Determinar la importancia de las cosas y la valoración de las personas y cosas se logran a través de los juicios valorativos. Estos responden al acervo cultural, social y personal del individuo que le permite fijar estándares a su entorno. ¿Pero, qué son los juicios de valor o cuáles son los mejores ejemplos de juicios valorativos en la vida diaria? A continuación, encontrarás las respuestas a estas y otras preguntas.
Juicios de hecho o fácticos:
Qué son, tipos, ejemplos y qué los diferencia de los juicios de valor
¿Qué son los juicios de valor?
Se entienden como juicios de valor a las declaraciones evaluativas que realizan las personas sobre otras personas, hechos, objetos y otros elementos basados en un criterio personal y subjetivo. Por lo tanto, el concepto de juicio de valor abarca aquellas opiniones o dictámenes sobre lo correcto o incorrecto, utilidad, bondad o maldad, o cualquier otro atributo de algo o alguien, dentro de un marco comparativo o de relatividad.
Las personas emiten juicios de valor a través de afirmaciones acerca del grado de importancia, valor o deseabilidad sobre un idea, acción y objeto. Estas afirmaciones responden al concepto y alcance de sus propias apreciaciones personales, creencias y convicciones sobre determinados temas o principios como la justicia, la equidad, lo correcto o lo útil.
¿Por qué se hacen los juicios de valor?
La ética, la moral y escala de principios pueden determinar el significado de juicio de valor. Además, permiten fundamentar los juicios valorativos que declaran las personas a diario. Por lo tanto, las declaraciones evaluativas que se encierran dentro de los juicios de valor se basan en quién es la persona que lo emite, su formación personal y académica y lo que considera importante y relevante. ¿Pero, cuál es el propósito de hacer un juicio de valor o de una declaración valorativa?
La mayoría de las acciones y pensamientos de las personas responden a juicios valorativos que guían lo qué debe hacer o pensar según una determinada escala de valores relativa y subjetiva. Por consiguiente, las personas emiten, a diario, juicios de valor para determinar qué es importante y que no lo es en su vida. De esta forma pueden estructurar y ordenar su escala de valores y prioridades para alcanzar sus metas y objetivos personales. La conducta de las personas, objetos, sucesos y cualquier otro elemento o cosa pueden ser objeto de un juicio de valor.
Tipo de juicios de valor
Los juicios valorativos son considerados declaraciones normativas porque comprenden aquellas evaluaciones que responden y respetan determinado estándares y normas colectivas como las normas sociales, éticas, morales, etc. En ese sentido, se distinguen dos tipos de juicios de valor, a saber, los juicios estimativos y los juicios de valor descriptivos.
Juicios de valor estimativos
Los juicios de valor estimativos son aquellos por medio de los cuales se comparan informaciones para calificar competencias, características o resultados.
Juicios de valor predictivos
Por su parte, los juicios de valor descriptivos consisten en afirmaciones evaluativas basadas en conocimientos y apreciaciones pasadas o presentes para predecir el futuro de las cosas. Por ejemplo, cuando se predice que un estudiante aplazará una materia por considerar su conducta perezosa y poco disciplinada.
Características de los juicios de valor
Las características que proporcionan la definición de juicio de valor son aquellas que lo identifican y lo distinguen de otros tipos de juicios y declaraciones. Estos son los principales atributos que define qué son los juicios valorativos.
Prescriptivos
Se dice que los juicios de valor son prescriptivos ya que son declaraciones que determinan o preceptúan la valoración de algo o alguien bajo estándares colectivamente aceptados. Es decir, una opinión o texto valorativo no solo se limita a describir el mundo, sino que también pueden prescribir comportamientos, conductas o características que deben considerarse buenas o correctas por el colectivo.
Subjetivos
Las afirmaciones contenidas en los juicios valorativos se alcanzan por medio de análisis y estimaciones de elementos meramente subjetivos. No consideran datos, hechos u elementos reales y verificables sino que se basan en un sistema de valores personal del sujeto, sean estos comprobables o no.
