La transformación digital en el ámbito educativo es un fenómeno en constante evolución, y los últimos datos proporcionados por el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes reflejan esta tendencia en las aulas españolas.
Durante el curso 2022-2023, los dispositivos móviles, como los ordenadores portátiles y las tablets, experimentaron un notable aumento en su presencia, representando el 66% del total de equipos disponibles en los centros educativos.
Esta cifra marca un incremento del 7% con respecto al año anterior, cuando estos dispositivos constituían el 59% del panorama tecnológico escolar.
Por otro lado, mientras los dispositivos móviles ganaban terreno, se observó una disminución en la utilización de ordenadores de sobremesa.
En el curso 2020-2021, estos equipos representaban el 41% del total, mientras que en el período 2022-2023, su participación se redujo al 34%.
Este cambio indica una clara preferencia por dispositivos más flexibles y adaptables, que permiten a los estudiantes acceder a la tecnología de manera más portátil y versátil en el entorno educativo.
El informe ‘Estadística de la Sociedad de la Información y la Comunicación en los centros educativos no universitarios. Curso 2022-2023’, recopilado por Europa Press, proporciona una visión detallada de la integración tecnológica en la educación española.
Uno de los aspectos destacados de este informe es el aumento significativo en la adopción de Entornos Virtuales de Aprendizaje (EVA).
Durante el curso 2022-2023, el 81% de los centros educativos no universitarios en España contaron con EVAs, lo que representa un aumento de 12,4 puntos porcentuales en comparación con el curso 2020-2021.
Los EVAs son herramientas clave que facilitan la interacción didáctica y promueven la enseñanza virtual, permitiendo a los estudiantes participar en actividades de aprendizaje en línea y acceder a recursos educativos digitales de manera eficiente.
Esta mayor adopción de EVAs refleja un compromiso continuo por parte de los centros educativos españoles para adaptarse a las demandas cambiantes de la educación en la era digital.
El informe también arroja luz sobre la distribución de dispositivos y recursos tecnológicos en las aulas españolas.
Durante el curso 2022-2023, el número medio de alumnos por ordenador destinado a tareas de enseñanza y aprendizaje se redujo a 2,2, lo que indica un mayor acceso de los estudiantes a la tecnología en el aula.
Además, se observó una mejora en el número de ordenadores por unidad de clase, con una media de 8,5 ordenadores por aula, frente a los 7,2 en años anteriores.
En términos de equipamiento de las aulas, el informe destaca que el 62% de las aulas habituales están equipadas con sistemas digitales interactivos, como pizarras digitales interactivas o paneles táctiles.
Estos recursos digitales ofrecen oportunidades para una enseñanza más dinámica y participativa, permitiendo a los maestros y estudiantes interactuar con el contenido de manera más efectiva.
Además de la integración de tecnología en el aula, el informe también examina la participación de los centros educativos en proyectos relacionados con tecnologías educativas.
En los últimos años, ha habido un aumento significativo en la participación en estos proyectos, que ha pasado del 41,3% al 51,2% entre el curso 2020-2021 y el 2022-2023.
Esta mayor participación demuestra un compromiso creciente de las escuelas españolas con la innovación educativa y la exploración de nuevas formas de enseñanza y aprendizaje.