Las máquinas elípticas son uno de los equipos de fitness más completos, ya que permiten realizar entrenamientos cardiovasculares de alta intensidad muy efectivos para quemar calorías, mantener el correcto funcionamiento articular y tonificar el cuerpo.
A pesar de que la elíptica resulta ser una excelente inclusión complementaria para mantener grupos inferiores perfectos, las malas prácticas pueden echar a perder todo el potencial de este poderoso aliado.
Para sacarle el máximo partido a una bicicleta elíptica, lo ideal sería tener en mente siempre los siguientes consejos:
1. Calibrar la bicicleta
Este tipo de equipos suelen venir con un panel de calibración (digital o manual) que está predeterminado para una persona promedio de 70 kilogramos. Si no se efectúan los ajustes o las personalizaciones apropiadas se suelen obtener datos erróneos en el monitor haciendo imposible seguir los avances.
Esto puede llevar a uno de dos escenarios:
- Se desperdicia potencial
- Se sobre entrena
Ambos son eventos poco ideales y, en algunos casos, hasta contraproducentes al entrenamiento. Es vital calibrar la bicicleta correctamente para llevar un buen control de las rutinas.
2. Ajustar la resistencia
Otro error común es olvidar ajustar la resistencia, pasa a menudo cuando el equipo es nuevo o se practica en el gimnasio. La resistencia es la variable que regula la intensidad del entrenamiento y es clave para poder avanzar de manera progresiva.
El punto ideal es aquel donde se pueda mantener una rutina durante el tiempo apropiado, ni más ni menos.
Las bicicletas más avanzadas suelen tener mecanismos que ayudan a saber cuándo hace falta un ajuste en la resistencia.
3. Mantener una buena postura
La técnica al entrenar lo es todo, no importa de qué ejercicio se trate. En las elípticas pasa exactamente lo mismo.
Para sacarle el máximo potencial al entrenamiento y hacerlo de manera segura, previniendo cualquier posible lesión, lo ideal es mantener la espalda lo más recta posible y la cabeza erguida.
Echarse hacia adelante o encorvarse para “hacer más fuerza en las piernas” es un mito y un error bastante común, por no mencionar peligroso.
4. Definir una buena rutina
Existen diferentes rutinas de entrenamiento orientadas a diferentes objetivos:
- Periodos cortos de alta intensidad.
- Un periodo único con intensidad creciente.
- Varios periodos largos de intensidad moderada.
- Un único entrenamiento intenso combinado con ejercicios de pierna.
Todo dependerá de la condición física del usuario, las capacidades particulares para mantener determinados periodos al entrenar o la fase muscular en la que se encuentren. Variar el uso en función de los objetivos es la clave.
5. Distribuir el peso de la parte baja
Cuando se practica con la bicicleta es importante mantener bien distribuido el peso en la parte baja, especialmente en los pies.
El peso debería recaer específicamente en el talón, no en la punta. De esta manera se evitan potenciales lesiones en la parte frontal del talón, a la vez que se previenen molestias durante el ejercicio como el entumecimiento, dolor, calambres y hormigueo.
6. Usar el equipo apropiado
Esta parece una recomendación bastante básica, pero pasarla por alto no solo limita el potencial de entrenamiento, sino que abre la puerta a posibles lesiones articulares.
Al practicar con la bicicleta elíptica es vital usar zapatillas adecuadas, bien ajustadas y ropa que permita el libre movimiento.
Todos estos consejos representan la técnica apropiada para sacar el máximo partido de la bicicleta elíptica, una poderosa herramienta de quema de grasa, tonificación y acondicionamiento cardiovascular que, al combinarlo con un régimen balanceado, pude llegar a ser todo y más de lo que se necesita para mantenerse en una buena condición física.