Los valores empresariales y todos los códigos éticos asociados a los mismos son elementos con mucho más valor dentro del mundo corporativo que el qué la mayoría de nosotros pudiésemos llegar a pensar. Gracias a los valores corporativos y su influencia sobre las políticas empresariales, es posible tener una comprensión mucho más profunda de ciertos aspectos fundamentales dentro de una empresa, como la forma en que la misma aborda las necesidades de sus clientes o cómo planea proyectarse dentro del mercado.
Niveles de gestión:
Definición, funciones y ejemplos de todos los niveles de administración (operativo, táctico, estratégico…)
Resulta prácticamente imposible abordar un tema tan complejo como son los valores empresariales y su rol dentro de todas las actividades de la empresa, sin entender cuán importante resulta la responsabilidad dentro del mundo de los negocios.
Lo cierto es que cuando se menciona el valor de la empresa en el mercado actual, se hace una referencia directa hacia todas aquellas características o cualidades las cuales pueden afectar de alguna manera la imagen o percepción de una compañía. Y ciertamente, no existen valores corporativos capaces de dejar una mejor impresión de una empresa, que la responsabilidad y seriedad con la que la misma asume sus compromisos con los clientes.
No debería sorprendernos que la honestidad, sea percibida como uno de los principales valores de una empresa dentro del mercado competitivo. Pues jamás debemos olvidar que para poder sobrevivir dentro del mundo de los negocios, es necesario contar con un cierto índice de credibilidad tanto con los socios como con los propios clientes.
Si se analiza esto desde el punto de vista de valores empresariales y cómo los mismos pueden influir sobre la opinión pública, se puede decir que una compañía honesta tiene grandes posibilidades de prevalecer dentro del mercado competitivo. Pues, se trata de una compañía que tiene muy en cuenta la confianza que depositan sobre ella cada uno de sus clientes.
La comunicación es clave para que una empresa sea capaz de prosperar y evolucionar dentro del mundo de los negocios, por eso esta cualidad es percibida como uno de los valores corporativos por excelencia.
De todos los posibles valores que debe tener una empresa, es realmente probable que la comunicación ocupe uno de los primeros puestos dentro de la lista de códigos éticos que forman parte de la filosofía de la empresa. El flujo de información es algo que forma parte del día a día dentro de cualquier corporación u organización, por lo tanto, no resulta algo tan descabellado que un elemento como la comunicación se postule como uno de los valores importantes en una empresa.
Probablemente, el trabajo en equipo sea una de las características que mejor se ajustan al propio concepto de valores de una empresa. Debido a que, a diferencia de otros valores empresariales, dentro de este se ve reflejado uno de los principios fundamentales del mundo de los negocios.
Si bien los esfuerzos individuales de un individuo pueden hablar bastante bien del mismo como profesional, en una empresa ocurren demasiadas cosas al mismo tiempo como para que una sola persona sea capaz de manejarlas eficientemente. Es aquí en donde el trabajo en equipo, empieza a cobrar mayor relevancia dentro de todos los principios éticos y morales asociados con los valores corporativos de una empresa.
Sentirse parte y plenamente identificado con la empresa también es un punto a tener en consideración dentro de los valores de un negocio. Esto se debe a que para poder proyectar una imagen positiva de la empresa hacia los socios y clientes de la misma, primero es necesario que los trabajadores se sientan cómodos y plenamente identificados con los valores empresariales que la misma promueve.
Teniendo en consideración la definición más común de qué son los valores de una empresa, resulta bastante fácil entender por qué el sentido de pertenencia es percibido como uno de los valores corporativos con mayor peso en la actualidad. Los trabajadores de una empresa son al mismo tiempo representantes y embajadores de la misma, esto nos obliga a un replanteamiento total sobre para qué sirven los valores en una empresa y cuáles elementos son capaces de afectar negativamente la percepción que el público puede tener sobre ella y las actividades que realiza.
Entre las características más frecuentemente asociadas directamente con empresa de valores, su postura con respecto al trato y las exigencias de los clientes son aspectos que puede verse reflejado con mucha facilidad en la mayoría de los valores corporativos que forman parte de su filosofía y sistema de trabajo.
Recientemente, tener una actitud mucho más consciente de las necesidades reales de cada persona o institución que hace uso de los servicios que ofrece la empresa se ha convertido en uno de los mejores ejemplos de valores organizacionales dentro de las instituciones. Principalmente, porque este tipo de actitudes reflejan un compromiso mucho más humano por parte de la empresa y le ayudan a establecer relaciones mucho más cercanas con sus clientes.
