sobrevoló el planeta más grande del sistema solar, Júpiter, y aumentó la velocidad en unos 14.000 kilómetros por hora, acortando su viaje a Plutón en tres años. Después, aceleró hacia el Cinturón de Kuiper y pasó el punto medio de Plutón el 25 de febrero de 2010.
El 6 de diciembre de 2014, despertó de su hibernación para ir hacia Plutón. El 29 de abril de 2015 empezaron a llegar detalles del planeta y el 29 de junio, sus datos sirvieron para anunciar que Plutón tiene aproximadamente 2370 kilómetros de diámetro, y que su luna, Caronte, tiene unos 1.208 kilómetros de diámetro.
Al culminar la misión, la NASA informó que su sonda espacial interplanetaria completó su trabajo con éxito.
Con su rover Curiosity, la misión Mars Science Laboratory forma parte del Programa de Exploración de Marte de la NASA, para seguir investigando si Marte alguna vez tuvo un entorno “capaz de soportar pequeñas formas de vida llamadas microbios”.
La expedición del rover fue determinar la habitabilidad del planeta rojo. Con su trabajo se empezó a pavimentar el camino para las futuras misiones de la NASA a Marte.
Curiosity emprendió su viaje noviembre de 2011 y aterrizó en agosto de 2012. Una vez en el planeta, Curiosity empezó a analizar el entorno, a tomar fotos y muestras de polvo para hacer estudios y transmitir los datos a la Tierra.
Aunque se va deteriorando poco a poco, pues ha sobrepasado su año de utilidad, el rover continúa enviando información a la NASA sobre sus descubrimientos en Marte.
Lanzada el 12 de agosto de 2018, Parker Solar Probe, es una sonda solar que proporcionará nuevos datos sobre la actividad del Sol hará contribuciones importantes para que los expertos puedan pronosticar los principales eventos del clima espacial que afectan la vida en la Tierra.
En 6 años, 10 meses y 7 días, la sonda tendrá el objetivo de rastrear el flujo de energía y comprender el calentamiento de la corona solar. Asimismo, buscará identificar qué es lo que acelera el viento solar.
También explorará mecanismos que aceleran y transportan partículas energéticas. Por el momento, la sonda está cumpliendo con su objetivo y se espera que culmine su misión el 19 de junio de 2025.
InSight fue una misión de NASA que inició el 5 de mayo de 2018 con el objetivo de posicionar un robot geofísico, equipado con instrumentos de alta tecnología para hacer estudios importantes en el suelo de Marte.
El 26 de noviembre, ya habiendo aterrizado en Marte, el vehículo tenía el objetivo de estudiar el pulso interior, subsuelo, la transmisión de calor y el rastreo de precisión, para hacer un registro de la evolución geológica temprana del planeta.
Sus datos permitieron a la NASA comprender mejor los planetas rocosos y las lunas de nuestro sistema solar. El 15 de diciembre de 2022 perdieron contacto con InSight y, finalmente, el 21 de diciembre de 2022, la NASA declaró que su trabajo en Marte había culminado exitosamente.
La última misión de la NASA a Marte está en las manos robóticas de Perseverance, un rover diseñado para explorar el cráter Jezero del planeta rojo, como parte de la misión Mars 2020 del Programa de Exploración de Marte de la agencia estadounidense. Empezó su expedición el 30 de julio de 2020 y llegó a Marte el 18 de febrero de 2021.
Perseverance cuenta con siete artefactos científicos que le permiten estudiar la superficie marciana. También cuenta con 23 cámaras de alta resolución y dos micrófonos que pueden captar los sonidos de su entorno.
Asimismo, se apoya del helicóptero explorador Ingenuity, que podría identificar otros lugares para investigar.
La misión clave de Perseverance es “buscar signos de vida antigua y recolectar muestras de roca y regolito (roca y suelo rotos) para un posible regreso a la Tierra”, de acuerdo a la descripción de la NASA.
