Para garantiza lar armonía en las relaciones humanas, el Derecho interfiere día a día, a través de un conjunto de normas jurídicas que regulan el comportamiento de los ciudadanos. Leyes, decretos, resoluciones, contratos y otros instrumentos normativos contienen reglas jurídicas que fijan los parámetros mínimos de convivencia social.
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Las reglas jurídicas son enunciados prescriptivos, emanados de una autoridad competente, destinados a regular las conductas de un número indeterminado de personas dentro de un territorio y espacio temporal determinado. El concepto de normas jurídicas está vinculado con la determinación de una “conducta debida”, establecida por el Legislador en función del orden jurídico social.
Las normas jurídicas suelen conferir un derecho jurídico e imponen obligaciones que de no ser cumplidas permiten la aplicación de una sanción o consecuencia jurídica, que puede ser positiva o negativa, según sea el caso.
La importancia de la norma jurídica radica en la conformación de un ordenamiento jurídico que permita esquematizar las conductas, mediante el otorgamiento de deberes y derechos para la convivencia social. Otro aspecto importante es que las leyes y normas permiten la paz y el control social, porque va más allá de la sola conciencia individual de cada persona, ya que medio de la coerción que caracteriza a las reglas jurídicos, los ciudadanos cumplen con los preceptos legales, bien por convicción o solo para evitar la sanción.
El fin último del Derecho es el de garantizar la paz social y contribuir con la convivencia en la sociedad. Para ello se vale del aparato normativo compuesto, entre otras cosas, por un conjunto de normas jurídicas, las cuales, a su vez, cumplen funciones específicas. Estas funciones son la motivadora y protectora.
La función motivadora de las normas jurídicas atiende a la prevención especial en el sentido en que se trata de motivar a los ciudadanos a evitar las sanciones o penas con el cumplimiento de la conducta regulada en las reglas jurídicas.
Por su parte, la función protectora ayuda a definir qué son normas jurídicas de prevención general. Estas contribuyen con el resguardo de la convivencia pacífica y social; así como la protección de determinados bienes jurídicos.
Las reglas jurídicas tienen un conjunto de características que las definen y las distinguen de otros tipos de reglas como las normas morales o sociales. De esta forma, la heteronomia, la generalidad o la coercitividad son algunos de los caracteres que define qué es norma o regla jurídica.
Una de las principales características de la norma jurídica es la heteronomia. Esto es que las reglas jurídicas son dictadas por una persona o autoridad competente distinta a la que va dirigida. Es decir, que quién hace las normas no es la persona que tiene el deber de cumplir con el precepto de una norma.
La generalidad de las normas jurídicas se encuentra referida a la regulación que ejerce sobre un número indeterminado de personas. Es decir, que las reglas jurídicas tienden a regir la conducta de todos los ciudadanos que se encuentre bajo su tutela y no sobre personas específicas.
Las normas jurídicas también se caracterizan por ser reglas abstractas. El supuesto regulado en la norma jurídica no se trata de una situación concreta sino de casos amplios e hipotéticos que puedan abarcar las situaciones descritas en la norma de forma general.
Otra de las características de las normas jurídicas es la bilateralidad de las mismas. Esto quiere decir que las reglas jurídicas son capaces de establecer derechos y obligaciones a las personas a las que va dirigida. En ese sentido, el supuesto regulado por una norma determina un vínculo entre las personas, a través de derechos y deberes correlativos entre ellas. Por ejemplo, la norma que reconoce el derecho al tránsito de una persona, impone el deber a otra persona de respetar ese derecho.
A diferencia de las normas morales que son internas y que rigen en la conciencia de las personas, las normas jurídicas se caracterizan por ser externas. En ese sentido, las reglas jurídicas rigen las conductas externas de las personas, bien que se trate de una acción positiva o de una omisión en el comportamiento de los ciudadanos.
Entonces, el carácter externo de las normas jurídicas no toma en consideración, en la mayoría de los casos, las convicciones de las personas ni la intención en la conducta.