A pesar de que la humanización y el compromiso social de la empresa son aspectos básicos de los valores empresariales de una compañía; no se puede dejar de lado la calidad del producto y el papel que juega este aspecto dentro de qué son los valores en una empresa.
Es normal que para muchas personas perciban como una muestra directa de los valores corporativos de una empresa a la calidad de los bienes y servicios que ofrece dentro del mercado. Pues en sí, la calidad de sus productos habla mucho sobre otros aspectos de la organización, como la satisfacción de sus clientes y cuán relevante resulta es este factor dentro de los valores institucionales de una empresa.
Dentro del mercado competitivo no solo basta con tener un buen producto, también es importante que las empresas muestren cierto grado de eficiencia tanto durante el período de fabricación del mismo como en el proceso posventa.
Para muchos expertos en el campo de los negocios, la eficiencia en sí es una definición de valores de una empresa. Esto se debe a que dentro de la misma, entran en juego toda una serie de elementos que al final se traducen en el compromiso que la organización asume al fabricar y comercializar abiertamente productos destinados a satisfacer las necesidades del público.
Presentar un producto novedoso y único dentro del mercado es la finalidad de la mayoría de las empresas. Por esto, resulta imposible descartar a la innovación como uno de los valores empresariales que forman parte de la filosofía corporativa de muchos negocios en la actualidad.
Es bastante frecuente que al hablar de la innovación dentro de cuáles son los valores de una empresa, suela asociarse con los procedimientos de fabricación y el desarrollo de productos con características distintivas. Sin embargo, la innovación como parte de los valores corporativos de una organización también incluye otros aspectos como el rediseño y la actualización de productos ya disponibles dentro del mercado.
Cuando se habla de la seguridad como parte de los valores corporativos de una empresa, se tiene que estudiar como un término que involucra tanto a los individuos que laboran dentro de la empresa como a aquellos que hacen uso de los bienes y servicios que esta ofrece.
Pero a pesar de que la seguridad es una cualidad que involucra el seguimiento constante de muchos factores tanto internos como externos de la empresa, es uno de los valores corporativos que pueden ser exteriorizados con cierta facilidad mediante una política de trabajo bien definida y adaptada a los requerimientos exigidos por los organismos regionales e internacionales.
Es algo lógico entender cómo el empoderamiento ha empezado a ganar más fuerza dentro de la cultura organizativa de las empresas; hasta el punto de convertirse en un gran exponente de qué son los valores empresariales en la actualidad.
Cada profesional que hace vida dentro de la empresa cuenta con cierta influencia dentro de la institución, misma que le permite ser capaz de aportar ideas y opiniones que contribuyan de forma positiva al crecimiento del negocio. Este principio es justo el motivo que ha colocado al empoderamiento como una pieza clave dentro de los valores corporativos.
El mercado competitivo es un lugar que se caracteriza por cambiar de manera repentina y sin previo aviso, principalmente como consecuencia de los patrones de comportamiento de los clientes y cómo estos influyen en sus decisiones de compra. Teniendo esto en consideración, no resulta extraño que la adaptabilidad forme parte de los valores para una empresa.
Una empresa no puede darse el lujo de quedarse estancada. La reinvención y actualización constante de los productos que la misma introduce al mercado, son una necesidad constante de la compañía que la mayoría de las veces se puede ver reflejada en otros valores empresariales.
No hace falta ser un experto en negocios, para saber que la transparencia puede ser un elemento que habla bastante bien sobre el sistema de trabajo de una organización cuando se estudian con minuciosidad la mayoría de sus valores empresariales.
Ya que la transparencia no solamente permite crear una imagen mucho más positiva de la empresa como fabricante y comercializadora de bienes y servicios. También, es un factor crucial para iniciar relaciones de negocios mucho más duraderas; partiendo de la confianza que inspiran los valores corporativos de la organización y cómo los mismos son percibidos por los clientes y socios de la misma.
Psicológicamente, cuando una persona muestra verdadera pasión y compromiso por la tarea que realiza, es muy probable que esta característica le sea de mucha ayuda cuando llegue el momento de establecer vínculos emocionales con otros individuos. Pues este mismo principio también puede ser aplicado a los valores en la administración de una empresa.
Las compañías y organizaciones que muestran verdadera pasión por los productos que fabrican, son instituciones que despiertan un enorme sentimiento de empatía en el público. Esto no solo es beneficioso para su imagen corporativa; además, sirve como un refuerzo ético para el resto de los valores empresariales que forman de la filosofía corporativa.
