Con el paso del tiempo, la humanidad ha evolucionado a pasos agigantados. Los desarrollos tecnológicos apuntan a nuevos procesos inimaginados. Pero, ¿puede el uso incorrecto de la tecnología representar un riesgo para la sociedad? ¿Cómo se controla? ¿Moral, ética y tecnología se pueden fusionar? Para saber qué es la tecnoética y su importancia, continúa leyendo.
Tipos de ética:
Definición, características y ejemplos de todas las ramas de la ética (normativa, laica, descriptiva, aplicada…)
Los conceptos de tecnoetica más generalizados están referidos a las áreas de investigación interdisciplinar que estudian todos los aspectos éticos y morales de la tecnología utilizada en las sociedades actuales.
Este estudio se logra mediante la aplicación de métodos y principios morales que rigen y determinan la forma cómo se relaciona la ética con la tecnología y de cómo deben usarse las innovaciones tecnológicas en la vida moderna. Estos principios están vinculados con los derechos digitales, la protección de datos, la libertad, la privacidad y la responsabilidad.
El término se empezó a utilizar desde 1977 y se ha asociado a diversos autores y especialistas como Mario Bunge, Roy Ascott y Norman Faramelli, quienes han contribuido al desarrollo de esta área del conocimiento para poder analizar con precisión la dimensión moral de los sistemas tecnológicos actuales.
Aunque se tiende a pensar que la palabra tecnoética proviene de la combinación de los términos ética y tecnología; realmente nace de la fusión de los vocablos griegos techne y noetikos que significan “crear cosas que no existen” y “mente y conciencia”; respectivamente. En ese sentido, la disciplina está referida a contar con la “conciencia en el proceso de creación de las cosas nuevas”; y así poder obtener un medio que garantice el buen uso de la tecnología en las áreas culturales, políticas y de desarrollo.
Las ideas de tecnoética en la actualidad buscan orientar a los productores, investigadores y a las personas en general a otorgarle un uso moralmente correcto a dispositivos, procesos y desarrollos tecnologías. Para poder identificar qué es tecnoética; el alcance de la moralidad en la tecnología, y las ventajas y desventajas de la tecnoética se debe tener en cuenta las características actuales de la tecnoética.
Los conceptos de la tecnoetica se encuentran relacionados con diversas ramas del conocimiento de ética y tecnología, pero son tres disciplinas las más relevantes.
El debate y los dilemas de tecnoetica no se refieren a la determinación si la tecnología es buena o es mala, sino que se analiza y se estudia qué tipo de incidencia puede ejercer sobre la vida, tanto en la humanidad como en el medio ambiente.
En la década de los 50, el primer satélite Sputnik 1 orbitó la Tierra, que ameritó la instalación de lo que sería la primera planta nuclear en el mundo. Sin dudas, un gran avance tecnológico para el progreso del mundo; pero también representaba un alto riesgo por los posibles problemas medioambientales que podría generarse.
Para esos años, también se creó el respirador artificial, lo que implicó una inmensa innovación para ayudar a los pacientes con dificultades respiratorias; aunque a la par significó uno de los grandes conceptos y problemas de la tecnología y bioética en la salud.
Durante la década de los 60, y con la posibilidad de salvar vidas con los trasplantes de corazón; el debate entre bioética y tecnoética fueron aumentando. La sociedad tuvo que redifinir los conceptos de vida y muerte; y se comenzó a hablar del “cese irreversible de las funciones cerebrales”. Esto permitió, entonces, declarar legalmente la muerte de personas asistidas con respiradores para aprovechar los órganos en buen estado y funcionamiento como el corazón para salvar otras vidas.
Debates similares se dieron con el desarrollo de la fecundación in vitro, en la década de los 70. Con la nueva técnica se podía ayudar a formar una familia a aquellas parejas estériles con dificultades para procrear. Además, la capacidad de producir un embrión fuera del cuerpo humano para transferirlo al vientre femenino posteriormente, abrió la posibilidad de la gestación por subrogación para evitar embarazos riesgosos que terminasen en aborto o en complicaciones de salud por condiciones físicas de la madre.
