Una de las mayores preocupaciones de los contribuyentes al momento de elaborar la Declaración Anual, es haber cometido una equivocación al momento de ingresar la información solicitada. Si bien el SAT permite el ingreso de una declaración complementaria, lo ideal es que todo quede en orden desde el proceso inicial.
Es un hecho que nadie se salva de los errores, nadie está exento de ellos, sin embargo, algunos sí pueden evitarse. A continuación, vamos a compartirte una serie de consejos que te serán de ayuda al momento de realizar este trámite.
No permitas que se te escape ninguna fecha
Recuerda que el cumplimiento en tiempo y forma de las obligaciones fiscales, te convertirán en un contribuyente alejado del radar del Sistema de Administración Tributaria. El tema de las fechas es fundamental, así que vamos a revisarlas.
El período de entrega de la declaración para las personas morales fue del 1 de enero hasta el 1 de abril de 2024, mientras que para las personas físicas, el plazo comienza a correr desde el 1 hasta el 30 de abril del año en curso.
Los usuarios tienen la opción de llevar a cabo el proceso en línea a través del sitio web del SAT, o bien, agendar una cita y acudir a alguna oficina de dicha institución. Por otro lado, cabe destacar que si presentas tu Declaración Anual con retraso, podrías ser acreedor de una sanción económica.
Revisa que tu Información se encuentre en orden
Al momento en el que los contribuyentes realizan la consulta de declaración de impuestos, deben asegurarse de que tienen a la mano todos los datos que necesitarán para el llenado exitoso de los módulos; no obstante, uno de los errores más recurrentes es el desorden de la documentación referente al campo de lo contable.
Al llevar un registro adecuado de cada informe financiero y revisar que cada uno contenga la información correcta, entonces no estarás horas dándole acomodo a documentos. Además, como ya se ha mencionado, el factor del tiempo no se debe descuidar.
Realiza las correcciones pertinentes
Es totalmente comprensible que el ajetreo cotidiano nos obligue a hacer las cosas de forma rápida, pero te recomendamos que evites hacer esto con tu Declaración Anual y le dediques la cantidad de tiempo suficiente, tanto para el completado de los formularios, como para revisar que ninguna letra de más se te haya escapado o una cifra sea incorrecta.
¿Quizá se te fue un número en el ISR (impuesto sobre la renta) o hay un espacio doble en tu nombre? Los detalles son importantes.
A veces, con la prisa encima, lo que más deseamos es concluir a la brevedad el trámite, sin embargo, un error se puede suscitar sin que nos percatemos. Sé cuidadoso, observa cada campo con paciencia y, cuando estés seguro de que no hay nada más por corregir, envía tu declaración.
Apóyate en un sistema contable
Si en definitiva lo tuyo no es la organización de tu documentación fiscal, recurre a los sistemas contables para sobrellevar la situación. Es entendible que el exceso de información pueda llegar a abrumarte, pero gracias a esta herramienta, serás capaz de entregar tu Declaración Anual de forma exitosa.
El objetivo de dichos software, es que tu información esté completa, ordenada y actualizada, lo cual te permitirá estar preparado para tu declaración, incluso si la fecha límite se aproxima.
Conclusiones
Es inevitable que exista cierto estrés a la hora de hacer la Declaración Anual, sin embargo, mientras ingreses datos verídicos, tengas conocimiento de los plazos de entrega y te des el espacio para revisarla, no habrá razón para preocuparse.
Como último paso, comprueba que hayas recibido un acuse, solo así, habrás concluido con el proceso y serás un contribuyente responsable frente a las autoridades fiscales.