El telescopio espacial James Webb (JWST) es un observatorio espacial construido y operado conjuntamente por la CSA y la NASA como reemplazo del telescopio Hubble.
El JWST cuenta con una resolución y sensibilidad inigualables. Indiscutiblemente, rebasó los logros del Hubble y se ha convertido en una ventana innumerables investigaciones en astronomía y cosmología.
En cuanto a su tarea, uno de sus principales objetivos es observar eventos y detectar objetos más distantes en el espacio, como la formación de las primeras galaxias. JWST observa la formación de estrellas, planetas y obtener imágenes directas de exoplanetas y nuevas estrellas.
Double Asteroid Redirection Test (DART), fue una misión que stuvo enfocada en probar un método de defensa planetaria contra objetos próximos a la Tierra (NEO).
Después de varios años de estudio sobre la defensa planetaria, nació DART, la misión que creó la NASA para desviar asteroide. Hicieron que una sonda espacial impactara a Dimorphos, satélite de Didymos, para verificar si la energía cinética generada por el golpe podría desviar el asteroide y evitar que colisione con la Tierra.
La NASA trabajó mano a mano con la ESA, la JAXA y la Agencia Espacial Italiana (ASI) para que DART emprendiera su viaje el 24 de noviembre de 2021.
El 26 de septiembre de 2022 se logró la colisión. El 11 de octubre, la NASA aseguró que la misión superó el umbral de éxito y ahora, Dimorphos tarda 11 horas y 23 minutos en dar la vuelta a Didymos desde que DART cambió la órbita del asteroide en 32 minutos.
La sonda espacial Lucy, como programa espacial NASA, tiene la misión de es estudiar cinco asteroides troyanos de Júpiter, que orbitan tanto delante como detrás del planeta, para ir en busca «fósiles de formación”, que son rastros de materiales que se agruparon en los primeros tiempos del sistema solar. Lucy se lanzó al espacio exterior el 16 de octubre de 2021.
El encargo para Lucy no se parece a otras misiones actuales de la NASA. Debe sobrevolar siete asteroides troyanos, Patroclo, Menecio, Euríbate, Orus, Leoco, Polímele y el asteroide del cinturón principal Donald Johanson.
En un lapso de 12 años, Lucy debe de estudiar los peculiares cuerpos celestes.
La NASA informó que la sonda, el 1 de noviembre de 2023, podrá obtener imágenes de primer plano del Donald Johanson para llevar a cabo tests de ingeniería de su sistema de navegación de seguimiento. Por el momento, la misión Lucy de la NASA ha sido catalogada como un hito de la agencia.
Gracias a las expediciones triunfales y al trabajo de los astronautas que se han esforzado por empujar los límites del conocimiento humano, se fijó un día de la agencia aeroespacial estadounidense para recordar aquellos que perdieron su vida durante la exploración espacial. La agencia celebra “Día del Recuerdo” anualmente (la fecha varía) como un homenaje a los exploradores.
Cada proyecto y viaje que se cumple con éxito abre la ventana a la próxima misión de la NASA, pero todo el trabajo de investigación está en manos de los hombres y mujeres que pasan tiempo en busca de innovaciones y nuevos descubrimientos, en Clear Lake (Texas), en el Centro Espacial Lyndon B. Johnson (JSC), donde está la agencia de operaciones de vuelos espaciales.
El director de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, Bill Nelson, quien está a cargo de la NASA desde el 3 de mayo de 2021, hizo un juramento de abrir “una nueva era espacial” para seguir empujando los límites del conocimiento.
Más allá de las misiones de la NASA, al mundo debe importarle cuantas personas trabajan en la agencia aeroespacial estadounidense, así como en otras representaciones como la ESA y la CSA, porque de estos profesionales depende el futuro de la humanidad. Un comunicado de la NASA hoy, los próximos meses, o en un año, podrá seguir informando sobre nuevas misiones espaciales y los descubrimientos científicos en la red de ciencia.nasa.gov, pero los esfuerzos deben estar direccionados a seguir velando por el bienestar de la Tierra.