Sin embargo, la fecundación in vitro también representa un caso de tecnoética cuando se comienza a comercializar el proceso de gestación, mediante el alquiler de un vientre por una contraprestación monetaria. Por otro lado, existen dilemas éticos, que han sido debatidos por la legislación de muchos países, con el fin de regular el manejo correcto de los embriones crioconservados y la forma cómo son tratados para la concepción de la vida.
En ese sentido, la Unesco desde los años 70 comenzó a trabajar sobre la promoción de distintas reflexiones internacionales sobre temas y aspectos éticos y morales del uso y aplicabilidad de las nuevas tecnologías y el desarrollo con el objeto de crear conciencia tecnológica en la sociedad.
La conciencia tecnología se puede entender como la relación que existe entre los humanos y la tecnología y, por consiguiente, entre ética y desarrollo tecnológico actual. Es decir, se refiere a la responsabilidad ética y moral vinculada con los procesos de formación de nuevos conocimientos y artefactos en la sociedad.
Si bien la tecnología es un proceso que permite el desarrollo de la humanidad; también puede representar un riesgo de daño tanto a nivel personal como social. De allí que la percepción que se tiene actualmente sobre la tecnología es una perspectiva un poco más critica. Por lo que se busca comprender y profundizar en el uso de las innovaciones tecnológicas para cohesionarlas con las practicas sociales, morales y éticas de la humanidad y, siempre en beneficio de la colectividad.
La tecnología, como proceso y producto creativo del hombre, se encuentra presente en, prácticamente, todas las áreas y campos de la vida. Los desarrollos tecnológicos, no solo intervienen en los procesos industriales o de ingeniería; sino también que participan en áreas tan diversas como la salud, el comercio, las comunicaciones y hasta en el arte.
De allí, que donde se aplique y se desarrolle tecnología, siempre estará presente la tecnoética para buscar proteger y garantizar el uso “correcto” y moral de los elementos tecnológicos en la vida cotidiana.
Por lo tanto, la relación de la ética frente al desarrollo tecnológico es cada vez más estrecho. Las personas, en la medida en que avanza la tecnología, se van adaptando naturalmente a los cambios y mejoras propuestas por el desarrollo. Sin embargo, es importante que esa adaptación se realice de forma consciente para darle un uso productivamente benéfico para e contexto social en el cual se encuentre.
Así, ética y tecnología van de la mano para guiar y regular el uso de los sistemas tecnológicos en la dirección correcta. Por ello se encuentran ejemplos de la tecnoetica en diversas áreas del conocimiento y de la investigación como la ética de la ciencia, de la salud, de la computación, de los negocios, entre otros.
La tecnoetica, por tanto, se hace presente en las investigaciones de biotecnología como las referidas a las técnicas de clonación, aplicaciones industriales de cuidado de salud, telemedicina, la ética del deporte y la nutrición. Otros conceptos y problemas de la tecnoética y bioetica están relacionados con los procesos reproductivos por asistencia médica o científica; así como los debates sobre la eutanasia o muerte asistida.
Otro de los ejemplos de tecnoética en la vida diaria se encuentra en las áreas de investigaciones sociales como el derecho, la teoría social, ética organizacional, el tecnifeminismo, que se refiere a las incidencias e influencias que ejerce la tecnología a cada genero en especifico. Estos aspectos se observan como mayor claridad en los casos de anticonceptivos, abortos, fertilidad y tecnología relacionado con la sexualidad como la viagra o estimuladores sexuales.
La comunicación o las tecnologías de la información es otro campo de estudio de la ética y tecnología moderna. Con el auge de las redes sociales y los medios en internet, las personas tienen un mayor acceso a la información y las comunicaciones han adquirido una velocidad casi instantánea. Cualquier persona puede acceder y compartir con tan solo un click información a través de la red. Esto ha significado el origen de nuevos dilemas éticos en torno a las comunicaciones, difusiones de información y datos importantes. Por lo tanto, la relación entre la ética y la tecnología va más allá de los procesos de creación, sino que también abarcan los procesos comunicacionales y culturales.
