Síntomas del estrés postraumático: cuáles son los más graves y cómo puedes sabes si los padeces

En Estados Unidos es común asociar los síntomas del estrés postraumático con veteranos de guerra, ya que estos combatientes estuvieron sometidos a constantes situaciones de peligro. El trastorno postraumático es una de las condiciones con gran abordaje dentro de especialidades como la psicología y la psiquiatría, y si bien puede tratarse con medicamentos y psicoterapia, es esencial que la persona con trastorno de estrés postraumático cuente con el apoyo de familiares, amistades o algún grupo de apoyo para que pueda sobrellevar este desorden. Conoce cuáles son los síntomas del estrés postraumático a continuación

Síntomas de evasión

Al investigar qué es estrés postraumático o qué es PTSD, encontramos que la enfermedad TEPT en psiquiatría o Trastorno de Estrés Postraumático (traducción de Post Traumatic Stress Disorder o PTSD en español) es un desorden que afecta en gran medida la salud mental de algunas personas que han experimentado una situación riesgosa o traumática en el pasado o recientemente, como por ejemplo, una agresión sexual, un accidente automovilístico, la muerte inesperada de un ser querido o algún otro evento de fuertes emociones negativas.

Ante las diversas causas de estrés postraumático, es común que la persona que padezca este trastorno, evite todo aquello que pueda desencadenar algún recuerdo de la experiencia traumática que le tocó vivir, provocando que altere su rutina y disminuya así su bienestar. Así, las personas que padecen ansiedad postraumática se mantienen alejadas de aquellos lugares, situaciones, objetos y hechos que puedan hacerle recordar el trauma o evitan pensar o tener sentimientos vinculados con la experiencia traumática. Por ejemplo, si la depresión postraumática surgió a partir de un accidente de tránsito, la persona que la padece evitará conducir o viajar en automóvil.

Síntomas de recuerdos intrusivos

El trastorno por estrés postraumático genera un cuadro clínico que somete al afectado en la reviviscencia, es decir, puede revivir mentalmente y de manera regular aquella experiencia que le impulsó el desarrollo de su trauma.Por tanto, la persona con este trastorno puede sufrir de pesadillas e inconvenientes para dormir, experimentar flashbacks que le hagan recordar el suceso, tener pensamientos aterradores y sentimientos angustiantes, todo ello acompañado de síntomas físicos asociados con el estrés, como sudoración, palpitaciones, arritmias cardíacas, entre otros.

Síntomas cognitivos y del estado de ánimo

Otra de las formas en las que se manifiesta el síndrome postraumático es a través de cambios de conducta, pérdida de interés por involucrarse en actividades que la persona afectada realizaba en el pasado y otras problemáticas graves. Aquí se clasifican los siguientes síntomas:

• La persona se siente mal cuando revive la situación traumática.
• Aislamiento social.
• Muestra irritabilidad, ataques de rabia o tristeza y otros sentimientos y emociones negativas.
• El afectado siempre presenta sentimientos de remordimiento, culpa, vergüenza, ira y miedo.
• Se expresa desesperanza, retraimiento e indefensa por parte del afectado.
• Experimenta problemas para recordar detalles concretos relacionados con la situación traumática, tal vez por tratarse de un mecanismo de defensa propio de la mente de la persona afectada.
• Muchas veces, la persona que sufre maltrato físico, sexual, emocional, es testigo o víctima de algún hecho de violencia o ha experimentado la pérdida de un ser querido, suele negar los acontecimientos relacionados al trauma.
• Muestra ausencia de emociones positivas.
• Problemas de concentración.

Síntomas de reactividad e hipervigilancia

El significado de PTSD, Post Traumatic Stress Disorder o Trastorno Postraumático se refiere a que la persona que lo sufre desarrolla una sobreprotección de sí misma, pero también del entorno que la rodea. Asimismo, este síndrome provoca cambios hormonales que alteran al cuerpo y se evidencian por medio de síntomas físicos como el aumento de la frecuencia cardíaca, la presión arterial, el estado de alerta y respiración anómala.

En el caso del estado de alerta, es muy común ver a las personas con esta afección siempre nerviosas o atentas en situaciones que representan algún peligro. Por tanto, se muestran síntomas como:

• Mantenerse en guardia, sentir tensión, al límite o como se le dice coloquialmente, con los nervios de punta.
• Sobresaltos provocados con facilidad.
• Sobreprotección de sí mismo, del núcleo familiar, amigos y del espacio donde hace vida.
• Problemas para conciliar el sueño, debido al estado de reactividad que motiva a la persona afectada a estar siempre alerta.
• El afectado con la enfermedad de trauma puede manifestar irritabilidad, agresividad, arrebatos de ira, frustración, entre otros.
• Además, muestra comportamientos destructivos, imprudentes o arriesgados tanto para sí mismo como para su entorno.