Relativo
Al ser una apreciación personal y subjetiva, los juicios valorativos tienen un carácter relativo. Esto quiere decir, que podrá variar según la persona que lo emita. Por lo tanto, una cosa podrá ser buena o mala, correcta o incorrecta al mismo tiempo; porque su valoración dependerá de la perspectiva que tenga la persona que lo analice. En consecuencias un juicio de valor no es definitivo.
Influencia personal
Otra de las principales características que permiten definir qué es un juicio de valor es la alta influencia personal de la que son objeto. Por lo tanto, los juicios valorativos dependen de las experiencias, formación, cultura, temperamento y contexto histórico y social de los particulares. Las cosas o hechos serán útiles o ineficaces, buenas o malas según las experiencias, apreciaciones y conocimiento de cada persona.
Mutables
Si bien la escala de valores de un individuo puede mantenerse firme y estable a lo largo del tiempo, sus puntos de vista sobre determinados aspectos de la vida y la realidad pueden cambiar con el paso de los años y las experiencias vividas. En consecuencia, el lenguaje valorativo de una persona puede modificarse en la medida en que se haga mayor y adquiera otros conocimientos y otras destrezas.
Ejemplos de juicios de valor
A diario, las personas emiten juicios de valor sobre las cosas, hechos y situaciones cotidianas. Algunos pueden fundarse en ideas preconcebidas, otros en la experiencia de vida. Sin embargo, los juicios de valor no escapan del ámbito subjetivo de la perspectiva de cada quien. ¿Entonces, cuáles son los juicios de valor más comunes? De seguidas algunos ejemplos de juicios valorativos.
Prejuicios sociales
Los prejuicios sociales son buenos ejemplos de qué es un juicio valorativo. Estos suelen contener juicios de valor basados en apreciaciones convencionales sobre determinadas conductas o preferencias de las personas. Por ejemplo, muchas personas consideran que no es correcto tener muchos tatuajes. Incluso, hay quienes creen que un medico, abogado o profesor no debería tatuarse.
Las frutas engordan
Algunas personas no consumen frutas durante la cena o después de determinada hora del día por la creencia de que la fructosa es capaz de hacerlos engordar. Esta idea está fundada en sus apreciaciones y convicciones y no en hechos científicos.
Este es el mejor restaurante
Las críticas, valoraciones y recomendaciones de restaurantes o bares que realizan los influenciers, youtubers y otras personales basan sus comentarios sobre su experiencia y apreciación de la comida o servicio del local. Emiten un juicio de valor para persuadir a sus seguidores; sin embargo, lo que bueno o malo, delicioso o no, depende del gusto de cada quien.
La homosexualidad se puede corregir
Aunque hace algunos años la Organización Mundial de la Salud reconoció que la homosexualidad no es una enfermedad, aun existen personas que consideran que la preferencia sexual de una persona puede corregirse. Tal afirmación comprende un ejemplo de juicio de valor sobre la libertad sexual de un individuo.
Bañarse después de comer afecta la digestión
¿Cuántas veces se ha escuchado decir una expresión parecida, sobre todo en la playa? Esta afirmación sostiene una creencia basada en un estándar colectivo sobre lo perjudicial que puede resultar meterse al mar justo después de comer.
La vida no es justa
La apreciación de la justicia como valor relativo dependerá de la perspectiva de cada persona y de las experiencias que tenga en la vida para concluir si es buena o mala, justa o injusta.
Esto sí es arte
La calificación como arte de las manifestaciones de expresión de las personas obedecen a juicios valorativos de sus espectadores.
Los perros son mejores que los gatos
Las comparaciones entre objetos y cosas comunes siempre contienen un juicio valorativo que destaca uno sobre el otro.
Antonio es un buen hombre
Los juicios de valor muchas veces contienen conceptos tan amplios y abstractos que no permiten definir con exactitud qué es una cosa o cómo se distingue de otros.