A lo largo de los años, la tecnoética ha ido evolucionando y adaptándose a las nuevas realidades de la misma forma y la misma velocidad con la que avanzan los sistemas tecnologías. De manera que las implicaciones éticas en el desarrollo de la tecnología han generado diversas posturas y debates para tratar dar una respuesta adecuada y eficaz a los problemas morales que surgen con la aplicación de las nuevas tecnologías modernas.
Entre las distintas perspectivas que han regido para comprender y analizar las implicaciones éticas en el desarrollo y aplicaciones de la tecnología se encuentran el utilitrarismo, la filosofía hobbesiana, de Lévinas o la Kantiana.
Filosofía Hobbesiana: Esta filosofía debe su nombre al filosofo inglés Thomas Hobbes, quien sostenía que la sociedad era mantenida por contratos sociales que limitan las libertades individuales por razones de seguridad. En ese sentido, esta perspectiva de ética y tecnología se refiere a la recuperación de esa libertad a través del desarrollo que facilita las comunicaciones y la reducción de las distancias.
Filosofia de Lévinas: El enfoque de este planteamiento, basado en el pensamiento del filosofo Emmanuel Lévinas sobre la relación que existe entre empatía y el rostro humano; dispone que gracias a la tecnología y a las herramientas de internet se puede brindar un “rostro” a los problemas que puedan ocurrir en cualquier del mundo. De esta forma, se sostiene que se puede generar empatía para aportar soluciones y ayuda a grupos distantes a través de la tecnología.
Utilitarismo: Un ensayo de tecnoética que abarca la doctrina moral del utilitarismo se refiere al desarrollo de la tecnología como elemento generador de máxima felicidad. Sostiene que la realidad virtual permite acceder a una vida de placer; sin embargo, se le critica a esta doctrina el desapego con la realidad y la marcada tendencia al hedonismo.
Filosofía Kantiana: El filosofo alemán Immanuel Kant considera a la tecnología como a un bien en sí misma; por lo que no debería ser explotada como un medio. Esta corriente aplicaba la noción de imperativo categórico, como mandamiento autónomo e independiente de ética, sobre los avances y usos de las tecnologías.
Filosofía de Foucault: De acuerdo con el pensamiento de Michael Foucault, la tecnología se puede interpretar como un medio idóneo para que la sociedad se comprenda a sí misma. Los desarrollos tecnológicos permiten obtener un conocimiento anatómico con gran detalle para comprender mejor el funcionamiento del cuerpo humano. Esto permite que la ciencia y la tecnología sea capaz de brindar respuestas rápidas y soluciones a problemas y necesidades personales y colectivas. Otro de los beneficios, según Foucaut, del entendimiento propio es la facultad de generar empatía y poder ubicarse en el lugar del otro para abordar problemas desde otras perspectivas.
La presencia de la tecnología como campo de conocimiento en la vida en sociedad es sumamente importante, no solo porque representa una herramienta útil que facilita el desarrollo de las personas sino porque permite descubrir nuevas posibilidades y nuevos recursos aplicables a la gestión y convivencia social con el medio ambiente.
Es allí, cuando la tecnoética participa de forma activa, ya que permite identificar los posibles riesgos de los usos y aplicaciones desmedidos de la tecnología en la vida.
De esta manera, la importancia de la ética en la tecnología radica en la posibilidad de generar un marco regulatorio que imponga reglas éticas que permitan ordenar los procesos tecnológicos y mantenerlos dentro del campo de la utilidad y beneficio social. Esto impide que la tecnología sea utilizada para dañar a otros o al medio ambiente, de forma inconciente o deliberada.