Resiliencia es una habilidad la cual consiste en cultivar y desarrollar las destrezas necesarias para hacerle frente a las situaciones adversas. Lógicamente, esta cualidad resulta ser de gran ayuda también para el desarrollo y el crecimiento de las organizaciones dentro del mundo corporativo, especialmente cuando hablamos del conjunto de valores dentro de una empresa.
Aunque la mentalidad positiva es otro atributo importante dentro de los valores empresariales, también es necesario que las empresas estén consientes de los peligros y riesgos que asumen al ingresar al mercado competitivo. Exactamente de esto se trata la resiliencia dentro del mundo de los negocios, estar consientes del riesgo real de cada decisión que se toma y aprender cuál es la forma más inteligente de abordar los problemas.
Dentro de una compañía, siempre tiene que prevalecer la intención de querer expandirse, mejorar y ofrecer únicamente los productos de la más alta calidad a los consumidores. Todo esto puede ser sintetizado en una sola palabra y es ambición.
Es algo muy común que la mayoría de los valores empresariales de una organización, sean establecidos tomando en cuenta los recursos disponibles en la actualidad y dé que forma los mismos pueden convertirse en herramientas para estimular el crecimiento y consolidación de la compañía en el futuro. Ser ambicioso es algo muy positivo dentro del mundo de los negocios, siempre y cuando dichos planes estén sustentados por capacidades reales que posee la empresa para alcanzar dichos objetivos.
Dar un trato equitativo a cada una de las personas que interactúan con la organización es otro de los mejores ejemplos de valores en una empresa que puede influir enormemente en cómo la opinión pública percibe los productos y actividades asociadas a la misma.
Incluso en un medio ambiente tan incierto y que cambia de forma tan violenta como el corporativo, muchas compañías conciben a la justicia como uno de los principales valores organizacionales dentro de su filosofía como empresa. Debido a que actuar de modo racional y justo con todos sus trabajadores y socios, es un requerimiento para hacer que los mismos se sientan mucho más comprometidos con el resto de los principios éticos que se refleja la compañía a través de sus valores empresariales.
El hecho de que en el mundo de los negocios sea necesario tomar decisiones, no quiere decir que cada movimiento estratégico de la compañía debe convertirse en un salto al vacío. Y es justo en este punto donde la prudencia sale a relucir como uno de los valores empresariales más importantes dentro de la cultura corporativa.
Sin embargo, la prudencia tampoco tiene por qué convertirse en un sinónimo de esperar a que los vientos soplen a nuestro favor. Visto desde una perspectiva más estratégica, ser prudente significa tener a la mano los datos necesarios para entender la situación actual de la empresa y comprender de qué forma sus cualidades le serán de ayuda para enfrentar las consecuencias que traigan consigo cada una de las decisiones administrativas que se tomen.
Resulta prácticamente imposible hacer un listado sobre los valores de la administración, sin detenernos a considerar el valor real de las ideas nuevas para una empresa y cómo las mismas pueden serle de utilidad para proyectarse de la manera que se desea.
Tener apertura a las nuevas ideas, es más que solamente buscar formas más eficientes y prácticas de mejorar el rendimiento de la empresa. Se trata más de hacer un replanteamiento de los procedimientos y valores empresariales que posee la compañía, con la finalidad de crear un ambiente laboral mucho más confortable y adecuado a los requerimientos de la vida moderna.
Resulta inevitable no percibir a la capacidad de darle solución a los problemas como un requerimiento básico dentro de cualquier organización, el cual resulta conveniente que se vea plasmado en la mayoría de los valores empresariales y principios éticos que representan a la misma.
Hoy en día, para muchas empresas brindar soluciones rápidas y eficientes a cualquier problema o dificultad se ha convertido en el principal objetivo de su filosofía corporativa. Pero, la resolución de problemas como parte de los valores empresariales de una organización va mucho más allá de solamente satisfacer las necesidades de sus clientes a través de los bienes y servicios que esta ofrece.
Como hemos visto a lo largo de todo este artículo, el tema de los valores empresariales no es solamente la agrupación sistemática de códigos morales y éticos que describen la forma en que trabaja la empresa. Los valores corporativos dentro del mundo de los negocios, representan todas aquellas virtudes que la compañía considera prioritarios para conservar una relación más estale y respetuosa con cada uno de los individuos que de alguna manera u otra; se ven afectados por los procedimientos y actividades requeridas para la elaboración y comercialización los productos que la empresa ofrece al mercado.