Estos pantalones me hacen ver más delgado
Según las apreciaciones personales o las perspectivas culturales de las personas se pueden emitir un juicio de valor en uno u otro sentido.
El gobierno es ineficiente
Este juicio de valor demuestra su carácter relativo porque para la oposición el gobierno será ineficiente, mientras que para sus adeptos será competente y efectivo.
No es correcto llegar tarde a las citas
Algunos juicios valorativos responden a convencionalismos sociales o normas aceptadas por un colectivo como correctas.
Ese auto no vale lo que cuesta
Las apreciaciones económicas de costoso, barato o asequible también puede depender del contexto social y económico del consumidor.
El inglés es un idioma fácil
Las valoraciones de las cualidades de una cosa, hecho, acontecimiento o persona son un claro ejemplo de un juicio de valor.
Verónica es muy bonita
La belleza como la bondad o la justicia son valores relativos por lo tanto pueden varias en los juicios de valor de las personas.
Diferencias entre juicios de valor y juicios de hecho
Las características de los tipos de juicios no solo permiten determinar qué es un juicio valorativo o un juicio de hecho; sino que también facilitan la diferenciación de tales declaraciones. A continuación, algunas diferencias entre juicio de valor y juicio de hecho.
Juicios de valor | Juicios de hecho | |
Objeto | Determina cualidades | Determina hechos |
Comprobables | Son incomprobables | Pueden ser comprobados |
Perdurables | Pueden mutar | Son perdurables |
Naturaleza | Prescriptivos, y a veces descriptivos | Siempre descriptivos |
Objeto
Conforme se si evalúa la cualidad o la existencia de una persona, cosa o hecho, se estará frente a un juicio de valor o un juicio de hecho.
Juicio de valor
El juicio de valor determina las cualidades de una persona, hecho o cosa especifica.
Juicio de hecho
Por lo general, el juicio de hecho determina la existencia de un hecho o de algo, así como sus circunstancias relevantes.
Comprobables
Una importante diferencia entre los juicios valorativos y los juicios de hecho es la posibilidad de verificar o comprobar la veracidad de sus afirmaciones.
Juicio de valor
El juicio de valor no puede ser comprobado por medio de elementos de convicción. La declaración de un juicio de valor no es susceptible de ser verificada para tomarse como cierta.
Juicio de hecho
Las afirmaciones que contienen un juicio de hecho pueden ser verificadas y comprobadas a través de datos y elementos específicos que avalen el argumento.
Perdurabilidad
La perdurabilidad es una de las características más importantes que permiten diferenciar los juicios valorativos de los juicios de hecho.
Juicio de valor
Los juicios de valor no son del todo perdurables porque pueden modificarse con el paso del tiempo. Lo es que bueno hoy no serlo mañana.
Juicios de hecho
En contraposición a los juicios valorativos, los juicios fácticos perduran en el tiempo, ya que se basan en elementos empíricos inmutables en el tiempo. El agua siempre hierve a los 100 grados centígrados.
Naturaleza
Aunque pueden compartir en algunos casos la misma naturaleza, los juicios de hecho se distinguen de los juicios de valor por su carácter descriptivo
Juicios de valor
Los juicios de valor son naturalmente prescriptivos, aunque pueden llegar a ser descriptivos en algunas ocasiones.
Juicios de hecho
Los juicios de hecho siempre son descriptivos porque muestran los elementos y características de las cosas, personas y hechos tal como son. Juan es alto. El auto es veloz. La piedra es pesada.
Definitivamente, las personas emiten juicios de valor a diario para determinar, entre otros aspectos, la importancia, eficacia, necesidad o utilidad de las cosas, así como de las situaciones y los hechos. Por lo tanto, los juicios valorativos permiten delimitar sus prioridades, sus necesidades y sus deseos y objetivos, conforme a sus experiencias, valores y principios individuales y sociales.