La coercitividad es una característica que permite definir qué son normas jurídicas. Esto implica que el Estado pueda, por medio de la fuerza, exigir el cumplimiento de la conducta descrita en la regla. Las personas cumplen con lo ordenado en las normas jurídicas aun en contra de su voluntad; ya que el Estado puede coaccionarlos por medio de penas o sanciones.
La definición de regla jurídica incorpora los elementos que conforman y le da sentido a las normas jurídicas. Los elementos de las normas jurídica son el supuesto de hecho y la consecuencia jurídica. ¿Pero, qué son el supuesto de hecho y la consecuencia jurídica?
El supuesto de hecho es uno de elementos de la norma jurídica y consiste en la determinación de una situación hipotética o hecho abstracto de posible realización futura. La ley regula este hecho o situación potencial que cuando se configura en la realidad, es decir, cuando la persona destinataria de la norma acomete la conducta regulada, se aplica el resultado dispuesto en la regla jurídica.
Según Hans Kelsen, la consecuencia jurídica es el elemento fundamental que distingue una norma jurídica de otro tipo de norma. La consecuencia jurídica se puede entender como el acto resultante que surge al materializarse en el mundo de los hechos el supuesto hipotético planteado en el texto normativo.
Aunque en algunas reglas jurídicas la consecuencia jurídica consiste en la aplicación de una sanción, también puede tratarse de un derecho, beneficio u otra situación. Las consecuencias jurídicas que representan una pena o castigo están relacionadas con las normas de conducta en derecho penal. El derecho normativo tributario, de transito o civil, en el tema de ilícitos o daños, puede comprender multas o penas pecuniarias dentro de las consecuencias jurídicas de las normas.
Entre los distintos tipos de norma jurídica se pueden distinguir según su carácter, obligatoriedad o su permanencia en el transcurso del tiempo. De esta forma, se ubican las normas jurídicas con carácter privado y las que tienen carácter público. Según su obligatoriedad se encuentran las imperativas y las dispositivas; y las transitorias y las permanentes.
También se distinguen las reglas jurídicas primarias de las secundarias, según la teoría del catedrático inglés Herbert Hart. ¿Cuál es el significado de normas primarias y cuáles son las normas jurídicas secundarias?
Las normas jurídicas de carácter público con aquellas emanadas de los órganos legislativos del Estado y rigen para todos los ciudadanos de ese país, estado o región.
Existen normas jurídicas que cuentan un carácter privado. Es decir, son emanadas y creadas por los particulares para regir en situaciones específicas del ámbito privado de las partes.
Se entiende como reglas jurídicas imperativas cuando regulan la conducta o situaciones de forma obligatoria y su cumplimiento y contenido no puede ser alterado, bajo ningún concepto, por la voluntad de las personas a las cuales están dirigidos.
Las normas jurídicas dispositivas son aquellas reglas que pueden ser modificadas o sustituidas por la voluntad de las partes. Es decir, su contenido y alcance puede ser modificado cuando las partes involucradas así lo decidan.
Son aquellas reglas jurídicas que han sido creadas con la intención de regular determinadas situaciones o hechos por un periodo indeterminado. Estas normas jurídicas no tienen fijada la duración de su vigencia, por lo que solo podrán ser derogadas por otro acto normativo posterior.
En contraposición, las reglas jurídicas transitorias establecen el período en el cual se mantendrán vigentes. Es decir, son normas que rigen por un tiempo determinado y previamente establecido, ya que son dictadas para regular situaciones temporales o transitorias. Las leyes de presupuestos, que rigen solo en el ejercicio fiscal para el cual fueron dictadas, o los decretos de emergencia que rigen mientras dure la contingencia; son un buen ejemplo de este tipo de norma.
Las reglas jurídicas normas primarias son aquellas normas que regulan conducta, por medio de la determinación de una obligación legal de hacer (mandato) o de no hacer algo (prohibición), y por cuyo incumplimiento o acatamiento, según sea el caso, se aplican las consecuencias derivadas de la norma.