Síntomas de estrés postraumático en niños y adolescentes

Al buscar por internet información que nos ayude a comprender qué es el trastorno de estrés postraumático, podemos notar que la población infantil y juvenil puede expresar sus traumas a través de síntomas incluso más fuertes que los que manifiesta una persona adulta. Todo ello dependerá de diversos factores de riesgo que aumenten la posibilidad de sufrir la enfermedad de trauma y que describiremos más adelante.

Al ser un sector poblacional vulnerable, se recomienda que, ante la sospecha de uno o más síntomas, se aborde la situación por medio del acompañamiento familiar y con el apoyo de un especialista en el área, como puede ser un psicólogo o un psiquiatra.

Por lo pronto, veamos cuáles son los síntomas que, por lo general, se pueden ver en niños y adolescentes que pueden estar desarrollando un trastorno postraumático:

• No poder hablar u olvidarse de cómo hacerlo.
• No tener control de esfínteres, por lo que el niño puede mojar su cama o defecarse encima.
• El pequeño o adolescente busca aferrarse a sus padres o a algún otro adulto, siempre buscando protección.
• Se evidencias conductas rebeldes, irrespetuosas, destructivas o disruptivas.
• Los niños más pequeños pueden representar la experiencia traumática a través de juegos o dibujos que realizan a diario.
• Asumen la culpa por haber sufrido o no evitar la experiencia traumática que desarrolló su trastorno.
• Debido al grado de angustia que significó el evento traumático, muchos niños y adolescentes optan por guardar silencio y no hablar sobre el hecho.

Factores de riesgo que aumentan el desarrollo del trastorno postraumático

No todas las personas que hayan estado en situación de peligro o hayan tenido una experiencia traumática desarrollan de inmediato el trastorno por estrés postraumático. Mientras unos tardan en asimilar el evento u otros viven este desorden a corto plazo, otro sector de la población no atraviesa este trastorno.

Esto se debe a ciertas causas neurobiológicas, genéticas y otros aspectos personales que se toman en cuenta como factores de riesgo que contribuyen al surgimiento de este desorden, los cuales son:

• Haber pasado por traumas en su niñez.
• Manifestar fobias, miedos extremos, terror o impotencia ante ciertas situaciones.
• Haber vivido o ser testigo de situaciones peligrosas en el pasado.
• Tener antecedentes familiares o personales de enfermedades mentales.
• Haber experimentado uso (o abuso) de sustancias estupefacientes.
• Salir lastimado de un accidente o acontecimiento peligroso, o bien, haber visto personas fallecidas o heridas en eventos de este tipo.
• No contar con apoyo familiar o social después del hecho traumático, aumentando así su aislamiento.

¿Cómo saber si una persona sufre de trastorno postraumático?

Muchas interrogantes se presentan al momento de abordar el tema de la salud mental, ya que es uno de los ámbitos donde, en los últimos años, se ha manifestado cierta preocupación por parte de la comunidad científica, médica y el público en general.

Si has investigado qué es TEPT y te gustaría saber cómo se diagnostica esta afección, se recomienda que la persona que crea pueda desarrollar este trastorno acuda a un especialista en salud mental para que le diagnostique dicha condición, siendo sometido tanto a exámenes físicos como a una prueba de salud mental.

Por otra parte, dicho profesional de la salud puede evaluar a su paciente por un espacio determinado de tiempo para notar los siguientes síntomas y diagnosticar el TEPT:

• Uno o más síntomas de reviviscencia.
• Uno o más síntomas de evasión.
• Dos o más síntomas cognitivos y de estado de ánimo.
• Dos o más síntomas de reactividad e hipervigilancia.

Desafortunadamente se hace más común ver a algunas personas manifestar uno o más síntomas del estrés postraumático. Lo importante es que, ante la sospecha del desarrollo del trastorno postraumático, la persona afectada reciba constantemente apoyo emocional por parte de su círculo familiar, amistades cercanas o grupos conformados para el abordaje de esta afección, ya que en estos espacios se puede brindar ánimo, paciencia y comprensión a estas personas que atraviesan situaciones difíciles. Por otro lado, hay que tomar en cuenta que superar este trastorno lleva tiempo, por lo que es cuestión de compromiso que el afectado pueda tratarse esta condición, ya sea a través de terapias o con medicamentos supervisados por algún profesional.