Hay varios tipos de razonamiento en filosofía, psicología y otras ciencias cada uno cuenta con ventajas y desventajas, así como momentos y contextos en los que son especialmente útiles y otros en los que no son tan apropiados. Curiosamente el lector probablemente ha utilizado todos los tipos de razonamiento listados a continuación en algún momento de sus vidas.
Razonamiento deductivo:
Qué es, método, características y 4 ejemplos de lógica deductiva
¿Qué es razonamiento? El razonamiento en filosofía es un concepto bastante complejo que aún mantiene debatiendo a los profesionales de distintas ramas como la neurología y la psicología, sin embargo en términos muy simples puede entenderse como la capacidad del ser humano de utilizar el pensamiento, los elementos presentes en él y las habilidades cognitivas para establecer patrones, estrategias, argumentos etcétera.
El razonamiento en psicología muchas veces es asociado con la inteligencia, específicamente bajo la definición de inteligencia como la capacidad de resolver problemas, y no es de extrañar porque el razonamiento puede jugar un papel muy importante a la capacidad de resolver problemas. Por ejemplo, el razonamiento puede tomar un conjunto de información pre existente y utilizarlo para crear una nueva perspectiva, solución o creencia y no siempre se trata de crear algo “nuevo” también es común utilizar el razonamiento para optimizar algún proceso problemático o inferior, pero ¿cuáles son los tipos de razonamiento lógico?
Ahora teniendo claro el concepto y la utilidad del razonamiento en general se puede proceder con el primero de los tipos y formas de razonamiento científico, este forma parte de 2 de los tipos de razonamiento más conocidos y es el razonamiento deductivo. El razonamiento deductivo es aquel que va de lo general a lo específico (el razonamiento que va de lo general a lo particular), utiliza verdades o hechos universales para obtener respuestas únicas a un caso particular.
El razonamiento deductivo utiliza esas verdades o hechos universales como una base, esto varias veces quiere decir que utiliza la lógica como punto de partida y luego como herramienta para sustentar sus conclusiones, hay tipos de razonamientos deductivos como el categórico (se usan dos premisas “válidas” para llegar a la conclusión), proporcional (se usa una premisa que permite la existencia de otra) y disyuntivas (en la que 2 premisas que se contradicen una a la otra se evalúan hasta que una sea eliminada).
Si bien el razonamiento deductivo puede ser bastante útil no es perfecto, al igual que cualquier otro tipo de razonamiento existente (incluidos los de esta lista) tiene sus puntos débiles y limitaciones y es que, aunque el razonamiento parta de un “hecho” su conclusión puede terminar siendo errónea igualmente, y también hay casos donde la persona parte de un “hecho” que resulta ser falso, volviendo todo el proceso deductivo ineficaz desde un principio.
El primero de los ejemplos de razonamiento es quizás el más popular, en el caso del razonamiento deductivo es el de un detective resolviendo un caso, en incontables novelas, películas y obras se retrata como un detective se encuentra con un acertijo que debe resolver (como la identidad de un asesino), para esto toma sus premisas o hechos (la evidencia en la escena del crimen) y las utiliza para llegar a la conclusión (lo que pasó en dicha escena),
Ahora el segundo de los razonamientos más conocidos es el razonamiento inductivo, este puede entenderse como el opuesto del razonamiento deductivo ya que en este caso se utiliza información o casos particulares para llegar a una respuesta o conclusión general (razonamiento que va de lo particular a lo general).
Si el razonamiento deductivo es aquel utilizado para hacer deducciones el inductivo es el utilizado para hacer inducciones y no solo eso, sino que en realidad es el tipo de razonamiento que más utiliza la persona promedio en su día a día.
A pesar de lo que pueda parecer a primera vista el razonamiento inductivo tiene sus ventajas, una de las razones por las cuales es el más utilizado es porque este puede basarse en experiencias personales (estas funcionan como casos particulares), las personas no siempre cuentan o tienen en mente los hechos y la información verificada, pero en sus memorias están presentes sus experiencias, en este sentido el razonamiento inductivo suele resultar muchos más práctico que el deductivo.
Dicho eso, el razonamiento inductivo al alejarse de realidades generales se vuelve un razonamiento más probabilístico en lugar de lógico, los casos particulares y la experiencia personal rara vez son objetivos y esto tiene como consecuencia que muchos razonamientos inductivos terminen en conclusiones erróneas o directamente falsas.
Eso de por sí no es necesariamente malo pues en las decisiones pequeñas diarias sus repercusiones no son mayores (por ejemplo, una persona come una hamburguesa de una famosa cadena, esta vino con ingredientes en mal y concluye que todas las sedes de ese restaurante usan ingredientes vencidos), el problema ocurre cuando estas conclusiones erróneas de la inducción son aplicadas a sistemas de creencias más importantes como alguien que es asaltado por un extranjero y concluye que todos los extranjeros son criminales, esta conclusión basada en una experiencia personal particular sería xenofobia.
Un ejemplo sencillo de un razonamiento inductivo erróneo pero inofensivo es el de una persona que un día se coloca unos calcetines que le regalaron en navidad, ese día recibe buenas noticias y encuentra un billete en el piso, por lo cual concluye que esos calcetines le dan suerte. La persona generalizó un caso específico y personal (el día que tuvo suerte y se puso esos calcetines) para creer que cada vez que lo haga ocurrirá lo mismo (macro).
