AstraZeneca ha anunciado la construcción de una nueva planta de producción de anticuerpos conjugados (ADC) en Singapur con una inversión de 1.500 millones de dólares (1.385,75 millones de euros).
El diseño y la construcción comenzarán a finales de este año, y se espera que la planta esté operativa en 2029.
Esta instalación será la primera de AstraZeneca dedicada exclusivamente a la producción integral de ADC a escala comercial.
La planta de ADC de AstraZeneca mejorará el suministro mundial de estos tratamientos de nueva generación, que administran fármacos anticancerígenos directamente a las células cancerosas mediante un anticuerpo dirigido.
Los anticuerpos conjugados son una clase avanzada de tratamiento que combina un anticuerpo específico con un agente quimioterapéutico, permitiendo una entrega precisa del fármaco a las células cancerígenas, minimizando así los efectos secundarios en los tejidos sanos.
El Consejo de Desarrollo Económico de Singapur (EDB) apoya este proyecto, que promete ser un impulso significativo para la economía local al crear nuevas oportunidades de empleo y desarrollo tecnológico.
Png Cheong Boon, presidente de EDB, expresó su entusiasmo por la inversión de AstraZeneca, destacando el potencial de Singapur como un centro de excelencia en la fabricación compleja.
«Estoy emocionado de que AstraZeneca ubique la planta de fabricación de ADC de 1.500 millones de dólares en Singapur, dado que es uno de los países más atractivos del mundo para la inversión dada su excelente reputación en la fabricación compleja», afirmó Pascal Soriot, CEO de AstraZeneca.
Esta declaración subraya la confianza de la compañía en las capacidades de Singapur para albergar una instalación de esta magnitud.
Laura Colón, directora de Oncología de AstraZeneca España, describió la nueva planta como un «hito» para la compañía y un testimonio del compromiso de AstraZeneca con el desarrollo de tratamientos innovadores y de precisión.
Estos avances permitirán a los médicos oncólogos contar con un mayor abanico de opciones para personalizar el tratamiento de sus pacientes.
La planta de Singapur se centrará en todas las etapas del proceso de fabricación de ADC, desde la producción de anticuerpos hasta la síntesis del fármaco quimioterapéutico, su conexión con el anticuerpo, y el llenado de la sustancia terminada.
Este enfoque integral garantiza un control riguroso de calidad y eficiencia en la producción de estos tratamientos vitales.
Además de su compromiso con la innovación, AstraZeneca se ha comprometido a trabajar con el Gobierno de Singapur y otros socios para garantizar que la nueva planta cumpla con los más altos estándares de sostenibilidad.
Este compromiso refleja la visión de la compañía de impulsar la sostenibilidad en la asistencia sanitaria, asegurando que sus operaciones sean tanto eficaces como responsables con el medio ambiente.
AstraZeneca ya cuenta con una cartera robusta de ADC, con seis tratamientos en fase clínica y varios más en desarrollo preclínico.
Esta nueva planta en Singapur jugará un papel crucial en el escalado de la producción de estos fármacos, permitiendo a la compañía satisfacer la creciente demanda mundial de tratamientos oncológicos avanzados.
El establecimiento de esta planta en Singapur no solo representa un paso adelante en la capacidad de producción de AstraZeneca, sino que también refuerza la posición de Singapur como un hub global para la biotecnología y la innovación farmacéutica.
La inversión en infraestructuras de producción de alta tecnología como esta es clave para el desarrollo continuo de tratamientos médicos avanzados y personalizados.
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