La mitología celta es un elemento esencial de la cultura celta, una de las más fascinantes de Europa debido a las características que la definen: magia, heroísmo, misticismo, aventura… La mitología irlandesa sucumbió ante el dominio cristiano durante el Imperio Romano, pero sus increíbles relatos sobrevivieron y se han seguido contando en todas partes del mundo.
Mitología escandinava:
Historia, cultura, características y nombres de dioses de la mitología nórdica
Los celtas fueron un grupo de pueblos o sociedades tribales europeas, de diversos orígenes, que tenían en común la cultura y la lengua celta. Esta población llegó a Europa y se asentó en varias regiones del continente durante la Edad de Hierro (1.200 a.C. – 400 a. C.).
El término sirve para caracterizar a un extenso grupo humano y se refiere a estructuras socioculturales, sin tener ninguna connotación de origen racial. En la historia celta impera la religión politeísta, con diversos dioses, leyendas y héroes celtas que conforman esa rica cultura.
Los guerreros celtas usaban una serie de símbolos como elementos de protección en las batallas. También existían algunos para atraer el amor, la suerte, otorgar valor, etc. Los más populares fueron:
Los celtas llegaron a Europa en la Edad de Hierro (1.200 a.C.) y a la península ibérica cerca del 900 a.C., se cree que procedentes de Anatolia (hoy Turquía) y de las llanuras existentes entre el mar Caspio y el mar Negro.
En la era cristiana estos pueblos habitaban en las Islas Británicas, desde la embocadura del Rin hasta Los Pirineos, desde el Atlántico hasta Bohemia, con extensiones por el norte de Italia y noroeste de España.
Las tribus que se asentaron en las regiones de Bélgica, norte de Italia, Alemania y Galia se trasladaron hacia Irlanda y Gran Bretaña, contribuyendo de forma importante al crecimiento de estas poblaciones en esas zonas. La cultura celta no sobrevivió a la era cristiana.
En el siglo XVIII el término fue usado para referirse a poblaciones de Irlanda y Gran Bretaña que habitaban en construcciones amuralladas llamadas castros. Actualmente el término define a diversos grupos étnicos de las islas británicas, España (Castilla y León, Galicia, Asturias y Cantabria), Portugal (región de Minho) y Francia (región de Bretaña).
La mitología celta no pudo sobrevivir al Imperio Romano, debido a la conversión del pueblo celta al cristianismo y la pérdida del idioma original. Las comunidades que lograron mantener su identidad cultural (tribus de bretones y escotos, islas británicas) pudieron transmitir vestigios de la tradición que fueron registradas de forma escrita en la edad media.
Las deidades se clasifican de acuerdo a los tipos de mitología:
Los héroes no son deidades, pero enriquecen la cultura por medio del relato de sus increíbles historias de batallas.
Las tribus celtas que originalmente se asentaron en Europa Central y Occidental tenían una gran diversidad de manifestaciones culturales y religiosas, y no estaban unificadas políticamente, sin embargo, algunas tradiciones como el culto al dios Lugh y a la diosa celta del amor Aine, estaban ampliamente difundidas en todas las regiones. La lista de dioses es extensa, aquí se exponen los nombres mitológicos celtas principales.
Mórrígan, reina de los fantasmas o dama de la oscuridad, formaba parte de las diosas guerreras celtas. También era conocida como Morrigu y Nemhain (pánico), por el aspecto atemorizante que adoptaba al presentarse ante los que morían. Su función era incitar a los combatientes a la guerra. Al igual que cualquier otro dios de la guerra celta se le representa a través de animales, que normalmente es un cuervo, pero también puede ser un lobo, vaca o anguila.
Es uno de los nombres de dioses celtas más ampliamente difundido a través de esa cultura. Se representa con la figura de hombre joven y es el más importante dios de la mitología irlandesa. Tiene la función de todos los dioses por lo que también se le lama el dios sin función.
Su nombre deriva de una palabra indoeuropea cuyo significado es luminoso o blanco. El cuervo también parece estar vinculado con este dios. A pesar de su aspecto solar o luminoso no representa al sol celta, pues esto era una función femenina según esta cultura. Usaba una honda y una jabalina como armas. En Irlanda la fiesta de la Lughnasa se celebra en su honor.
La diosa Epona o Épona, es la diosa de los caballos y de la naturaleza. Es uno de los nombres de diosas celtas que se asocia al agua, la fertilidad y la muerte, y es comparable a la diosa griega Cibeles o Rhiannon en la mitología galesa. Se suele representar rodeada de caballos o montada sobre uno, también alimentando a los potros, con largos ropajes, una diadema y un manto que cubre su cabeza. Puede tomar forma de yegua.
Angus o Aengus el joven, según la cultura celta irlandesa, es el dios del amor. También simboliza la poesía, la juventud y la belleza. Es comparable a Apolo y Eros (mitología griega). Se suele representar como un atractivo joven con el cabello rizado y rojizo. Su canto enamora a quien lo escucha y permanece rodeado de cuatro pájaros. Además posee un manto que lo vuelve invisible, para protegerse de los demás.
