Aunque esta tendencia de vida sigue siendo desconocida para muchos, el veganismo gana cada vez más adeptos alrededor del mundo. Puede parecer bastante obvio lo que significa, sin embargo, existen infinidad de productos en el mercado que no cumplen con las necesidades de los veganos por raro que parezca, por lo que cada vez surgen más aplicaciones para verificar si un producto pertenece a esta categoría de alimentos o no.
El Independent en su versión inglesa se hace eco de las explicaciones ofrecidas por The Vegan Society: “El veganismo es una filosofía y una forma de vida que busca excluir, en la medida de lo posible y practicable, todas las formas de explotación y crueldad hacia los animales para su alimentación, vestimenta o cualquier otro propósito; y por extensión, promueve el desarrollo y el uso de alternativas libres de animales en beneficio de los seres humanos, los animales y el medio ambiente. En términos dietéticos, denota la práctica de prescindir de todos los productos derivados total o parcialmente de animales”.
Ser vegano no solo significa eliminar los productos lácteos y la carne de la alimentación diaria, sino que engloba un estilo de vida más integral, donde se evita la explotación y la crueldad hacia los animales.
A pesar de que el veganismo se opone a las pruebas y estudios con animales, no recomienda que se eviten las medicinas que han sido recetadas por un médico para el tratamiento de una enfermedad. Sin embargo, se pueden solicitar medicinas que no contengan productos como lactosa o gelatina.
En productos como la miel tiende a existir mucha confusión porque la gente cree que es un alimento amigable para los veganos, pero no lo es. La extracción de la miel puede perjudicar la salud de las abejas cuando los apicultores reemplazan la miel por el azúcar.
La cría de abejas selectiva que se realiza con el propósito de aumentar la productividad también perjudica a una especie que se encuentra en peligro al aumentar su susceptibilidad a enfermedades.
Existen muchos productos que se producen con ingredientes que no son aptos para los veganos. Aunque cueste mucho creerlo, la Lea & Perrins Worcestershire Sauce contiene anchoas, y algunos tipos de vino incluyen productos de origen animal, como médula ósea, aceite de pescado o gelatina. Además, el guacamole de supermercado podría contener crema de leche.
Por otro lado, existen productos que son veganos y que algunas personas nunca imaginarían, como las galletas Ritz, las galletas Oreo y el chocolate negro.
Referencias: The Independent