Dentro de las artes plásticas desarrolladas en América Latina, los pintores de Venezuela ocupan un importante lugar en las diferentes épocas de esta disciplina creativa, siendo influenciados no solo por los movimientos artísticos de su tiempo, sino también por los factores políticos y sociales de dichos contextos, llegando incluso a engrosar la lista de los personajes más importantes de Venezuela. Hoy te presentamos a 15 famosos pintores venezolanos y sus obras, las cuales han destacado tanto en dicho país como en el continente americano.
Pintores españoles:
Nombres, estilo y obras famosas de los 15 pintores de España más importantes de la historia
Arturo Michelena
Uno de los artistas venezolanos más relevantes del siglo XIX fue Arturo Michelena, nacido en Valencia en 1863 y fallecido en Caracas en 1898. En vida fue un renombrado pintor y dibujante, produciendo más de 500 bocetos, dibujos y apuntes, y alrededor de 200 pinturas. Incursionó en el arte de la mano de su padre, destacando su vínculo como fundadores de una academia privada de pintura, dedicada a realizar retratos, pinturas y dibujos bajo encargo.
Este fue el escenario para que el joven Michelena se entrenase para la Gran Exposición del Centenario del Natalicio de El Libertador Simón Bolívar, donde en 1883 obtuvo notoriedad a través de sus cuadros Alegoría de la república regenerada y La entrega de la bandera invencible de Numancia al batallón sin nombre. Dicha participación le brindó la oportunidad de obtener una beca gubernamental para cursar estudios en la Academia Julian, en París.
Entre las obras de Arturo Michelena, vale la pena mencionar las siguientes:
- Las Queseras del Medio (1885)
- Vuelvan caras (1890)
- Diana Cazadora (1896)
- Cascada de Catuche y La última cena (1898), ambas inconclusas por la muerte repentina del artista.
Miranda en la Carraca
Pintado por Michelena en 1896 para conmemorar los ochenta años del fallecimiento de Francisco de Miranda. En el cuadro, de estilo academicista, se muestra al héroe venezolano tumbado sobre un catre, con rostro sereno pero frustrado, durante su presidio en la Carraca, España.
Juan Lovera
Entre los pintores venezolanos famosos con renombre en el género de la reproducción pictórica histórica se encuentra Lovera, destacándose en el arte de inicios del siglo XIX. Nació en Caracas en 1776, muriendo en dicha ciudad en 1841. Fue hijo de pardos libres, condición social que no interfirió en su formación dentro del Convento de San Jacinto y el taller artístico de Antonio José Landaeta. Además, tomó clases privadas de dibujo en 1804.
Fue militante de la causa republicana, posición que lo llevó a exiliarse en diversas ocasiones ante los avances realistas. Una vez liberado el territorio venezolano, retorna para asumir cargos políticos importantes, además de realizar retratos de importantes figuras del momento como Cristóbal Mendoza, José Antonio Páez, Juan de la Madriz, Lino Gallardo, entre otros. Otra obra de gran relevancia para el arte venezolano es su cuadro El tumulto del 19 de abril de 1810.
5 de julio de 1811
La obra más notable de Lovera es la representación pictórica hecha en 1838, donde se muestran los acontecimientos en tono a la firma del Acta de Independencia, rubricada por el Congreso de la naciente República en la fecha mencionada.
Martín Tovar y Tovar
Fue un notable artista dentro del retrato y la pintura histórica, sobresaliendo en las artes plásticas del siglo XIX. Nació en 1827 y falleció en 1902 en Caracas. Se formó primero de forma particular, para luego incursionar tanto en la Academia de Dibujo como en el Colegio de la Paz. Posteriormente, consolidó su educación en Madrid y París, y en su retorno a Venezuela, asumió el rol de instructor de dibujo natural y topográfico.
Fue en 1873 cuando su carrera cobró relevancia, ante la realización de 30 retratos dedicados a algunos próceres civiles y militares de la independencia, que hoy se muestran dentro del Salón Elíptico del Palacio Federal Legislativo. Para 1881 consolidaría su renombre como pintor encargado de realizar más obras para este espacio, entre las que destacan El tratado de Coche, Batalla de Boyacá y La firma del Acta de Independencia.