Sirona (también conocida como diosa Sira, Đirona o Thirona) es la diosa de la salud celta y de la sanación. Es uno de los nombres celtas de mujer más conocido. Suele representarse llevando en sus manos frutas, granos y con frecuencia uvas. Se asocia a los huevos y las serpientes. El nombre de esta diosa significa luz lunar, estrella o astro. De acuerdo a la influencia de la luna sobre el mar y las mareas, también se le atribuyen poderes sobre las masas de agua.
Es el dios bueno de los dioses irlandeses, es la figura protectora de la tribu. Controla la magia y es uno de los más importantes dioses celtas. Tiene un poder de seducción irresistible para las humanas y para las diosas. Es hábil guerrero y representante del gran poder. También lo llaman “padre universal”. Esta deidad es representada con un garrote o maza, con poderes para quitar la vida y para resucitar a los muertos.
Para entender los mitos celtas es necesario conocer su cultura, que es mucho más que los elementos por los que tradicionalmente se conoce: la guerra, las armas y el licor. Su lado místico y espiritual crea estas leyendas celtas, donde se revela un mundo encantado, lleno de personajes mágicos: hadas, elfos y otras entidades. Los mitos son variados y dependen de la región, sin embargo, los principales escenarios son:
Según relatos de las historias irlandesas, las hadas descienden de un pueblo antiguo arrojado al inframundo después de la invasión y conquista de Irlanda por habitantes de España. Se dice que las hadas se refugian en guaridas ocultas y salen a bailar en corro a la luz de la luna en la noche de San Juan. En Asturias existen relatos similares sobre un gran reino subterráneo de hadas gobernado por unos reyes.
Es uno de los nombres de la mitología celta más conocido e importante. Su valentía y éxito en los combates lo convirtieron en un guerrero de dimensiones mitológicas. Su nombre, Arturo, significa “hijo del oso guerrero”. Arturo simboliza el mundo celta que funciona en torno al rey. Sucede a su padre y adquiere su poder cuando arranca la espada Excalibur de una piedra donde se encontraba clavada.
Es la leyenda referida a la existencia de las Islas del Paraíso que existen más allá del océano y en las que existen seres sobrenaturales. En este mundo no existen desgracias ni tristezas. Los irlandeses creen que es la ola número nueve la que separa “el otro mundo” del mortal. En La Lanzada (Galicia) existen creencias similares y se practicaban rituales donde las mujeres que querían concebir dejaban que su cuerpo fuera golpeado por nueve olas seguidas.
Es un conocido personaje de la mitología celta relacionado con la leyenda del rey Arturo. Según la leyenda, Merlín fue un combatiente que perdió la razón como consecuencia de las guerras que libró. Luego se refugió en un bosque y comenzó a profetizar. En él se revelan varios mitos: el mago, el profeta, el señor de la naturaleza y de los animales, etc. La historia celta narra que fue hijo de un demonio, del cual heredó sus poderes. También fue responsable de que Arturo fuera concebido.
Según la mitología céltica el manzano es un árbol de otro mundo. La leyenda cuenta que Ávalon, isla donde habitaba Morgana y ocho hechiceras más, y donde fue llevado el rey Arturo después de derrotado, un lugar verde, sin lluvias, granizo ni nieve, era llamada isla de los manzanos. A este sitio llevaban los muertos en combate.
Breogán es uno de los nombres celtas gallegos sacado de Lebor Gabála Érenn. Establece un lazo genético entre irlandeses y gallegos debido a la colonización de Irlanda. Se cree que la Torre de Hércules que existe en la Coruña fue obra suya. Al lado del panteón celta existe una estatua en su honor.
Los celtas tenían varias formas de adorar y hacer honores a sus creencias y tradiciones. Algunas características de la religión celta son:
Los druidas eran los responsables de que las tradiciones y cultos religiosos fueran transmitidos a las siguientes generaciones. Se especializaban en la magia y los sacrificios. Se cree que preparaban pociones medicinales y alucinógenas a partir de plantas como el muérdago, planta parasitaria que crece en los robles. La cultura y creencias se transmitían de forma verbal. Los bardos eran responsables de recordar las historias de guerreros famosos y otros cuentos importantes de su cultura a través de cantos. Se cree que existían profetas y videntes llamados Strabo, una palabra que significa “inspirado”.
En general las festividades se relacionaban con la fertilidad agropecuaria y se celebraban trimestralmente:
Se tiene la falsa creencia que los celtas no tenían templos y que todos sus cultos se celebraban en ambientes naturales, como bosques o en el mar. Sin embargo algunos hallazgos han demostrado lo contrario. Varias estructuras de templos han sido descubiertas por arqueólogos e investigadores de la historia celta.
La mitología celta se conoce como una pieza fundamental de la cultura de los pueblos celtas que llegaron a Europa a partir de la edad de hierro. La mitología irlandesa no sobrevivió al cristianismo debido a la conversión de su gente a esta religión y a la pérdida de su lengua, pero sus creencias y tradiciones pudieron ser rescatadas por diversos estudiosos de esa basta cultura.