El valor de la bondad es genuino y natural en la mayoría de los seres humanos. No solo por la satisfacción de hacer el bien y ayudar a otros; sino por el comprobado beneficio mental y físico que por ser amables recibimos en recompensa. Sabemos que los gestos de generosidad no se hacen a cambio de alguna ventaja, pero aceptamos con gusto la confianza, la autoestima y el estado de ánimo que ganamos cuando los hacemos. A continuación conoceremos cuál es el verdadero significado de bondad, cuáles son los rasgos que distinguen a una persona bondadosa y qué podemos hacer para demostrar compasión y amabilidad por los demás.
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¿Qué es ser bondadoso?
La bondad más que un comportamiento o acción es la tendencia espontánea y permanente de hacer el bien, puede considerarse un carácter que distingue la personalidad de algunas personas. Las personas bondadosas mantienen una actitud de disposición constante por ayudar a otros, son generosos, respetuosos, considerados y desinteresados. El fin supremo de todo ser bondadoso además de causar bienestar a quienes le rodean, es evitar todo tipo de angustia, sufrimiento o desesperanza.
El diccionario da definición de bondad a la cualidad de ser amable, generoso y considerado; y distingue como sinónimos las palabras buena voluntad, calidez, ternura, desinterés y benevolencia. El término es el sustantivo abstracto de origen latín Bonitas, de bonus que traduce bueno y y el sufijo –tat que significa cualidad, es decir, cualidad de bueno.
Actuar con bondad significa elegir hacer algo que ayude a los demás o a ti mismo, motivado por sentimientos genuinos y cálidos. Definir bondad muchas veces representa anteponer las necesidades de los demás a las nuestras; por ejemplo, ofrecer un puesto en el autobús a alguien que lo necesite o brindar un café a algún colega de la oficina. Como seres sociales también necesitamos la bondad de los demás para sobrevivir, incluso desde que nacemos somos dependientes pues requerimos del cuidado y la dedicación de nuestra familia en casi todo sentido para desarrollarnos.
Importancia de la bondad
La bondad es una cualidad del ser aunque nos parezca mentira, y se puede manifestar a través de actos simples, gratuitos, positivos y especialmente saludables. Practicar la bondad, produce en nosotros reacciones físicas y mentales positivas. La lista es extensa pero enumeremos algunos de los beneficios más resaltantes del concepto de bondad:
- Reduce los niveles de cortisol, la hormona del estrés y aumentar la producción corporal de hormonas de la felicidad, como la dopamina, la oxitocina y la serotonina.
- Ayuda a estimular el sistema inmunológico, reducir la presión arterial y la ansiedad.
- A nivel mental aumenta la autoestima, la empatía y la compasión, y mejora el estado de ánimo.
- Todos los beneficios en la salud física conllevan a una vida más larga.
- Incrementa el sentido de conectividad con los demás, nos aleja de la soledad, mejora el mal humor y mejora las relaciones en general.
- La amabilidad es contagiosa, puedes llegar a ser una inspiración para alentar la bondad en otros.
¿Qué es bondad en la Biblia?
La palabra bondad aparece en la biblia, con el mensaje ancestral de que debemos dirigir nuestra generosidad y amabilidad no solamente a familiares y amigos cercanos, sino especialmente a desconocidos e ingratos pues son quienes más necesitan de este gesto.
En la carta de Pablo a los Efesios, según lo qué significa bondad en la Bibliia aparece “Sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios os perdonó a vosotros en Cristo”. Otra carta a los colosenses, relata “Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de corazón compasivo, de bondad, de humildad, de mansedumbre y de paciencia”. Y en Proverbios 11:17, el significado bíblico de bondad señala que el hombre bondadoso se beneficia a sí mismo, mientras que el hombre cruel se perjudica a sí mismo.
La religión tanto como la filosofía, insistieron en el transcurso de la historia en el mensaje de que la bondad hace felices de forma genuina a los hombres y eleva tu espíritu; pues ser amable con los demás es una de expresión de amor propio, por Dios, por el prójimo y el Universo.