De su mano también produjo cuadros como los retratos de Antonio Guzmán Blanco y su madre, Carlota Blanco de Guzmán, el de Agustín Aveledo, Joaquín Crespo y Jacinta de Crespo.
La batalla de Carabobo
Es, sin duda, uno de los cuadros históricos más famosos de Venezuela. Fue pintada por Tovar y Tovar en medio de importantes encargos hechos en 1884 por el entonces presidente Antonio Guzmán Blanco, en miras de decorar el Salón Elíptico del Palacio Federal. El resultado pudo verse cuatro años después, a través de esta imponente pintura que, en el sentido de las agujas del reloj, muestra las escenas más importantes del triunfo decisivo para la independencia de Venezuela en 1821.
Tito Salas
Notable artista caraqueño, nacido en 1887 y fallecido en 1974. Formado primero en la Academia de Bellas Artes de Caracas y, luego, en la Academia Julian de París, Salas fue el encargado de la decoración muralística tanto de la Casa Natal del Libertador como del Panteón Nacional, siendo sus obras un referente trascendental dentro de la historia venezolana.
De sus cuadros vale la pena mencionar:
- Tríptico Bolivariano: La Lección de Andrés Bello, El Juramento en Roma y La muerte Solitaria en Santa Marta (1911)
- Fundación de Caracas (1939)
- Apoteosis del Libertador (1942)
- Los Causahabientes (1970)
Discurso de Bolívar ante el Congreso de Angostura
El célebre discurso que el Libertador hizo en febrero de 1819, fue representado pictóricamente por Salas en 1941 para homenajear la jornada que fundamentó políticamente el porvenir de la República de Colombia.
Antonio Herrera Toro
Descendiente de un clan familiar que dio a algunos de los personajes más importantes de Venezuela, destacados en el contexto económico, político y social de la independencia, Herrera Toro, nacido en Valencia (Carabobo) en 1857, pudo consagrarse dentro del movimiento romanticista pictórico.
Fue aprendiz del afamado Martín Tovar y Tovar, para luego hacer carrera en la Academia de Bellas Artes de la mano de Miguel Navarro Cañizares. Concretó sus estudios en París y Roma a partir de 1875, retornando a Venezuela para recibir encargos por parte del gobierno de Antonio Guzmán Blanco para realizar algunas de sus obras más destacadas, como su cuadro Los últimos momentos del Libertador (1883).
Otras producciones de su autoría son:
- Martín Tovar y Tovar (1878)
- La Romana (1880)
- Retrato de Fermín Toro (1897)
- Batalla de Ayacucho (1890)
- Batalla de Junín (1904)
Ricaurte en San Mateo
Entre los cuadros famosos de pintores venezolanos, dedicados al género histórico, se encuentra esta fascinante obra, pintada por Herrera en 1889 para representar el instante donde el héroe granadino Antonio Ricaurte decidió inmolarse durante el enfrentamiento entre independientes y realistas en la batalla de San Mateo (1814).
Cristóbal Rojas
Nacido en Cúa en 1858 y fallecido en Caracas en 1890, Rojas fue otro de los renombrados pintores del siglo XIX, conjuntamente con Antonio Herrera Toro, Martín Tovar y Tovar y Arturo Michelena. Educado en la parisina Academia Julian, al igual que sus compañeros artistas, logró satisfacer una significativa cantidad de encargos artísticos hechos por el gobierno venezolano. Además, sus vivencias personales, en medio de la convulsión generada durante la Guerra Federal, se manifiestan en muchas de sus obras.
En su trayectoria, pintó cuadros como los siguientes:
- Ruinas de Cúa después del terremoto de 1878 (1882)
- Orfandad (1885)
- La miseria (1886)
- Autorretrato con sombrero rojo (1887)
- El Purgatorio (1890)
La muerte de Girardot en Bárbula
Pintada en 1883 para la participación de Rojas en la Exposición Nacional para el Centenario del Nacimiento del Libertador Simón Bolívar, donde obtuvo el segundo puesto junto a Arturo Michelena. La obra muestra de forma romántica el momento en el que el prócer neogranadino Atanasio Girardot es herido mortalmente durante la batalla de Bárbula (1814), al tratar de fijar la bandera nacional en lo más alto del terreno ganado.