Por su parte, las llamadas normas jurídicas secundarias son aquellas que determinan la creación, modificación o extinción de las reglas jurídicas primarias. Por lo tanto, son las que desarrollan los preceptos contenidos en las normas primarias.
Las normas jurídicas se encuentran en muchos aspectos de la vida cotidiana. Son las que rigen para ordenar el comportamiento de las personas, el funcionamiento de las instituciones y la garantía de los derechos y obligaciones de las personas naturales y jurídicas. A continuación, un breve listado de ejemplos representativos de normas jurídicas en la vida real.
El ejemplo de norma jurídica por excelencia es la Ley. Se trata de un conjunto de normas que reglan conductas y que acarrean una consecuencia jurídica de no verificarse su cumplimiento en la realidad. Así, el Código Civil, la Ley de Tránsito, la Ley de Protección a los Niños y Adolescentes son ejemplos de normas jurídicas.
No obstante, se debe observa una importante diferencia entre norma jurídica y ley, en el sentido en que, si bien toda ley está compuesta por un conjunto de normas jurídicas, no cualquier norma jurídica se comprende como una ley formal. En ese sentido, existen normas jurídicas que no son leyes.
Una de las diferencias entre ley y norma jurídica se puede identificar en el órgano que las dicta. La ley formal será dictada por el órgano legislativo competente, mientras que una norma jurídica privada puede ser emanada de los particulares. De allí, se puede pasar al siguiente ejemplo de norma jurídica privada: Los contratos.
Los contratos celebrados por los particulares también representan un claro ejemplo de qué son normas o disposiciones jurídicas privadas. Los contratos son acuerdos, mayormente escritos, mediante los cuales las partes que lo celebran se comprometen a la prestación de obligaciones reciprocas. Son un conjunto de normas que establecen derechos y deberes a los contratantes, que cuando no son cumplidos pueden acarrean la ejecución o resolución de lo acordado.
Entre los contratos privados más ejemplares se pueden mencionar los contratos de locación, en los cuales se crean reglas que rigen el comportamiento de locador, quien cede la cosa locada, y el locatario, quien la recibe para su uso y disfrute, por el pago de un canon de locación.
Los Estados también pueden celebrar “contratos” entre sí para establecer una normativa común que rija a nivel internacional para determinados temas. Así, los Tratados internacionales también contienen reglas jurídicas que regulan la conducta de los Estados parte que hayan ratificado o se hayan adherido al Convenio.
Las normas de los tratados internacionales se consideran disposiciones jurídicas ya que cumplen con los presupuestos y características que toda regla jurídica debe tener para considerarse como tal. De esta forma, la Convención Interamericana de los Derechos Humanos, la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño o los Acuerdos internacionales de libre comercio son algunos ejemplos de qué es una regla en derecho internacional.
Las decisiones de los jueces, cuando resuelven conflictos, también comprenden un ejemplo de norma jurídica. Los fallos se convierten en una regla obligatoria para las partes del juicio quienes deben cumplir con la sentencia del juez. Pero también, los fallos de la Corte pueden tener carácter general y obligatoriedad para todo el colectivo, y representa un gran ejemplo de regla jurídica.
Los reglamentos internos de los clubes sociales y deportivos también son ejemplos de los cuerpos normativos compuestos de reglas jurídicas. En estos instrumentos se establecen los requisitos para ser miembro, las regulaciones de conducta dentro de los establecimientos, y todos los deberes y derechos que gozan los asociados a la organización.
En definitiva, las leyes y normas jurídicas son importantes para la cohesión social, mientras se uniforman los comportamientos y se evitan los abusos de la anarquía. El Derecho viene a controlar, por tanto, el buen funcionamiento de la sociedad, a través de una serie de reglas jurídicas que definen los derechos de unos y las obligaciones de otros.