Características de las personas bondadosas
No importa la edad, nacionalidad o género para ser bondadoso. Lo que si tienen en común las personas buenas es que actúan de manera genuina y desinteresada; no por sacrificio o compromiso, sus acciones surgen de manera espontánea y natural porque así es su forma de ser, a veces incluso sin caer en cuenta celebran actos de bondad. La mayoría de los rasgos que exhiben las personas amables son simples y cualquier de nosotros lo puede replicar con facilidad si tenemos la voluntad de hacerlo:
Son positivos
Las personas buenas se expresan usualmente de manera positiva y evitan comentarios negativos o hirientes sobre sí mismos o que puedan afectar a otras personas. También se alejan de la queja y el rumor mal intencionado.
Son compasivos
Las personas bondadosas son empáticas y se preocupan legítimamente por quien lo necesite. Su interés constante por ayudar y evitar el sufrimiento ajeno los lleva a involucrarse en acciones benéficas, voluntariado o profesiones relacionadas a la medicina o docencia.
Son generosos
No importa que tan poco tengan, siempre tienen algo que ofrecer a otros. No necesariamente relacionado a algo material, las personas buenas son voluntariamente generosas con su tiempo y con todo lo que a su alcance. Insisten en donar lo que no necesita a otros u organizar eventos de caridad y solidaridad.
Son atentos y serviciales
A las persona con bondad les encantan las buenas obras. Son los primeros que se ofrecen a brindar ayuda de cualquier índole, si necesitas mudarte, ser escuchado, remolcar tu auto, si necesitas organizar una reunión, o simplemente si necesitas una sopa para tu resfriado. Son personas sumamente consideradas y ponen a los demás primero, según el significado de bondadoso.
Perdonan con facilidad
Poco saben de guardar rencor y maneja muy efectivamente las emociones de enojo, frustración y tristeza. Para empezar, las personas bondadosas tratan de alejarse de los conflictos y discusiones, además gozan de una envidiable paciencia y calma que hace bajar la guardia a cualquier arma ofensiva.
Son honestos
La mayoría de las personas son reguladamente honestas, les desagrada manipular a las personas, por eso prefieren propiciar la comunicación asertiva y la confianza hacia quienes se dirigen. Son personas con mucha integridad, por ello no mienten y buscan las palabras adecuadas para expresar lo que les desagrada.
No discriminan
La persona qué es bondadosa no señala defectos ni hace comparaciones, sino que trata de manera amable a todos por igual, sin importar edad, género, raza, etnia, preferencias, etc. Siempre está abierta y dispuesta a hacer nuevas amistades y aprender de cada relación. Respeta las diferencias entre las personas.
¿Cómo desarrollar el valor de la bondad?
Ser bondadoso es algo natural para muchas personas, mientras otras, más propensas a sumergirnos en nuestros problemas y obligaciones dejamos a veces a un lado las necesidades de otros. Sin embargo, siempre tendremos la necesidad de hacerlo, con nuestros hijos, amigos o quien nos mueva el corazón.
Mostrar bondad a los demás no tiene que significar algo complejo o sacrificado, que nos distraiga de nuestras responsabilidades o que nos cambie la vida. Existen pequeños actos de bondad que causan gran impacto en las personas porque es todo lo que necesitan de nosotros: una palabra de aliento, un café en compañía o una sonrisa contagiosa hacen la diferencia. Lo importante es no perder de vista estos principios para lo qué es bondadoso:
Conciencia
Se puede ser consciente de la oportunidad de ser amables, ya que usualmente las responsabilidades, vanidades y pensamientos nos hacen ciegos a lo que ocurre muchas veces en nuestro entorno y nos perdemos de las necesidades que otros tienen, incluso que nos manifiestan sin percatarnos. Es necesario observar y atender lo que ocurre alrededor de nuestra ocupada vida.
Evitar juicios
Para ser buenos debemos evitar los juicios y suposiciones sobre las demás personas, todos tenemos rabo de paja y no somos quienes para señalar lo bueno o lo malo, las fallas o aciertos de otros. Las buenas personas resaltan amablemente las cualidades de las personas y las utilizan como herramientas para alentar y apoyar a quienes lo necesiten.
Acción
No solo la intención basta, tampoco los buenos deseos, la bondad es básicamente acción que mejora la vida de las personas. No se trata de hacer grandes obras de caridad que impliquen altos sacrificios y recursos. Basta con el hecho de comportarse amistosa, generosa y consideradamente con la persona que tenemos delante.
Incondicionalidad
La bondad no espera algo a cambio. Ser amable no implica imponer condiciones ni mantener expectativas de recompensa. Las personas bondadosas encuentran recompensa en su interior, en la satisfacción de las buenas acciones y en el beneficio que a través de su intención genera a otros, es lo qué significa la palabra bondad.