Carmelo Fernández
Entre los personajes venezolanos destacados dentro del arte está Carmelo Fernández Páez, que no solo se desarrolló como litógrafo, acuarelista y dibujante, sino que también se desempeñó como ingeniero militar. Nació en Yaracuy en 1809 y murió en Caracas en 1887. Gran parte de su obra artística está dedicada al acontecer político y social propio de la guerra de independencia, sobre todo por ser sobrino del reconocido general José Antonio Páez.
Fue su tío el que lo apoyó al educarse en Caracas de la mano del capitán francés Lessabe, hasta que en 1823 partió rumbo a Nueva York para profundizar sus estudios de artes plásticas. De vuelta a Venezuela, y luego de un breve paso por la ingeniería y el dibujo topográfico, desarrolló su genio como dibujante al retratar los acontecimientos en torno a la repatriación de los restos del Libertador Simón Bolívar en 1842.
Su obra puede verse en la decoración de la casa de su tío materno en Valencia, donde dio gala de su talento como acuarelista, pero fue gracias al retrato de Bolívar, hecho por Fernández en 1873, que obtuvo reconocimiento, a tal punto que sería la efigie que se muestra en la moneda venezolana.
Quinta San Pedro Alejandrino
Fernández fue un ferviente seguidor de la obra de Simón Bolívar, factor que lo llevó a tener algunos roces con su tío. En este cuadro, pintado en 1848, se muestra la casa principal de la hacienda donde dio su último suspiro el Libertador, ubicada en Santa Marta, Colombia.
Armando Reverón
Es considerado el precursor del Arte Povera y uno de los renombrados artistas latinoamericanos del siglo XX. Nacido en Caracas en 1889, Reverón tuvo una personalidad excéntrica y primitiva, manifestada en muchas de sus obras, destacando dentro de la pintura, el ensamblaje artístico, el happening, la escultura móvil y textil. Su obra fue admirada por famosos artistas como Pablo Picasso, Fernando Botero, Sofía Ímber y Antonio Saura; no obstante, en vida fue un incomprendido dentro de la sociedad, producto de su condición mental.
Se educó en la Academia de Bellas Artes de Caracas, influenciado en gran parte por la obra de Cristóbal Rojas. Consolida su educación en Europa, admirando de cerca los cuadros de artistas consagrados como Cézanne y Degas. En su retorno a Caracas, trabajó de lleno en su extensa producción pictórica, dividida en diferentes periodos donde se manifiesta paletas de colores y estilos artísticos del momento.
Junto a su eterna compañera Juanita Mota, su musa, vivió en el Castillete de Macuto, también taller, donde tenía una gran colección de muñecas hechas por él. Falleció en Caracas en 1954.
Entre la enorme producción de cuadros de Armando Reverón, sobresalen los siguientes:
- La cueva (1920)
- Luz tras mi enramada (1926)
- Dos indias (1939)
- Paisaje (1940)
- Patio del Sanatorio San Jorge (1954)
El Playón
Gran parte de la producción pictórica de Reverón la dedicó al paisaje de playas, como bien puede verse en esta obra, pintada en 1929, de acuerdo al entorno que el artista percibía desde su morada.
Bárbaro Rivas
Fue uno de los principales impulsores de la pintura ingenua en Venezuela. Nació en el pueblo de Petare en 1893 y falleció en 1967. Su obra fue desconocida hasta 1949, cuando un crítico artístico identificó sus primeros cuadros para presentarlos tiempo después en la exposición Siete Pintores Primitivos y Espontáneos de Petare. Para 1956, tendría una exhibición individual en el Museo de Bellas Artes de Caracas y, al año siguiente, recibió la Mención Honorífica en la Bienal de São Paulo, además de obtener el Premio Arístides Rojasy el galardón Federico Brandt.
Su crianza a la usanza católica se manifiesta en gran parte de su obra artística, combinada con el entorno humilde y peculiar en el que creció y vivió. Además, se hace presente el uso de colores vivos, figuras superpuestas, simbolismo en el paisaje y otros elementos que hicieron de Rivas un artista único.