Además del deductivo e inductivo hay varios otros tipos de razonamiento presentes, pero hay 2 que resaltan entre ellos, el hipotético-deductivo y el transductivo. El razonamiento hipotético deductivo de cierta forma mezcla los 2 tipos de razonamiento ya explicados porque como lo indica su nombre consta de una hipótesis y una deducción, la hipótesis nace de información y casos específicos que son generalizados (razonamiento inductivo) y la deducción se encarga de comprobar con hechos si la hipótesis es verdadera o falsa (razonamiento deductivo).
Una de las áreas más notorias en las que se utiliza este estilo de razonamiento es en el ámbito científico, ya que el razonamiento hipotético-deductivo se alinea con el método científico. Millones de estudios parten de una o más hipótesis que nacen de estudios y teorías pasadas y que serán confirmadas o refutadas mediante la implementación de instrumentos, experimentación etcétera.
Entendiendo que el principal uso y beneficio de este tipo de razonamiento se encuentra en la ciencia hay que tener en consideración sus desventajas la primera que esta es especialmente poco práctica para la persona promedio y por eso tienden a mantenerse en el área académica porque tanto la inducción como la deducción suelen requerir un trabajo considerable. Y la segunda desventaja es que como se mencionó al inicio ningún tipo de razonamiento está libre de errores y si bien en este caso suelen haber medidas que intentan filtrar esos casos, los investigadores siempre corren el riesgo de caer en sesgos cognitivos.
Un ejemplo del razonamiento hipotético deductivo es el de un investigador que cree que la población de un pueblo pequeño sufre de altos niveles de ansiedad por las conversaciones que tuvo con algunos de sus miembros (hipótesis) por lo cual se dedica a aplicarles cuestionarios y escalas para medir la ansiedad y luego realizar los análisis estadísticos pertinentes para descubrir si su hipótesis es verdadera o falsa (deducción).
La lista ha estado siguiendo un orden de relevancia y notoriedad desde el tipo de razonamiento más conocido y así sucesivamente, es de esa forma que se llega al cuarto tipo de razonamiento, el razonamiento transductivo este consiste en unir distintos conocimientos o información para llegar a una conclusión, teoría o creencia.
Una de las características del razonamiento transductivo más importante es que la información que se une para llegar a la conclusión rara vez está unida por la lógica, en parte eso es lo que la diferencia de la inducción o la deducción. Esta particularidad también significa que este estilo de razonamiento está presente principalmente en la infancia, pues en esa etapa aún no se manejan algunos de los razonamientos lógicos más complejos que descartan muchas uniones, y por eso las ideas cobran sentido, sin embargo este estilo de razonamiento también puede presentarse en adultos como por ejemplo en algunas creencias religiosas o espirituales que no están sustentadas por la lógica.
Si tuviese que darse un beneficio principal a este razonamiento es que puede ayudar al niño a encontrar respuestas temporales a un mundo que aún no comprende del todo y en el mejor de los casos alimentará su curiosidad animándole a hacer preguntas. Pero dicho eso su desventaja principal es más que clara y es que las respuestas obtenidas con el razonamiento transductivo por lo general son falsas, es complicado dar con una respuesta correcta cuando se parte de información incorrecta o unida por una lógica fallida.
El ejemplo unirá ambas áreas donde se presenta más este estilo de razonamiento es decir la infancia y lo religioso, imaginen un niño pequeño que cree que en el cielo viven ángeles, un día durante una tormenta empieza a escuchar truenos y uniendo su experiencia con el sonido y la creencia de que los ángeles están en el cielo llega a la conclusión de que los truenos ocurren porque los ángeles juegan a los bolos.
En rasgos generales los 4 distintos tipos de razonamiento explicados hasta ahora conforman la categoría general y pueden considerarse como los principales, sin embargo existen otro número de razonamientos que a veces encajan dentro de los ya mencionados pero aun así no está de más conocerlos y tener una idea de a qué se refieren y de qué se encargan.
Estos métodos de razonamiento son el ejemplo perfecto de algunos que pueden mezclarse o confundirse con otros razonamientos ya explicados pues comparten características con ellos, empezando con el razonamiento lógico que es aquel que asocia información estructuradamente y bajo un sentido lógico para obtener respuestas (puede confundirse con el deductivo o el hipotético deductivo por ejemplo).
Y luego está el razonamiento no lógico, que al contrario no utiliza la lógica para unir la información, sino que las asocia por medio de falacias o sesgos, esto resulta en que las conclusiones no estén debidamente conectadas con las premisas de las que se originó, en este caso es bastante similar a lo que ocurre con el razonamiento transductivo.
Finalmente se hablará de otros 2 modelos de razonamiento menos conocidos, primero el razonamiento matemático este en sí es considerado un tipo de razonamiento lógico pues este consiste en alcanzar conclusiones mediante reglas pre existentes, conjuntos y operaciones numéricas, o en otras palabras se utiliza la lógica matemática, este tipo de razonamiento no recurre a la subjetividad, sino que se rige únicamente por las reglas establecidas dentro de la ciencia.
El ultimo tipo de razonamiento es el verbal también conocido como razonamiento lingüístico, a diferencia del matemático este se rige por los mecanismos y reglas del lenguaje, este es especialmente interesante porque el lenguaje que se conozca influye directamente en las conclusiones obtenidas ya que ese moldea de cierta forma la percepción.
Luego de ver distintos ejemplos de los tipos de razonamiento es importante concluir que a pesar de que algunas de las formas de razonamiento se vean “mejores” que otras todas tienen un lugar y utilidad en la vida de las personas, todo consiste en conocer cuando es mejor utilizar un tipo de razonamiento específico y cuando no, para poder optimizar las conclusiones y respuestas que se busquen.