Ser amable contigo mismo
No podemos ser amables con otros si no somos buenos con nosotros mismos. Sentirnos plenos, conformes y felices es esencial para una bondad sostenida hacia los demás. Las personas que se desviven por cuidar a otros y descuidan sus propias necesidades, tarde o temprano afectarán su voluntad y el deseo constante de cuidar a otros.
Ejemplos de comportamiento y acciones bondadosas
Nos encontramos con ejemplos de bondad en cada rincón si somos buenos. La bondad siempre se revierte y genera siempre un efecto bola de nieve, es decir; que se replica y alienta a otros a responder amablemente con otros en agradecimiento, así que todos terminan colaborando por un entorno más armonioso y feliz. Como dijimos, escuchar con atención o regalar una gran sonrisa de buenos días, no cuesta nada y puede hacer una gran diferencia para alguien que atraviese un mal momento. Hay miles de formas de expresar bondad y gratitud por la vida, estas son algunas ideas:
Rescatar una mascota
Los animales son los seres más agradecidos de la tierra, devuelven con ternura cualquier gesto de generosidad. Además siempre conseguiremos alguna mascota huérfana que requiera de nuestros cuidados y atenciones, seguro obtendrás una compensación justa. Incluso si resulta difícil llevarlo a casa, trasladarlo a un refugio donde reciba atención médica básica y alimentos resulta una valiosa obra de bondad.
Donar alimentos
A veces podemos comprar un poco más de lo que necesitamos cuando vamos al supermercado a reponer nuestra compra del mes. Siempre habrá alguien que necesite alimentos sea en tu propia comunidad o en localidades vecina, y si no tienes información cercana puedes contactar a una de las tantas organizaciones o instituciones benéficas que operan en tu ciudad o región. Donar medicamentos, libros y juguetes a centros de atención o instituciones en algunos países es otro grandioso acto de bondad.
Apoya un emprendimiento
Existe en la actualidad un boom en la aparición y creación de emprendimientos. Algunos amigos y conocidos se han lanzado en los últimos años a la aventura de abrir sus propias empresas y poner a prueba sus talentos, al apoyarlos contribuyes con el éxito de su marca al tiempo que realizas un acto de solidaridad y bondad. Otras manera de brindar tu apoyo es difundir entre tu red de amigos la iniciativa.
Acompaña a los mayores
Con la excusa de las responsabilidades cotidianas nos olvidamos de atender a todos los miembros de nuestra familia, sin tomar en cuenta que algunos de ellos solo espera de nosotros un poco de compañía y tiempo. El gesto de bondad más importante para los abuelos y padres es que le dediques unas horas a la semana. Con sus lecciones de vida y consejos, seguro tendrás una maravillosa cita familiar y guardarás hermosos recuerdos.
Felicita a un colega
Los ambientes laborales generalmente son competitivos, pero es donde pasamos el mayor tiempo de nuestra vida adulta. Utilizar palabras de aliento y amabilidad levantará la moral de algún compañero que bien merezca nuestro reconocimiento por su trabajo y a la vez, incentivará a otros a repetir esa actitud. Este gesto puedes repetirlo no solo en tu lugar de trabajo, algunas personas que nos sirven merecen también un reconocimiento, como el mesero que nos atendió en el almuerzo, la maestra de tu hijo, el conductor del autobús, el mecánico, etc.
Sé amable contigo
Sí, lo repetimos, sé bueno contigo mismo. Dedícate tiempo, recursos, palabras, buenos momentos y no te castigues por cosas que no están bajo tu control. Háblate amablemente, así como lo haces con otros, no te juzgues y recuerda que todo es posible.
Aprendemos el valor de la bondad desde que nacemos pues dependemos del cuidado y la atención de nuestros padres para sobrevivir y crecer. El significado de bondad está asociado a valores que aprendemos en nuestra crianza, como solidaridad, respeto y generosidad. Luego es nuestro turno de revertir esa amable enseñanza al entorno, ayudando a las personas en sus necesidades y aliviando a través de acciones el dolor de otros. Es prácticamente un ciclo de vida y bondad, que algunos en el mundo entendieron bien, como Gandhi, Juan Pablo II y Madre Teresa de Calcuta.