El ferrocarril de La Guaira
Cuadro pintado en 1957, que fue merecedor, tres años después, del Premio Arístides Rojas. La obra es una perspectiva del artista del recorrido que, en ese entonces, hacía el ferrocarril durante su paso por la costera ciudad de La Guaira.
Mercedes Pardo
El arte abstracto venezolano tuvo entre sus referentes a esta notable pintora, nacida en Caracas en 1921 y fallecida en San Antonio de los Altos en 2005. Se formó en la Escuela de Artes Plásticas y Aplicadas de Caracas, donde resaltó en el abstraccionismo que mostró en sus obras de pintura, acuarela, vitral y collage.
Se dio a conocer gracias en la década de los cincuenta a partir de su participación en exposiciones tanto en su ciudad natal como en la Bienal de São Paulo y en París, apoyada en todo momento por su esposo, el también artista Alejandro Otero. Además, resaltó como escenógrafa teatral, fundadora de talleres y centros artesanales y asesora pedagógica. Para 1978 recibió el Premio Nacional de Artes Plásticas.
Entre sus obras destacan:
- Flores (1943)
- Aube (1961)
- Boutique (1964)
- Umbra y penumbra (1978)
- Exposición Moradas del color (1991)
Composición implícita N° 1
Como parte del grupo de pintores que comenzaban a experimentar dentro de las corrientes vanguardistas desarrolladas en el arte abstracto, Pardo presentó en 1961 esta obra, pintada originalmente en 1959, y que formó parte de la exposición Espacios vivientes, organizada en el Palacio Municipal de Maracaibo. En esta obra pueden notarse manchas de color con bordes pintados en negro, como parte del tratamiento cromático.
Alejandro Otero
Nativo del estado Bolívar y fallecido en Caracas (1921-1990), Otero es más reconocido por su labor dentro del arte cinético, donde destacó como escultor, pero también realizó trabajos dentro de la pintura y el dibujo. Inició estudios en la Escuela de Artes Plásticas y Artes Aplicadas en Caracas, donde su desenvolvimiento lo llevó a obtener una beca para continuar su formación en París.
Dentro del género pictórico, experimentó por diversos estilos, partiendo de los tradicionales paisajes y retratos hasta calar en el arte abstracto. Reconocida es su producción artística dentro de la Ciudad Universitaria de Caracas, como sus Policromías, sus vitrales y sus murales. A esto hay que agregar su trabajo dentro de los denominados Coloritmos y Tablones, series producidas entre 1955 y 1960 con tal relevancia que fueron expuestas en importantes galerías como el Museo de Arte Moderno de Nueva York, y exposiciones como la Bienal de Venecia (1956) y la de São Paulo (1959).
Paisaje de Los Flores de Catia
Obra creada en 1941, durante el periodo de formación de Otero, donde experimentó en retratos, paisajes y desnudos, a la par que se iba desarrollando como docente. En esta oportunidad, Otero se inspira en el entorno urbanística de una populosa zona del oeste caraqueño.
César Rengifo
Este polifacético artista fue un notable pintor, colocando su nombre también en la lista de escritores venezolanos famosos, específicamente dentro de la dramaturgia y la poesía. Originario de Caracas, incursionó dentro del Realismo Social, sobre todo luego de su estadía en México, de donde tomaría inspiración de la obra del célebre muralista Diego Rivera. Realizó estudios en la Escuela de Artes Gráficas y Aplicadas de Caracas en 1939, siendo en este mismo año donde presentó su primera exposición en el Museo de Bellas Artes.
Alternaría en vida su carrera como pintor y muralista con la de dramaturgo, siempre mostrando la realidad del contexto social que le tocó vivir, sobre todo desde su mirada como militante comunista. Entre sus obras resaltan La flor del hijo y los murales Creadores de la nacionalidad y El mito de Amalivaca.
Autorretrato
Es un óleo en tela pintado por Rengifo en 1968, en la plenitud de su carrera artística. Está resguardado dentro de la Galería de Arte Nacional, en Caracas.
