La situación precaria de la economía venezolana se reflejó de manera negativa el año pasado en la producción de automóviles, cuyo desempeñó mermó de 170.000 unidades producidas en 2013 a 2.768 vehículos producidos en 2016. Regresar al nivel de 2013 requeriría una recuperación superior al 6000%.
De acuerdo a lo señalado por personas ligadas a la industria del automóbil, Venezuela es una nación donde no existe como tal una industria productora de vehículo, sino que tienen empresas ensambladoras, que se dedican a montar vehículos previamente importados por partes.
No hay dólares para la industria del automóvil
Venezuela intenta proteger su economía mediante un sistema de control de cambio que impide la libre comercialización de dólares o cualquier otra divisa. El Estado decide a qué empresas y qué sectores son prioritarios, siendo privilegiados los alimentos, medicinas y otros sectores vitales.
De modo que la importación se ha visto afectada en los últimos años debido a la imposibilidad de adquirir los dólares necesarios para pagar las piezas.
Por ello, apenas menos del 10% de la capacidad instalada de esta industria es utilizada, así como la mano de obra, cuya mayor parte ha quedado desempleada o suspendida ante la falta de trabajo.
La poca producción lograda durante 2016 se centró en un alto porcentaje en los autos Ford, cuyos ejecutivos y el Gobierno llegaron a un acuerdo mediante el cual la empresa fue autorizada a vender parte de su producción en dólares, logrando con ello un reducido ingreso en divisas para pagar algunas importaciones y continuar con el negocio.
Otro factor influyente en la merma de producción de vehículos radica en los pactos existentes entre los gobiernos de China y Venezuela, por medio de los cuales se llevan directamente al país suramericano coches compactos que se usan como taxis o particulares.
75% menos que en 2015
La contracción de la producción de vehículos, de enero a noviembre de 2016, fue de 75,6% con respecto al año 2015, considerándose la peor crisis de esa industria desde que se instaló en el país, en 1962, según declaraciones de los representantes de la cámara que los agrupa.
Efectivamente, la mayor parte de los locales de los concesionarios en los que se exhibían vehículos han sido alquilados a terceros, quienes han instalado todo tipo de negocios en ellos, principalmente supermercados.