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Este 2022 se retomaron muchísimos viajes que fueron pospuestos después de la pandemia por COVID-19. Y aunque es emocionante volver a recorrer diferentes lugares a lo largo del mundo, es importante tener en cuenta algunas precauciones para lograr una experiencia segura y cómoda para todos, especialmente si se trata de viajes al extranjero.
1. Restricciones sanitarias y prevenciones de salud
Al estar lejos de casa resulta más complicado atender cualquier complicación de salud que pueda presentarse. Por esta razón es clave, además de planificar actividades de entretenimiento, que se incluya un sistema de protección personal.
Teniendo en cuenta el destino, los expertos que realizan la prueba PCR Covid Bizkaia (que se exige como requisito de entrada en muchos países) también recomiendan plantearse la contratación de un seguro de salud para viajeros y la implementación de vacunas internacionales o vacunas específicas solicitadas por algunos gobiernos.
Hay que entender que existen factores externos que pueden perjudicar la salud de un turista, más aún cuando el destino es un lugar exótico y drásticamente diferente al lugar de origen.
Por ejemplo, el consumo de agua no embotellada, el exceso de condimentos tradicionales que pueden causar intoxicación o alergias, cambios drásticos de temperaturas, contaminación del ambiente, etc.
2. Presupuesto realista y trámites administrativos
Muchos creen que reunir el dinero necesario para un viaje es más que suficiente, pero se olvidan de que al viajar al extranjero se deben tener en cuenta algunos temas adicionales como el cambio de divisas, el uso de tarjetas de débito o crédito con cobertura internacional…
Esta puede ser, quizás, la parte más aburrida de la planificación de las vacaciones, sin embargo, es de las más importantes. Todos los destinos turísticos ameritan algún trámite administrativo, desde visas, permisos, gestiones bancarias para poder realizar los pagos, reservas para alojamientos o alquileres de espacios vacacionales, y muchas otras cosas.
Especialmente cuando se trata de estancias o visitas en temporadas altas, es recomendable realizar todos estos procesos con antelación para poder disfrutar de una experiencia sin inconvenientes.
Cabe resaltar que cuando se establece el presupuesto para un viaje, hay que considerar cuál es el costo de vida en el destino elegido. Si es una ciudad cara o si el tipo de actividades a realizar requiere de pagos significativos influye directamente en la planificación final. Elaborar una estructura realista y acorde a los posibles gastos es clave.
3. Ciberseguridad
La ciberseguridad durante el periodo vacacional es quizás el elemento que más pasa desapercibido por todos los usuarios. Sin embargo, es muy común que esto se convierta en un gran problema fuera de casa, llegando a empañar la felicidad de cualquier viaje.
Un caso bastante frecuente es el robo de identidades o información bancaria debido al uso de redes Wifi-abiertas, o estafas vía correo electrónico con promociones falsas de alojamientos o paquetes turísticos.
La recomendación es evitar las conexiones públicas, descargar imágenes o hacer clic en enlaces no comprobados y verificar por todas las vías posibles el origen de la información en línea.
Tener en cuenta estos consejos puede ser la clave para tener unas vacaciones sin sobresaltos.