Oswaldo Vigas
Uno de los pintores venezolanos modernos con importante renombre dentro del arte latinoamericano fue Oswaldo Vigas, cuyo legado sigue presente en la pintura y muralismo, géneros en los cuales desarrolló su obra, además del grabado, cerámica y tapicería. Nacido en Valencia en 1923, tuvo inicios en la pintura de forma autodidacta, influenciada en gran medida por la figura humana. Curiosamente, completó estudios en la Universidad Central de Venezuela en la carrera de Medicina, aunque nunca ejerció como médico, inclinándose al arte de forma definitiva.
Fue durante su formación académica que se acrecentó su pasión por la pintura, frecuentando la Escuela de Artes Plásticas Cristóbal Rojas y el Taller Libre de Arte, de donde tomó inspiración para ganar, en 1949, el primer premio en el Salón de Pintura en el Ateneo de Mérida.
En vida, participó en innumerables exposiciones individuales y colectivas, gran parte de ellas en su país natal. Reconocidos son sus murales desplegados en lugares significativos de la Ciudad Universitaria de Venezuela, como Un elemento estático en cinco posiciones, Composición estática y Un elemento – personaje vertical en evolución horizontal.
Un elemento – personaje triple
Como parte de la enorme producción artística que puede observarse dentro de la Ciudad Universitaria de Caracas, destaca la obra muralística de Vigas, que fue encargado en su momento por el notable arquitecto Carlos Raúl Villanueva para complementar el urbanismo de este entorno educativo. Esta obra en mosaico se encuentra en el edificio del Rectorado de la Universidad Central de Venezuela.
Manuel Cabré
Este artista de origen español es considerado dentro del país como «el pintor de El Ávila», en alusión a que gran parte de su obra paisajística la dedicó al imponente cerro caraqueño. Nació en Barcelona, España, en 1890, llegando de niño a Caracas junto a su padre, invitado a participar en la edificación de obras públicas durante el mandato de Joaquín Crespo. En la capital venezolana se forma en la Academia de Bellas Artes de Caracas, aunque luego sería miembro activo de un grupo anti académico denominado Círculo de Bellas Artes.
Aunque fue un ferviente admirador de varios paisajes de Venezuela con sus nombres, plasmados a través de sus pinturas, el más predilecto de los escenarios de su inspiración fue la montaña que custodia a la ciudad de Caracas. También asumió funciones como director del Museo de Bellas Artes de Caracas entre 1942 y 1946.
El Ávila
La fascinación que sentía Cabré por el famoso cerro caraqueño, puede verse en gran parte de sus obras, importantes dentro del género paisajístico venezolano. A esta montaña dedicaría muchos de sus cuadros, pintándolo desde todos sus ángulos y en diferentes paletas de colores.
Juan Vicente Gómez Landaeta «Pájaro»
De los pintores venezolanos actuales, Pájaro ha ganado reconocimiento por sus obras catalogadas dentro de la pintura figurativa, surrealista y expresionista. Nació en Caracas en 1952, siendo nieto del reconocido dictador Juan Vicente Gómez. Durante su residencia en Madrid, incursiona en la pintura de forma autodidacta, ganando una beca a sus 25 años para estudiar escultura, fotografía y artes gráficas en Estados Unidos.
Su estilo pictórico se inspira en las corrientes barroca, renacentista y medieval, de donde toma elementos para desarrollar lo que ha denominado metarrealismo, abordando aspectos del arte clásico para moldearlos a su manera.
Destacan sus cuadros Mar de leva, Jardín bajo la luz de la Luna, Viajando al Sur y Apys Nephaly.
VENUSEXATOM
Esta obra, pintada en 1987, fue la ganadora del Gran Premio Dior de Artes Visuales, entregado en Caracas ese mismo año. El cuadro representa un entorno onírico, donde la presencia del clasicismo pictórico se hace sentir.
El arte venezolano está cimentado sólidamente sobre la trayectoria de los pintores venezolanos que acabamos de mencionar, quienes, en sus obras más importantes, supieron reunir la técnica, el talento, el estilo creativo y, por supuesto, la influencia que recibieron en cada una de las etapas históricas que les tocó vivir y presenciar. Este grupo de pintores de Venezuela son el máximo referente de la excelencia dentro de las artes plásticas de ese país, siendo éstos una muestra de la evolución y el progreso vivido dentro de la pintura a lo largo de la historia.