Sin embargo, existen muchos casos en los que la tecnología puede generar diversos problemas de tecnoética o dilemas entre la moral y el desarrollo. A continuación algunos de los dilemas éticos más destacados:
Entre los principales dilemas e implicaciones eticas de los avances tecnológicos actuales el uso de la información personal por las empresas. Las personas cada vez que navegan en internet, compran en línea o participan en redes sociales, van ingresando o brindando parte de sus datos o información personal que son recopiladas por las compañías para ofrecer una mejor experiencia en línea. Sin embargo, muchas veces se puede compartir información confidencial o sensible que pueda comprometer el derecho a la privacidad.
Desde la aparición de Dolly, la primera oveja clonada, se puso sobre el tapete uno de los dilemas tecnoéticos y bioéticos más sonados. El uso de tecnologías genéticas siempre ha sido objeto de observación y critica por parte de la sociedad en general. No solo por la posibilidad de trabajos o ensayos en seres humanos, sino también en las áreas de ganadería o agricultura.
Si bien es cierto que las modificaciones y las manipulaciones genéticas en la agricultura para mejorar la calidad de los alimentos ha existido desde hace mucho tiempo; no deja de preocupar el mal uso o manejo incorrecto de las técnicas que pudieran generar problemas entre ética y tecnología genética.
Un gran ejemplo de ello son los alimentos transgénicos que se producen con la colocación de genes alterados en el organismo para alterar su tamaño, aspecto y hasta el sabor. Los riesgos que analiza la tecnoetica son los posibles niveles de toxicidad o alérgenos en los productos finales de estos procedimientos.
Los dilemas entre ética y tecnología se encuentran muy latentes en los desarrollos tecnológicos que involucran la inteligencia artificial. De entre los inventos más importantes del siglo XXI los que desarrollan inteligencia artificial son los más sorprendentes. Estas tecnologías ofrecen un gran potencial de herramientas y soluciones a problemas tanto cotidianos como empresariales de gran escala. Sin embargo, muchas de sus aplicaciones podrían ser objeto de dilemas éticos y bioéticos muy grandes.
Uno de los principales dilemas tecnoeticos de la IA es el uso del reconocimiento facial. Esta tecnología aunque puede ser muy útil para temas de identificación puede verse involucrado en problemas de prejuicios raciales y puede restringir libertades personales y derecho a la intimidad.
Por otro lado, la tecnología autónoma es uno de los grandes ejemplos de implicaciones éticas en la tecnología de Inteligencia Artificial. Aunque los drones de servicio y los autos sin conductor, por mencionar algunos, puedan resultar muy útiles y provechosos para determinadas funciones; se teme y se mantiene un gran recelo sobre la escasa o nula supervisión humana sobre algunos de estos artefactos robóticos.
El impacto negativo que se puede producir sobre el medio ambiente por las distintas creaciones del hombre ha sido tema de debates importantes durante largos años. Con los avances y desarrollos tecnológicos no se ha hecho excepción. El crecimiento industrial y tecnológico mundial ha generado una huella preocupante en el planeta. Por esta razón, la tecnoética se encuentra presente y alerta en los nuevos ensayos y proyectos de tecnología.
Uno de los aspectos más destacados de los desarrollos industriales es que la mayoría de los dispositivos tecnológicos no son reciclables o no son concebidos con bajo impacto ambiental; de manera que la producción desmedida y sin control puede generar daños a corto plazo en los distintos ecosistemas.
Por otra parte, para la creación de determinados componentes tecnológicos las industrias emplean o requieren materiales de extracción peligrosa como el Coltán que generan un impacto negativo en el ambiente. Algunos procesos de fabricación involucran prácticas perjudiciales a los ecosistemas como uso excesivo de aguas, manejo de sustancias toxicas, alto consumo de energías no renovables, etc.
En consecuencia, la tecnoética busca aplicar políticas eficaces que permitan el control sobre sustancias peligrosas tanto para los humanos como para el ecosistema; así como también generar conciencia en los consumidores sobre el alcance de determinados productos y servicios.
Definitivamente, la tecnoética es importante para controlar que los avances tecnológicos no supongan ningún riesgo ni para la humanidad ni para los ecosistemas. La relación entre ética y tecnología debe mantenerse equilibrada para garantizar el verdadero y correcto desarrollo de la humanidad, a través de sus ingenios.